50º Aniversario del Festival de Woodstock: 3 días de paz, amor y música

La imagen de Woodstock parecía el cuadro de ‘El Infierno’ de Dante.

– John Fogerty

En la actualidad solemos irnos de festival cada verano, y muchos se quejan del cartel, de los horarios, de la comida, de la zona de acampada, de que no hay zona de acampada, de los precios de la cerveza… De todo. Unas veces con razón, otras por el mero hecho de quejarse, pues es ya una tradición patria. Imaginaros viajar a través del tiempo y llevar a esta legión de haters a la madre de todos los festivales: Woodstock. Este fin de semana hace 50 años de que se llevó a cabo el festival de festivales y en el que los servicios, horarios y demás fueron un caos de proporciones bíblicas. Nadie pidió la hoja de reclamaciones en 1969.

En esos días Estados Unidos acababa de ganar la carrera espacial a Rusia pisando la luna y todo el país se encontraba en una nube. Neil Armstrong había hecho un pequeño paso para el hombre, pero uno muy grande para la humanidad. Pero esa felicidad no era completa, ni mucho menos, pues la Guerra de Vietnam estaba latente y llamaba a filas a la juventud del país. El infierno representado en “Apocalypse Now” de Coppola era una realidad, e incluso el marido de Joan Baez no pudo asistir al concierto de su mujer (embarazada) ya que estaba en prisión por haber optado por la insumisión. La situación política propició que el hipismo, abanderando el pacifismo, fuera la cultura dominante en la juventud. Una misma juventud que se rebelaba contra las ideas de sus padres no aceptando sus ideales, de aquí de que podamos hablar de contracultura hacia el establishment de los EEUU de Nixon.

Los problemas para llevar a cabo el festival se sucedían y la bola de nieve se fue haciendo grande. Probablemente cuando te dan un ‘No’ como respuesta para hacerlo en Woodstock ya puede ser indicativo de que la cosa no va a funcionar. Los organizadores buscaron una alternativa en los terrenos de Bethel, en Nueva Jersey, pero se mantuvo el nombre inicial: Woodstock. Un campesino cedió sus terrenos para ello ya que era activista pacifista. Definitivamente la historia ha visto el festival como un acto muy despolitizado, aunque sí estaba presente la oposición a la guerra. Las cifras hablan de que no hubo apenas violencia. Uno de los momentos más violentos acaeció justamente durante la actuación de The Who. Los ingleses iban calentitos pues les tocaba salir a las 5 de la mañana debido a los muchos retrasos horarios. Se subió a las tablas el activista Abbie Hoffman para hacer un discurso (sin avisar al grupo). La banda obviamente no se lo toma bien y Pete Townshend lo echa a ostias porque no sabe quien es. Luego se pidió perdón. Pero Roger Daltrey ya había amenazado al público de que si subía alguien correría una suerte parecida.

Aquí os dejamos las cifras para que os hagáis una ligera idea…

  • 3 días de festival del 15 al 17 de agosto de 1969
  • 33 conciertos
  • 2 nacimientos
  • 8 abortos
    2 muertos (atropello y drogas)
  • 500.000 asistentes, todo un récord que fue anunciado por megafonía. El espacio estaba habilitado para 50.000. Deberíamos recordar que en el 69 no había pantallas gigantes y del sonido que deberían oír las últimas filas… mejor ni pensarlo.
  • 190.000 compraron la entrada, el resto entró gratis tirando las vallas.
  • 1 millón de dólares de déficit, que sólo se recuperó diez años después gracias a la venta de derechos de la película del festival, ganadora de un Oscar (documental) y dos nominaciones (montaje y sonido). Tres horas de minutaje en la que es considerada, posiblemente, la mejor filmación de un festival. Si Woodstock es tan mítico es también gracias a ella.
  • 250.000 no pudieron acceder, pero viajaron hasta allí y se quedaron bloqueados en medio de la nada.

El caos

Una de las imágenes es la de miles de personas haciendo cola para llamar a sus padres. Por megafonía se van leyendo mensajes de padres preocupados pidiendo a sus hijos e hijas que les llamen. Yo viví la cola para llamar por teléfono en el Doctor Music de 1996 y tras dos horas y media de espera al llamar nadie me cogió el teléfono… Así que imagina con medio millón de espectadores.

Otra de las imágenes es la de gente subida al entramado de hierros que fprman la bastida para la mesa de sonido y los focos. No había mucho control y en algunos momentos y conciertos la torre estaba peligrosamente poblada.

No había comunicaciones por lo que algunos artistas no llegaban a tiempo, caso de Iron Butterfly. El primero en empezar fue Richie Havens que después de unos temas improvisó para que llegara a tiempo la siguiente banda. De esta improvisación nacería “Freedom”, uno de los himnos del festival. Es impresionante ver su actuación y pensar que lo que canta nace en ese momento. Fue su momento de gloria, tanto, que cuando murió pidió que esparcieran allí sus cenizas.

Comida y material sanitario fue enviado por el ejército hacia la zona cero. Podemos hablar con estos términos ya que al final del concierto las autoridades declararían el lugar de zona catastrófica.

Ausencias destacadas

  • Jethro Tull: Ian Anderson estaba en contra de esa ideología y del uso de las drogas, dijo que no.
  • Bob Dylan: no hubo acuerdo con los organizadores.
  • Beatles: problemas con los visados.
  • Rolling Stones: Jagger estaba grabando una película.
  • Led Zeppelin: no hubo acuerdo con los organizadores; empezaban gira por los EEUU y llegaron a considerar el festival demasiado pequeño…
  • Simon and Garfunkel: estaban grabando un disco.

Lo mejor

  • Joe Cocker: imprescindible su versión de los Beatles de “With a Little Help from My Friends” que curiosamente ya había tocado Richie Heavens. Tocó en Woodstock con el acompañamiento de “And the Grease Band” y tras su concierto vino la tempestad y la lluvia. Es bonito ver a los organizadores salir al escenario para cantar “Lluvia No” e intentar espantar el diluvio con cánticos y buenas vibraciones.
  • Santana: eran una banda de caché pequeño y poca fama. Gracias a Woodstock despegaron definitivamente.
  • Creedance Clearwater Revival: Fogerty nos dijo en el Azkena que la canción “Who Will Stop the Rain” nació de Woodstock. Vio desde el escenario a un chico elevando la mano al cielo y exclamando esta frase: “¿Quién parará la lluvia?”, aunque ha explicado otras versiones. El cantante no quedó especialmente contento del show en Woodstock.
  • Joan Baez: estando embarazada tiene unas palabras para su marido y hay imágenes suyas entre bastidores.
  • Ten Years After: su participación fue maravillosa, comandada por un Alvin Lee estelar. Les vimos en directo en el show del Calella Rock y fue estratosférico, así que imagina cómo sería 45 años antes… Se suele asociar su tema “I’d Love to Change the World” con el festival, pero nunca la tocaron allí.
  • Jimi Hendrix: salió a las 9 de la mañana, hizo un concierto de dos horas y casi sin público. La gente aprovechaba para largarse o ya se había ido. Se perdieron una de las actuaciones más emblemáticas del festival. Cabe resaltar el maravilloso himno americano en versión hendrixiana, un colofón al festival espectacular. Fue el artista con el caché más alto.
  • Country Joe McDonald: la canción anti-belicista “I-feel-like-I’m fixin-to-Die Rag” cantada por todo el público es uno de los grandes momentos del festival.

Las réplicas de Woodstock

Segunda encarnación de Woodstock 1994 conmemorando el 25 aniversario que será recordado como el Mudstock (Woodstock del barro) debido a las fuertes lluvias.

La tercera edición de Woodstock fue en 1999, una edición que seré recordada por los abusivos precios, incluyendo el agua. En The Simpsons hay un gag en el que Otto no puede permitirse comprar un agua para apagar el fuego que quema su pelo.

A principios de agosto se canceló la presente edición de Woodstock 2009 con ya el cartel anunciado. Los tiempos han cambiado y de Woodstock sólo habrá uno. Tres días que quedan para el recuerdo, tres jornadas de amor, paz y armonía entre el caos derivado de la improvisación y la adversidad de los elementos, por mucho que el filtro de la historia haya hecho que nos quedemos con la idea romántica y bella del evento. Estar allí tuvo que ser una experiencia horrible, pero fue un momento histórico espectacular. Si no has visto el famoso documental de más de tres horas es el momento ideal para hacerlo. La gracia del guion es avanzar entre la multitud y asombrarte de los sucesos, desde el apabullante show de Hendrix a la entrevista al hombre que limpia los retretes. Todo sin tomar parte en el asunto, todo desde la omniscencia. El uso de la pantalla partida es uno de los elementos técnicos más icónicos del metraje.

Si quieres revivir lo que fue Woodstock a lo grande te agradará saber que ha visto la luz la versión definitiva del festival, el boxset Woodstock 50: Back to the Garden – The Definitive 50th Anniversary Collection con 10 CD’s con casi todas las actuaciones completas.

Jordi Tàrrega
Sobre Jordi Tàrrega 1372 Artículos
Coleccionista de discos, películas y libros. Abierto de mente hacia la música y todas sus formas, pero con especial predilección por todas las ramas del rock. Disfruto también con el mero hecho de escribir.