Pocos músicos en el mundo pueden presumir de tocar (y haber tocado) en dos de las bandas más influyentes del panorama rock mundial de los últimos, tranquilamente, treinta años: Pearl Jam y Soundgarden. Estamos hablando del batería Matt Cameron, uno de los mejores exponentes de lo que fue el movimiento grunge de principio de los 90 y, posiblemente, uno de los tipos más tranquilos del universo.
Según parece, esto de grabar un disco en solitario es una de las asignaturas pendientes que el de San Diego lleva aparcando, una y otra vez, desde finales de los años 80, época bastante prolífica para él, musicalmente hablando. Es en esa época precisamente cuando surge la idea de Cavedweller, nombre bajo el cual el artista recopiló todas sus grabaciones caseras en solitario, y título también escogido para este, su álbum debut en solitario. La elección no es azarosa, ya que está inspirada en la novela del mismo nombre de la aclamada autora Dorothy Allison, que gira entorno a un tema que, desgraciadamente, está siempre de actualidad: la violencia doméstica.
El álbum verá la luz el próximo 22 de septiembre, pero ya podemos escuchar un primer adelanto en Spotify, «Time Can’t Wait». Todos los temas contenidos en este trabajo han sido escritos y producidos por el mismo Cameron quien, además, ha puesto también las cuerdas vocales y ha ejecutado las guitarras. Paradójicamente, él no ha sido el encargado de ponerle ritmo al asunto, pues es Mark Giuliana (Avishai Cohen, Matisyahu, David Bowie) quien está tras la batería. Tim Lefebvre (David Bowie, Elvis Costello, Sting) se ha encargado de grabar los bajos.
Tracklist:
1. Time Can’t Wait
2. All At Once
3. Blind
4. Through The Ceiling
5. One Special Lady
6. In The Trees
7. Into The Fire
8. Real And Imagined
9. Unnecessary
Tipo peculiar y entrañable criado a medio camino entre Seattle, Sunset Boulevard y las zonas más húmedas de Louisiana. Si coges un mapa, y si cuentas con ciertos conocimientos matemáticos, verás que el resultado es una zona indeterminada entre los estados de Wyoming, South Dakota y Nebraska. Una zona que, por cierto, no he visitado jamás en la vida. No soy nada de fiar y, aunque me gusta “casi todo lo rock/metal”, prefiero las Vans antes que las J’hayber.
