La historia reciente de As I Lay Dying se puede resumir en un adjetivo bastante claro: convulsa. Desde el momento en que pude empezar a escuchar el disco hasta hoy que sale publicado han pasado nuevos acontecimientos como la cancelación de la gira europea y la salida de todos los miembros de la banda. Ahora mismo, Tim Lambesis se ha quedado, de nuevo, solo.
Recordaremos que tras la encarcelación de Lambesis y su puesta en libertad, la banda publicó un asombroso y esperado nuevo disco titulado Shaped by Fire (2019), disco que por cierto ha desaparecido misteriosamente de las plataformas de streaming. Pero el real descalabro de As I Lay Dying empezó a los meses de la publicación del disco citado y vino con la salida el año 2020 de Nick Hipa y en 2022 del batería Jordan Mancino y el bajista Josh Gilbert. En 2022 la banda se reinventó con tres nuevas figuras: Ryan Neff en el bajo y segundas voces, Nick Pierce en la batería y Ken Susi en la guitarra. Los tres son los que estos días han abandonado el barco, justo unos días antes de que Phil Sgrosso, en la banda desde el año 2003, hiciera lo mismo. Entonces, uno se encuentra tan perdido escuchando el disco como igual de perdido está Tim Lambesis en su incesante búsqueda de un equilibrio vital. No lo tiene fácil, pero también podemos suponer que no es un tío fácil.
Resumido con cuatro pinceladas este lustro que separa el magnífico Shaped by Fire (2019) y este nuevo Through Storms Ahead (2024), una inestabilidad que básicamente ha colapsado en el resultado final de este nuevo disco. Pues Through Storms Ahead no llega al mínimo aceptable para una de las mejores bandas del género. Si bien es cierto, el disco suena 100% a As I Lay Dying, éste carece de alma y solamente hay destacable dos canciones que si superan la media: “A Broken Reflection” y “Burden”.
El sucedáneo de canciones que forman el disco es totalmente básico. El disco va saltando de canción a canción sin mostrar nada relevante. Solamente músculo, juego de voces guturales vs limpias, riffs secundados por batería atronadora. De hecho, tengo que viajar a su disco debut para encontrar un disco más flojo que este que hoy nos ocupa.
Through Stroms Ahead arranca con la potencia desmesurada de “A Broken Reflection” tras una insustancial intro instrumental titulada “Permanence”. Con “A Broken Reflection” podemos ver que el cambio de miembros no ha aportado nada nuevo, sino que se han remplazado pieza por pieza buscando el mismo sonido y mismo estilo que en toda la discografía de la banda. Seguimos con “Burden”, otra gran canción interpretada a velocidad de vértigo, en ella vemos una interpretación muy musculosa incluso en la forma ya potente de cantar de Tim Lambesis. Ambas canciones pasarán directamente a fijas en las giras (si las hay) venideras. Tras “Burden”, empieza la cara más real del disco. La de seguir con el piloto automático sin relucir, sin aportar nuevas ideas y siendo totalmente plano. De todo lo que queda podríamos destacar “We Are the Dead” que tiene ciertas ideas nuevas en parte gracias a la colaboración de Alex Terrible y Tom Barber.
Así, con bastante pena, pues As I Lay Dying son una de las bandas a la que más apego tengo en los últimos 15 años, admito que este nuevo disco me ha decepcionado. Sin ser un mal disco, ojo, pero no llega a lo que una banda como esta debería llegar. Vientos de tormenta en el seno de una banda ya de por si atormentada. Veremos cómo evoluciona todo.