Aphonnic – Indomables

Nuestra Nota


9 / 10

Ficha técnica

Publicado el 28 de octubre de 2016
Discográfica: Maldito Records
 
Componentes:
Chechu - Voz
Iago - Guitarra
Richy - Bajo
Alén - Batería

Temas

1. Ombligos (3:36)
2. Fruta fresca (3:41)
3. Cunfía (4:06)
4. Osos color salmón (3:34)
5. Aquellos maravillosos (4:05)
6. Cíclopes (4:12)
7. Amantes (3:35)
8. Honrada avestruz (3:10)
9. Jamás (3:37)
10. La deseada (4:15)
11. Sol de abril (4:40)

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Hoy me he levantado con la maquinaria a tope, y me me ha dado por agarrar el diccionario (práctica, por otro lado, bastante en desuso hoy en día). Pero no he escogido cualquiera, pues me he venido arriba y me ha dado por echarle un ojo al de la Real Academia Española de la Lengua. Esto es lo que me he encontrado al buscar el vocablo “himno”:

1. “Composición poética en loor de los dioses o de los héroes.”
2. “Composición poética en alabanza de Dios, de la Virgen o de los santos.”
3. “Composición poética o musical cuyo objeto es exaltar a un gran hombre, celebrar una victoria u otro suceso memorable o expresar júbilo o entusiasmo.”
4. “Composición musical emblemática de una colectividad, que la identifica y que une entre sí a quienes la interpretan.”

Y… ¿por qué? Pues porque es la primera palabra que a uno se le viene a la mente cada vez que escucha algo de Aphonnic. Porque hay pocas bandas nacionales capaces de despertar tantas emociones y porque, señoras y señores, estos golfos son capaces de componer desde el corazón, otra práctica también bastante en desuso hoy en día. Pasen y vean; no se arrepentirán. Abridles las puertas y, una vez dentro, cerradla y lanzad la llave bien lejos para evitar que se escapen, pues tener a genios así bien cerquita siempre es de agradecer.

Lo han vuelto a hacer. Estos vigueses, con una carrera de más de diez años a sus espaldas, son capaces de reinventarse álbum tras álbum. Desde que publicaran Silennce (2003) y hasta este Indomables (2016) que aquí nos ocupa, la banda ha venido dejando bastante claro que eso de las etiquetas no va con ellos. El rap metal de sus primeras dos obras, dio paso a un sonido más adulto e impecable, cantando ya en castellano, con 6 bajo par (2009), el cual les dio a conocer al gran público. Pero no fue hasta el año 2013 que publicaron el que, posiblemente, sea uno de los mejores discos de rock nacional de los últimos -tranquilamente- diez años. Héroes es una maravilla de cabo a rabo. Te deja sin aliento desde el primer minuto, y el orgasmo no cesa hasta que el bueno de Chechu no pronuncia “su ignorancia tendrá, tendrá mi discurso”.

El “sonido Aphonnic” ha venido labrándose y creciendo con el paso de los años, himno tras himno, golpe a golpe, verso a verso. Sus emblemáticas creaciones poético-musicales (por aquello de homenajear a nuestros catedráticos arriba citados) hacen que reconocer a Chechu, Iago, Richy y Alén sea muy, pero que muy fácil. Y buena parte de culpa la tiene, tal y como ellos mismos reconocen, el productor de sus últimas dos entregas; un señor portugués llamado Vasco Ramos, vocalista de la banda de metalcore More Than A Thousand, que después de 16 años juntos han decidido tomarse un más que merecido descanso. Él ha sabido ver (no encontrar, pues ya estaba ahí) el potencial de nuestros protagonistas y llevarles un paso más allá gracias a una impecable y pulcra producción, y al “encabronamiento” del sonido que inunda sus himnos más recientes.

“Indomables” es una evolución lógica y coherente, a la altura de su predecesor “Héroes” (ambas obras que, por cierto, han visto la luz gracias a las aportaciones de los fans a través de la plataforma de micro mecenazgo Verkami); si bien los temas de ambos trabajos podrían mezclarse entre sí y dar a luz a un “héroe indomable”. El álbum tiene muchísima fuerza y su factura es impecable, y temas como “Luz y Fer” o “Mi capitán” encajarían a la perfección. Me cuesta reconocer que uno se mejor que el otro; me niego a hacerlo, lo siento, soy débil.

Vayamos por partes. El álbum se abre con “Ombligos”, épico y muy característico primer single. Todo lo que a uno le gusta de Aphonnic, está presente en este himno de poco más de tres minutos y medio de duración. Es, quizá, el tema más completo del álbum y ese “Vamos, aquí sigo en pie” sabe a gloria bendita. Es potente y descarado a partes iguales.

“Fruta fresca” es todo un tiro en la sien. La contundencia con la que suena la base rítmica y lo meticuloso del trabajo de guitarras, te deja sin aliento hasta la mitad del tema, momento en el que un piano abre el segundo y último acto, dando paso a esa típica melodía made in Chechu que adorna con maestría los últimos dos minutos del tema y, en general, todos y cada uno de los himnos que componen este trabajo.

Un sintetizador, fiel amigo de la banda desde prácticamente sus inicios, te acompaña a lo largo de todo “Cunfía”, y al igual que sucede en el anterior tema, le épica entra en acción hacia la mitad del himno. Si es la primera vez que escuchas hablar de esta banda, quizá ya te empiecen a sonar familiares estos adornos y los detalles con los que les gusta envolver todas y cada una de sus composiciones. Seguramente, su estribillo resuene todavía en tu cabeza. Marca de la casa.

“Osos color salmón” es de los temas más guitarreros y, quizá, también de los más emotivos, en parte también por la presencia de los sintetizadores, interpretados, si mal no recuerdo, por el propio Vasco Ramos. Estas orquestaciones son bastante novedosas en la banda aunque, ya desde los inicios de la banda, siempre los hemos ido encontrando a pequeñas pinceladas. Mierda, otra melodía que no me puedo sacar de la cabeza.

“Aquellos maravillosos” es una canción para todos aquellos que estamos entre los treinta y pocos y los casi cuarenta. Es, por decirlo de alguna manera, el tema más inocentemente adictivo del álbum; rememorando nuestros años mozos en la escuela, entre bocatas de mortadela y corredizas a la hora del recreo. “Los buenos consejos siempre llegan tarde”, dicen, pero nunca es tarde para descubrirles. Este es mi consejo.

“Cíclopes” se inicia con el buen hacer de Alén tras los tambores. Se trata de un medio tiempo salpicado de notas de agresividad, dando como resultado un himno, tan elaborado como creativo, donde los guturales ganan algo más de presencia.

Qué, ¿cómo va? Llegados a este punto uno ya ha tenido tiempo de enamorarse de ellos. Seguimos adelante, ¿no? “Amantes” tiene mucho beat y es de los temas más pegadizos dentro de “Indomables”. Estas melodías son exquisitas y todavía nos quedan cuatro himnos más con los que deleitar nuestros oídos.

Es hora de “Honrada Avestruz”, toda una apisonadora sonora. Agresiva, potentísima y directa, hará las delicias de los fans más hardcore de la banda. “Que os follen” si no os gusta, pues a mí me encanta y prometo desmelenarme cuando la toquen en directo durante su próxima gira. Os recomiendo no esconder la cabeza bajo tierra y dejar que esos riffs recorran toda vuestra anatomía.

“Jamás” va de un lado a otro con sublime maestría. El piano inicial te acompaña por el loop de melodías que atraviesan todos y cada uno de sus versos. Otro estribillo épico más para la saca, y ya van unos cuantos; pero mi saca es grande y cabe de todo (lo bueno), siempre y cuando haya alguien -como estos gallegos- con ganas de contar y cantar bien las cosas.

El sintetizador toma las riendas al inicio de “La deseada”. Quizá se trate del himno “menos complicado” de los once que componen este monstruo llamado “Indomables”. Melodías más bien tirando hacia el terreno de la música pop más comercial, apto para todos los públicos… con cierto buen gusto musical, claro está.

“Sol de abril” cierra el álbum tal y como se abre. Se trata de otro trallazo más que te deja por las nubes, unos hidrometeoros que ya uno alcanza desde el minuto uno. Es directa y descarada como lo es “Honrada avestruz”; es apoteósica como lo es “Ombligos”; es intensa como lo es “Fruta fresca”; es delicada como lo es “Cíclopes”. Es un punto y final con un par de cojones.

Que alguien me acerque una escalera, la más alta y larga que encuentre, pues la necesito para volver a tocar tierra. Indomables es una puta bomba. Es una locura de disco que ha venido para quedarse y para poner a cada uno en su sitio. Es la consagración de estos muchachos, si es que acaso necesitan que, tras la edición de Héroes, alguien tenga que recordarles el lugar que por derecho, saber hacer y méritos propios, se han labrado y ganado en el panorama del rock nacional. ¡Bravo, habéis grabado una JOYA!

No dejéis pasar la oportunidad de verles en directo el próximo año, pues os arrepentiréis si no lo hacéis. De momento, tienen fechas anunciadas hasta el mes de julio.


Artículo publicado originalmente en Metal Symphony Website: https://www.metalsymphony.com/aphonnic-indomables-maldito-records/.

Rubén de Haro
Sobre Rubén de Haro 620 Artículos
Tipo peculiar y entrañable criado a medio camino entre Seattle, Sunset Boulevard y las zonas más húmedas de Louisiana. Si coges un mapa, y si cuentas con ciertos conocimientos matemáticos, verás que el resultado es una zona indeterminada entre los estados de Wyoming, South Dakota y Nebraska. Una zona que, por cierto, no he visitado jamás en la vida. No soy nada de fiar y, aunque me gusta “casi todo lo rock/metal”, prefiero las Vans antes que las J'hayber.