Hoy estoy abordando el 20⁰ Aniversario del controvertido décimo primer trabajo de Bad Religion. The New America (2000) es posiblemente uno de los discos más infravalorados de los de Greg Graffin. Y no solamente esto, pues también comparte con su predecesor No Substance (1998) el honorífico título al “más malo”. Personalmente, sí creo que este último sea el más flojo, pero para nada considero The New America un disco malo, ni siquiera un disco regulero.
Para poneros en contexto, The New America tenía que ser el último disco de la banda con el sello Atlantic. También fue el último disco sin la figura de Brett Gurewitz quien abandonó la banda en 1994 tras el fenomenal Stranger Than Fiction (1994). La marcha de Brett marcó un bajón creativo en la banda californiana, es preciso comentar que el guitarrista compartía el papel de compositor con Graffin. Su ausencia se tradujo en tres discos, el imponente The Gray Race (1996) que arrastró la tendencia ganadora de la banda, con No Substance (1998) las ideas se agotaron y la banda no sólo podía tirar de las excelentes letras de Greg para crear un disco digno. Con The New America, el cambio de milenio, las meteduras de Bill Clinton y el divorcio del propio Greg Graffin marcaron que este disco fuese el más intenso y personal en cuanto a temática de las letras.
Compuesto al 100% por Greg Graffin, el disco tiene la peculiaridad de tener dos portadas diferentes, una para EEUU y otra para el resto de mundo. Además, en la versión Japonesa y Europea, el disco cuenta con dos bonus tracks y dos B-Sides. Con lo que The New America acabará contando con 17 canciones. Grabado en la paradisíaca isla de Kauai y producido por Todd Rundgren, el disco promocionado por el single “New America” resulta exitoso y se coloca en el número 88 de la prestigiosa lista Billboard 200.
Otro detalle importante y trascendente es el regreso “esporádico” de Brett Gurewitz para interpretar la pista de guitarra en la canción “Belive It”, hecho que ilusionó a los fans de la banda ante una posible nueva alianza con el guitarrista fundador.
En cuanto al disco que al final es lo que nos interesa a todos, The New America cuenta con algunas gemas que seguramente mucha gente habrá omitido en sus vidas. Sin duda alguna el mejor corte del disco es “Belive It”, una canción que se podría situar entre las mejores de la segunda etapa de Bad Religion. Con sus 3:43, la canción es super completa, con un gancho pegadizo terrible, un trabajo impecable de Greg en las voces así como un excelente uso de las guitarras, las más afiladas de todo el plástico.
“New America” situada en la cuarta posición es una canción excelente que basa en sus letras su máximo potencial.
Tenemos que salir de esta senilidad aislada, ciega y coja.
Despierta “La nueva América”.
Estamos marchando hacia la extinción con los ojos vendados.
Poner en peligro todo lo que hemos aprendido y nos damos cuenta.
¿Esto es ser sabio?
Críticas afiladas como nunca hacia la sociedad. Si en algo son especialistas es en poner de manifiesto la crítica social como nadie. Las melodías de la canción son también muy agradables. “1000 Memories” es otra canción enorme en este disco,se trata de un corte estandar de la banda de Los Ángeles, buen ritmo, buen coro y ágil. “A Streetkid Named Desire”, “You’ve Got A Chance”, “It’s A Long Way To The Promise Land” son todas canciones notables totalmente disfrutables.
Y curiosamente encontramos dos cortes muy controvertidos, “I Love My Computer” y “Whisper In Time”. La primera es una canción “tonta” pero muy divertida, la gente la odia pero para mi siempre es agradable escucharla con una sonrisa enrome en mi cara. Mientras “Whisper In Time” es una semi balada un tanto épica que me recuerda a mi juventud, con lo que el cariño que le tengo es infinito. El resto de cortes que no comento mantienen el tipo pero sin florituras.
Con todo esto solo pretendo acercar al lector el que para mi es el disco más infravalorado de la banda. Cabe recordar que Bad Religion nunca han hecho algo malo y podemos contar a puñados los temazos que han creado a lo largo de estos 40 años de carrera. Posiblemente estamos frente a la banda más fiel del rock.