Este 22 de mayo es un buen día para los amantes del sonido heavy psych, el stoner y la psicodelia, ya que los italianos Black Rainbows vuelven tras dos años de silencio con un nuevo álbum bajo el brazo, Cosmic Ritual Supertrip (2020), un título muy bien elegido ya que este disco te pega un buen viaje directo al espacio. De nuevo producido por Fabio Sforza y como no, bajo el sello Heavy Psych Sounds, cuyo creador Gabirele Fiori también es guitarrista, cantante y alma de esta banda romana, este plástico es un más que digno sucesor de su anterior trabajo, Pandemonium (2018).
Este power trio lleva ya más de 10 años repartiendo arena del desierto por el cosmos mezclando de una manera impecable los sonidos más fuzz de principios de los 90 con la psicodelia atmosférica más propia de los 70, estilo que otras bandas modernas también han adoptado en los últimos años como son Kadavar o The Shrine. ¿Qué puede fallar?
Aunque no siempre es justo comparar, también veo en ellos destellos de bandas tan influyentes en la escena como lo fueron Kyuss o Fu Manchu en su sonido, y este viaje cósmico no demuestra lo contrario. En él podemos encontrar trallazos muy directos de puro stoner como “At Midnight You Cry” o “Fire Breather”, perfectos para abrir y cerrar el disco respectivamente, donde predominan bases rítmicas muy rápidas sobre las que Gabriele se desenvuelve como quiere en las vocales y las cuerdas. Otros temas de corte más comercialillo como “Radio 666” que por momentos bien podría ser un tema de Kasabian, o “Isolation”, con un riff potente y pegadizo continuamente intercalado por punteos guitarreros al más puro estilo Tony Iommi, para dejarnos hacia la segunda mitad uno de los riffs más stoner del disco.
En “The Great Design” y “Hypnotized by the Solenoide” bajan algo las pulsaciones y se escucha por primera vez la guitarra de Fiori sin distorsión, con unos arpegios cargados de reverb en la primera de ellas, que sólo dura dos minutos, para devolver de nuevo la distorsión en el segundo, pero de una manera más suave que en los inicios del álbum, aunque la intensidad de este va subiendo gradualmente, dejando hasta el momento los dos temas más atmosféricos del álbum.
En “Master Rocket Power Blast” vuelve el sonido más puro del desierto con un ritmo más acelerado y riffs pesados, para continuar con “Snowfall” donde Fiori se queda a gusto con continuos solos sobre una potente base rítmica, predominando los agudos sobre los graves en la guitarra, para acabar con un bridge con toques de blues sobre un ritmo de batería a golpe de ride que es el broche perfecto para terminar uno de los mejores temas del disco. Este tema me recordó por momentos al sonido de los últimos álbumes de Nebula, donde Eddie Glass también cuela solos allá por donde le place.
“Glittereyzed” tiene un aire más alternativo y quizá menos clásico que su predecesor en el álbum, más tipo los americanos All Them Witches, banda que también me conquistó en su día, para luego oscurecerse “Sacred Graal”, donde el sonido se ralentiza con un toque más doom, al igual que en “Universal Phase”.
Para terminar, han tenido el detalle de dejarnos dos bonus tracks, entre los que destaco “Searching for Satellites Pt I & II”, tema completamente acústico con influencias orientales y cargado de psicodelia, haciendo gala de la gran versatilidad que tienen estos romanos que, a mi parecer, nos dejan un discazo de puro heavy psych sound, demostrando ser una de las bandas fuertes de este sonido en el panorama europeo, y que seguro me tendrá un par de días atrapado. Dados los tiempos inciertos que corren, es complicado saberlo, pero espero que podamos tenerlos pronto girando por nuestras salas.
Como rockero nacido en Canarias y en los 90 (¡El Nu Metal mola!), me pasé la infancia luchando en todos los recreos para poner mis discos; “…And Justice For All” siempre era uno de ellos.
En esto del rock desde que escuché por casualidad Deep Purple, a lo que siguió Led Zeppelin y ya no hubo vuelta atrás. Pasión por la música desde niño, prácticamente todos los estilos que derivan del rock, aunque un poco hater con el Glam. Guitarrista amateur, batería frustrado, y con ganas de adentrarme en este mundo como algo más que un hobby.