Hace años, un anuncio decía que las pilas Duracel era lo que más duraba. Pues bien, Alice Cooper vuelve con su vigésimo séptimo álbum para desmentir esa afirmación.
Vincent Damon Furnier, el verdadero hombre tras el maquillaje, a sus casi 70 años, es más que un rockstar, es todo un símbolo del estilo y un auténtico adelantado a su tiempo en cuanto al show business musical se refiere. Quien lo haya visto recientemente, no tendrá duda alguna de ello.
Este Paranormal (2017) trae, además, un par de sorpresas. Por un lado (y aparte de sus músicos habituales), cuenta con las colaboraciones de lujo de Billy Gibbons (ZZ Top), Roger Glover (Deep Purple) y Larry Mullen Jr. (U2). Por el otro, el álbum viene acompañado de un segundo disco con temas en directo de algunos de sus clásicos y dos canciones completamente nuevas que ha grabado con Neal Smith, Michael Bruce y Dennis Dunaway, miembros de la Alice Cooper Band original.
Resumiendo, Paranormal se compone de 10 temas que, según el propio cantante, no siguen un hilo conductor común, pero está orientado para sus fans de toda la vida, dos canciones nuevas con la Alice Cooper Band original y seis versiones en vivo de grandes clásicos. Todo un lujo.
Comenzamos con la homónima al álbum. Se basa en la progresión paulatina de sonidos, de menos a más. Los cambios de ritmo son tremendos. De hecho, cuando parece que se acaba, las guitarras se vuelven a arrancar y nos conducen al final certero. Plato fuerte para arrancar.
«Dead Flies» es hard rock puro y duro, además de uno de los temas álgidos del disco. «Fireball», tras una introducción curiosa, nos presenta a un Cooper con voz distorsionada que nos pateará el culo hasta llegar al estribillo, que aunque no sea ni de lejos el mejor del disco, sí es convincente. «Paranoiac Personality», primer single, demuestra por qué lo es. No cabe duda de que es de los temas más destacables de este trabajo.
«Fallen In Love» podría haber sido un gran clásico dentro de la discografía de los ZZ Top (se adivina ya quién colabora, ¿no?). Alice y los coros bordan el tema, aunque serán posteriormente los baquetazos violentos de batería y el soberbio solo de Gibbons los que convertirán este tema en un clásico. «Dynamite Road» demuestra que la capacidad de sorpresa de Cooper no tiene límites. Hard rock con claros guiños al country. «Private Public Breakdown» convence desde el primer instante con el riff machacón que la abre. No es un tema que sorprenda si lo comparamos con el resto, pero está bien.
«Holy Water» deja claro porqué este señor es toda una institución del rock. Una canción que sorprende a todo oyente por su carácter festivo y explosivo a la vez. Absolutamente imprescindible. «Rats» es hard rock 100% clásico. «The Sound of A» cierra el disco a lo baladón con aires depresivos.
A continuación vienen los dos temas grabados con la Alice Cooper Banda original. «Genuine American Girl» es una canción que enamora por su sabor a clásico. Es un auténtico placer poder disfrutar de estos colegas de toda la vida de nuevo tocando juntos, aunque se eche en falta al añorado Glen Buxton. «You And All of Your Friends» podría ser el resultado de mezclar a The Who y a los Sex Pistols.
Alice Cooper vuelve por la puerta grande con un disco sin fisuras, sorprendente y muy rico en variedad de sonidos.
Llevo en esto del heavy más de media vida. Helloween y Rhapsody dieron paso a Whitesnake y Eclipse, pero Kiske sigue siendo Dios.
Como no sólo de música vive el hombre, la literatura, Juego de Tronos y los tatuajes cierran el círculo.
Algunas personas dicen que soy el puto amo, pero habrá que preguntarles por qué.