
“Paint It, Black”, “Start Me Up”, “(I Can’t Get No) Satisfaction”, “Gimme Shelter”, “Sympathy for the Devil”, “Angie”… podría seguir un par de días escribiendo las canciones más icónicas y conocidas de The Rolling Stones. Sus Satánicas Majestades tienen el orgullo de ser la única banda en activo que ha dado la banda sonora en clave rockera de seis décadas de historia.
Los Stones iniciaron su periplo en el mundo del blues rock en el muy lejano 1962 y no han dejado nunca la actividad pese a la muerte de varios de sus componentes clave como Brian Jones en 1969 y, más recientemente, su querido batería Charlie Watts, quien dejaba sus baquetas huérfanas tras casi seis décadas años golpeando los parches.
Apurando ya su carrera, los Stones tendrían que pasar por Europa (si los astros lo permiten, evidentemente) este verano para celebrar con sus queridos fans los 60 años de carrera. Aunque informaciones no oficiales de estos últimos días afirman que no habrá gira. Hace muchos años que se comenta el típico “seguramente será su última gira”, pero visto lo visto, solo la muerte acabará frenando a los Stones.
Un servidor ya ha empezado a calentar motores con la esperanza de lograr asistir a alguno de los conciertos de la futurible gira. Para hacer honor a la grandeza de los británicos, voy a hacer este pequeño Top 5 en el que recojo cinco canciones inmensas que han caído en el olvido. Algo entendible, pues competir con las grandes gemas de su catálogo es complicado.
«Play With Fire»
Álbum: Out of Our Heads (1965)
Autores: Naker Phelge (Mick Jagger, Keith Richards, Brian Jones, Charlie Watts y Bill Wyman)
Nanker Phelge es el seudónimo usado por The Rolling Stones para sus composiciones colectivas.
“Play With Fire” es una de las canciones más melancólicas y atmosféricas de los británicos, lanzada en 1965 como cara B del sencillo The Last Time. A pesar de ser una cara B, “Play With Fire” se ha convertido en una de las canciones más queridas por los fans de los Stones. Su sonido oscuro y su estructura poco convencional la convirtieron en una pieza destacada dentro de su repertorio temprano.
La canción tiene un sonido inusualmente introspectivo para los Stones de esa época, con una instrumentación minimalista que incluye guitarra acústica, clave, bajo y una percusión muy sutil. La grabación de la canción se hizo de manera inusual, ya que ni Brian Jones ni Charlie Watts participaron en la sesión. En su lugar, Phil Spector tocó el bajo y Jack Nitzsche, un frecuente colaborador de la banda, se encargó del clave.
Para los que anden perdidos, un clave (en inglés, harpsichord) es un instrumento de teclado de cuerda pulsada, muy popular en la música barroca. Se parece a un piano, pero su sonido es más brillante y metálico, ya que en lugar de martillos golpeando las cuerdas (como en el piano), el clave tiene un mecanismo de púas que las rasgan cuando se presionan las teclas.
La letra de la canción refleja el tono cínico y desafiante que caracterizaba a Mick Jagger en esa época. Habla de una mujer de la alta sociedad que vive rodeada de lujos, pero que, si no tiene cuidado, podría perderlo todo. La frase «But don’t play with me, ‘cause you’re playing with fire» («No juegues conmigo, porque estás jugando con fuego») es una advertencia directa, con un tono de desprecio hacia las élites.
Muchos han interpretado la canción como una crítica a la aristocracia británica, e incluso algunos creen que podría haber referencias personales a la entonces pareja de Jagger, Chrissie Shrimpton, cuya familia era parte de la alta sociedad londinense.
«Connection»
Álbum: Between the Buttons (1967)
Autores: Mick Jagger y Keith Richards
Between the Buttons es el quinto álbum de estudio británico y el séptimo en los Estados Unidos de The Rolling Stones, lanzado en 1967. Es un disco que marcó una transición importante para la banda, alejándose del sonido crudo del blues y el R&B de sus primeros trabajos para adentrarse en terrenos más experimentales, con influencias del pop psicodélico, el folk y la música barroca. Se nota la influencia del pop británico de la época, con melodías pegadizas, uso de instrumentos poco convencionales (como el clavecín y la marimba) y letras más irónicas.
Una de sus canciones más memorables es esta «Connection» que hoy os presento, pese a que la más famosa (y nadie va a poner en duda que simplemente es la mejor del plástico) es «Ruby Tuesday», siempre me ha apasionado esta «Connection». Escrita por Mick Jagger y Keith Richards, la canción captura el sonido enérgico y crudo de la banda, con una instrumentación directa y un riff pegajoso que la convierte en una de las joyas ocultas del disco.
La canción tiene una estructura sencilla pero efectiva, con un riff de guitarra poderoso y un ritmo constante que recuerda a sus raíces de rock ‘n’ roll. Es una de las canciones en las que Keith Richards canta junto a Mick Jagger, lo que le da un carácter especial. Su sonido es más garage rock y menos refinado que el resto del álbum, lo que la hace destacar entre las canciones más experimentales de Between the Buttons.
La canción es corta (menos de tres minutos) y directa, con una energía contagiosa que la hace sentir como un himno de carretera. La canción habla de la frustración de estar constantemente viajando y buscando «conexiones», ya sean de vuelos, giras o relaciones. Algunos creen que la canción alude a los problemas que los Stones empezaban a enfrentar con la ley debido a su consumo de drogas.
Nunca sabremos a ciencia cierta de que trata la canción, ¡lo importante es disfrutarla!
«Shine a Light»
Álbum: Exile on Main St. (1972)
Autores: Mick Jagger y Keith Richards
Si hay un álbum que encapsula la esencia del rock & roll en su forma más cruda, desordenada y auténtica, ese es Exile on Main St. de The Rolling Stones. Publicado el 12 de mayo de 1972, este doble LP es considerado una obra maestra y, para muchos, el mejor álbum de la banda. En él, los Stones llevan su sonido al límite, fusionando blues, rock, gospel, soul y country en un torbellino sonoro que refleja la vida descontrolada y salvaje de la banda en ese momento.
A diferencia de otros discos más pulidos de los Stones, Exile on Main St. tiene un sonido rugoso, oscuro y crudo. Hoy voy a hablaros de la canción «Shine a Light». Se trata de es una de las canciones más emotivas y espirituales de los Stones. Con una mezcla de rock, gospel y soul, el tema se destaca por su profundidad lírica, su energía casi religiosa y su poderosa instrumentación. Es un tributo a la pérdida, la redención y la lucha contra la autodestrucción, con un trasfondo muy personal para la banda.
La historia de «Shine a Light» se remonta a mediados de los años 60 y está directamente relacionada con Brian Jones, el miembro fundador de los Rolling Stones que murió trágicamente en 1969. La canción originalmente se titulaba «Get a Line on You» y fue escrita por Mick Jagger en un intento de ayudar a Brian Jones, quien en ese momento estaba atrapado en un espiral de drogas y aislamiento dentro de la banda. La letra expresa preocupación por un amigo perdido en el exceso, describiendo a alguien desorientado, en problemas y atrapado en la oscuridad. Cuando Brian Jones murió, Jagger y Richards reescribieron partes de la canción, convirtiéndola en una especie de oración de despedida y en un himno de esperanza en medio de la decadencia.
Poco más que añadir para que uno comprenda la emotividad de esta grandiosa canción. Una obra maestra.
«Where the Boys Go»
Álbum: Emotional Rescue (1980)
Autores: Mick Jagger y Keith Richards
Emotional Rescue, lanzado el 20 de junio de 1980, es el álbum número 15 de The Rolling Stones y marcó una nueva fase en su sonido. Después del éxito arrollador de Some Girls (1978), donde exploraron el punk y la música disco, los Stones decidieron seguir en esa línea, pero con un enfoque aún más bailable, funk y new wave. A finales de los 70, la música disco, el funk y el new wave estaban dominando las listas de éxitos. Mientras muchas bandas de rock tradicional resistían estos cambios, los Stones hicieron lo contrario: se adaptaron y evolucionaron.
«Where the Boys Go» es una de las canciones más crudas y agresivas del álbum Emotional Rescue (1980). A diferencia del sonido más bailable y disco de otros temas del disco, esta canción es puro rock ‘n’ roll acelerado, con una vibra punk y espíritu callejero.
Es un tema que captura la energía juvenil y rebelde de la época, con una letra que refleja la actitud fiestera y desenfadada de los Stones. El sonido de las guitarras crudas y distorsionadas recuerda a bandas punk como los Sex Pistols o The Clash, aunque con un toque más clásico de los Stones.
La canción habla sobre la emoción de salir con amigos en busca de fiesta y chicas, con una actitud despreocupada y rebelde. Jagger canta sobre la emoción de salir un sábado por la noche, encontrarse con los amigos y vivir el momento sin importar nada más. Es un reflejo del espíritu juvenil y de la cultura de pubs y bares en el Reino Unido.
Sin embargo, el tono de la canción tiene un aire de sarcasmo, como si Jagger estuviera burlándose de la mentalidad machista y fiestera de algunos chicos. Este contraste se refuerza con el coro femenino al final, que canta en un tono burlón y desafiante, casi ridiculizando la actitud de los protagonistas de la canción.
Emotional Rescue es un álbum divertido, bailable y experimental, pero también tiene algunos momentos irregulares. No es el disco más icónico de los Stones, pero sí una muestra de su capacidad de adaptarse a las nuevas tendencias sin perder su esencia.
«Hang Fire»
Álbum: Tattoo You (1981)
Autores: Mick Jagger y Keith Richards
Tattoo You (1981) es uno de los álbumes más icónicos de la banda y, para muchos, el último de sus grandes clásicos. Aunque la banda ya estaba en su tercera década de existencia, este disco mostró que aún podían hacer magia, combinando su característico rock & roll sucio con un toque más sofisticado y melódico. A diferencia de otros discos, Tattoo You no fue grabado de manera convencional, sino que se creó a partir de sesiones descartadas de los años 70, con muchas canciones que habían sido olvidadas o inacabadas.
El álbum equilibra perfectamente la energía del rock ‘n’ roll con momentos más relajados y melancólicos. Aunque las canciones fueron grabadas en diferentes momentos entre 1972 y 1979, la producción hace que todo se sienta cohesionado y fresco.
El disco contiene una de las más monstruosas canciones de la banda, «Start Me Up». Uno de los himnos más grandes de los Stones y una de sus canciones más reconocidas. Su riff de guitarra icónico (casi reggae en su concepción original) y su pegajoso coro la convirtieron en un clásico instantáneo. Pero hoy voy a hablaros de «Hang Fire», una de las tapadas del disco y la crítica social más bailable de los Stones.
«Hang Fire» es la tercera canción del álbum y una de las más rápidas, pegadizas y políticamente cargadas del disco. Con una duración de apenas dos minutos y 22 segundos, es un tema de puro rock ‘n’ roll acelerado, con una estructura simple pero efectiva que captura la energía de los Stones en su mejor momento.
Fue lanzada como sencillo en 1982 y se convirtió en un éxito en las radios de rock, llegando al puesto 20 en el Billboard Hot 100 de los Estados Unidos. Aunque no es de los temas más populares de la banda, sigue siendo un favorito entre los fans por su energía, su letra sarcástica y su sonido rápido y directo. Tiene un ritmo acelerado, guitarras afiladas y un coro explosivo, muy influenciado por el punk rock y la new wave de finales de los 70.
Es una crítica social a la crisis económica que afectó a Reino Unido en los años 70, especialmente durante el gobierno de Margaret Thatcher. La canción habla de la falta de oportunidades, el desempleo y la apatía de la juventud británica.
Si buscas una canción poco conocida pero poderosa, vas a vibrar con «Hang Fire». ¡Un temazo!