Ya hacía 20 minutos que don Mike Portnoy no anunciaba un nuevo proyecto… Solucionado, BPMD es la respuesta a tus preguntas y el nombre de su nueva agrupación. Tenemos aquí un intrascendente, aunque interesante, proyecto de versiones de clásicos del rock americano. Hay aquí una gran alineación de músicos a los que encabeza el enorme Bobby “Blitz”, cantante de Overkill. Luego todo un Phil Demmel (Vio-lence y ex de Machine Head) a la guitarra y Mark Menghi al bajo (Metal Allegiance). Un proyecto que es pura diversión y tira de patriotismo destacando lo más granado del pasado musical de las barras y estrellas en la década de los 70. Quizá de un proyecto con tan grandes estrellas hubiera estado bien sacar algo propio, pero al no ser así, pinta que la cosa se quedará en un mero bonito proyecto de estudio. Coincidiremos todas/os que el nombre de la banda tampoco les ha tomado mucho tiempo limitándose a las iniciales de los protagonistas. Tanto da, disfruta y redescubre temas que merecen su puesto en el Valhalla.
El inicio eléctrico imitando al loco de Ted Nugent, pero con la inmortal voz rasgada de Blitz, es toda una declaración de intenciones. Funciona perfectamente “Wang Tang Sweet Potang” dándole una puesta a punto a la composición, ideal para que bajo y guitarra se luzcan. Phil Demmel encandila y el pulso de la base rítmica es rotundo. Donde se lucen de verdad y todo les funciona de maravilla es en el clásico de Aerosmith “Toys in the Attic”, siendo esta una versión cercana a la que hizo Metal Church a finales de los 90. Brilla todo hasta el punto que se han marcado un cachondo videoclip animado. Gran trabajo del guitarrista pues adapta un poco las dos guitarras originales de Aerosmith. Speedica versión que dice mucho de lo que puede aportar esta banda. Lo que consiguen en el clásico de Cactus“Evil” es realmente excelente. El inmortal riff de este blues es elevado y va con un lavado de cara más que acertado que pasa sobrado la ITV (sí, tengo hora el viernes, por eso el símil). Groove y potencia con un Portnoy en su salsa. Todo lo que le acerque al progresivo le permite lucir sus enormes dotes técnicas.
“Beer Drinkers and Hellrarisers” de los ZZ Top últimamente suele ser versionada por muchísimas bandas. Es una de las composiciones más definitivas y con el estilo de los sureños más marcado. Aquí hay espacio para que la producción premie a todos los instrumentistas con un bonito dueto a las voces. Atención a la contundencia conseguida en el clásico de los Skynyrd “Saturday Night Special” pues aquí sí que el combo le mete mucho de cosecha propia. Últimamente estoy muy metido en Blue Öyster Cult por lo que versionen “Tattoo Vampire” es una maravilla. La idea era que cada miembro de BPMD escogiera un par de temas de los 70 así que agradezco que no sean las más obvias del grupo. El “Walk Away” de The James Gang también luce con extra de contundencia y con muchos detalles duros. Otra vez Portnoy y Menghi funcionan juntos de maravilla.
Pero servidor ha disfrutado especialmente la versión de Mountain, reivindicando unos clásicos que suelen quedar siempre algo olvidados. Juegos ricos de percusión con el grupo nadando en terrenos bluesies. Si una versión quedaba claro que iba a caer en este gran libro de música americana de los 70 era “We’re an American Band” de Grand Funk Railroad. Posiblemente fue el punto de partida de todo. Hímnica y pegadiza como el primer día. Me la imagino cerrando sus conciertos con pirotecnia. “D.O.A.” de Bloodrock es la más desconocida de todas, pero les queda muy cercana a Accept, especialmente por los registros de Bobby.
Personalmente siempre disfruto de las andanzas de Portnoy y más si tira de versiones con grandes músicos reivindicando músicas del pasado. El gran plus aquí es contar con Ellsworth en las tareas vocales. Exquisito gusto en la selección y un gran trabajo de arreglos. Dudo que la cosa vaya más allá de este disco a pesar de que el coronavirus posiblemente nos haya quitado de un plato fresco y atractivo para festivales europeos. Veremos qué volada posee este proyecto, pero a juzgar por el pluriempleo del gran baterista seguro que dentro de 15 minutos se animará con otro proyecto. De todas formas, veo más cerca ya la reunión con Dream Theater. Tiempo al tiempo…