Canciones perfectas: «The Core» de Eric Clapton

Frases de arranque

Dentro del galardonado LP Slowhand (1977), de Eric Clapton, con toda probabilidad las canciones más célebres son la sabrosamente saltarina “Lay Down Sally”, la linda y quebradiza “Wonderful Tonight” y la muy lúcida y sugestiva versión de “Cocaine” (original ésta de J.J. Cale).

Sin embargo, de lo que no cabe duda es que el altamente convincente rock-blues de casi 9 minutos, “The Core”, posee al menos el mismo peso y volumen, en dicho álbum, que las tres piezas anteriormente citadas.

Bajo mi punto de vista, ese insistente y robusto riff de guitarra te mantiene metido en “The Core” todo lo que dura la misma; teniendo su semilla dicho contagioso y cíclico ritmo rockero en unos acordes muy parecidos que improvisó el propio Clapton cuando tocó en directo el tema beatle “Yer Blues”, a las órdenes de su gran amigo John Lennon, en el evento Live Peace in Toronto, en el año 1969; es decir, nada menos que ocho años antes de que Eric desarrollara y perfeccionara, luego, dicha idea embrionaria para “The Core”, en 1977.

Traducción de la letra

«Every morning when I wake, a feeling soon begins to overtake me / Cada mañana cuando me despierto, un sentimiento pronto empieza a apoderarse de mí
Ringing in my ears resounds through my brain, it finally surrounds me / Un zumbido de mis oídos resuena en mi mente, y finalmente me rodea
There is fire, there is life, there is passion, fever and fury / Hay fuego, hay vida, hay pasión, fiebre y furia
There is love and there is hate, there is longing, anger and worry/ Hay amor y hay odio, hay deseo, ira y preocupación

Oh, I have a flame; feel it touch my heart / ¡Oh! tengo una llama, siento que toca mi corazón
And down at my core is the hottest part / Y en el núcleo está la parte más caliente
I can burn without fuel / Que puedo quemar sin combustible

If it should become too cold, I know I can endure the frostbite / Si acaso se enfría demasiado, sé que puedo soportar la congelación
Oh, a blanket then I’ll wrap around me, I keep myself so close to my side / ¡Oh!, entonces me envolveré en una manta, me mantendré cerca de mi lugar
No one then can cause me harm, just as the river runs into the sea / Nadie entonces puede causarme daño, tal como cuando el río va hacia el mar
‘Cause every day, your fire alarm is deafening the silence all around me / Porque cada día tu alarma contra incendios actúa contra el silencio a mi alrededor

Oh, I have a flame; feel it touch my heart / ¡Oh! tengo una llama, siento que toca mi corazón
And down at my core is the hottest part / Y en el núcleo está la parte más caliente
I can burn without fuel / Que puedo quemar sin combustible

It is burning / Está ardiendo

You can trust me; we can laugh / Puedes confiar en mí, podemos reírnos juntos
Together we can share our sorrow / Juntos compartiremos nuestras penas
I will give you secrets too, an attitude that you may borrow / Te contaré secretos también, una actitud que puedes tomar prestada
Gypsy woman said to me: «One thing you must bear in your mind / La mujer gitana me dijo: «Una cosa debes guardar en tu mente:
You are young and you are free, but damned if you’re deceased in your own lifetime / Eres joven y eres libre, pero estás condenado si mueres sin haber vivido la vida”

Oh, I have a flame; feel it touch my heart / ¡Oh! tengo una llama, siento que toca mi corazón
And down at my core is the hottest part / Y en el núcleo está la parte más caliente
I can burn without fuel / Que puedo quemar sin combustible

It is burning / Está ardiendo»

Significado de los versos

La letra de “The Core”, en sus dos primeras estrofas y en el estribillo, te viene a decir la tremenda fuerza interna que posee alguien en el centro de su alma y de su corazón, lo cual le ayuda a enfrentarse a situaciones complicadas, gélidas y adversas de la existencia, sin ayuda externa; todo ello, en medio de una vorágine de intensos sentimientos contrapuestos como el amor y el odio, por ejemplo.

La tercera estrofa habla de una compartición de esas mismas experiencias con el prójimo, además de la importancia de vivir la vida y no desaprovechar la misma ni sus momentos presentes, ni tampoco dejar que se apague esa potente e intensa llama auxiliadora que mora dentro del protagonista de la canción.

En general, durante los versos de “The Core” se podría dejar caer que todas las personas humanas poseemos esa condición de resistencia natural en nuestro interior.

Composición e interpretación junto a Marcy Levy

La mujer que ejecuta, tan impecablemente, su parte vocal y que compuso a medias “The Core” (1977), todo ello junto a Eric Clapton, es una de sus mejores coristas de siempre, la estadounidense Marcy Levy (posteriomente, conocida como Marcella Detroit); la cual se unió a la banda del legendario guitarrista británico, en 1974; después de haber militado ella en los grupos de acompañamiento de Bob Seger o Leon Russell.

Efectivamente, la preciosa y, a la vez, enérgica entonación de Marcy hace un más que adecuado contraste con las particulares, cálidas y sobrias cuerdas vocales del gran Eric; el cual, por contra, no acabó muy satisfecho con su propia interpretación en este mismo terreno cantor, durante “The Core” y el resto de canciones del LP Slowhand.

Inicialmente, durante la escritura de “The Core”, Levy y Clapton habían barajado otros títulos para el susodicho corte como “The Riff” o “Burning Hot Core”; aunque ambos artistas acabaron acortando este último encabezado.

Apuntaremos, además, que esta extraordinaria vocalista rockera que es Marcy también se unió al propio Clapton en dos imponentes interpretaciones de “The Core”, en directo, en 1978 e incluso, hicieron un dueto vocal del mismo tema, una vez más, nada menos que 40 años después, en el año 2018, en el Festival British Summer Time ante 65.000 personas; en Londres.

Sin ningún ensayo y solamente con unas pocas indicaciones previas dirigidas hacia Levy de un guitarrista colaborador de Clapton, en ese momento, como es Doyle Bramhall acerca de este último macro-concierto, resultó que, tras 4 décadas sin tocar juntos “The Core”, ambos “fueras de serie” como son Marcy y Eric se lanzaron, con éxito y acierto, a interpretar esta misma canción ante toda esa enorme audiencia británica, en dicho 2018.

Y es que la cooperación entre los dos fue muy fructífera ya que la misma Marcy Levy, también firmó junto al propio Eric Clapton la citada alhaja “Lay Down Sally” para el citado disco Slowhand, en aquel 1977 y, adicionalmente también compusieron ellos, a medias, los temas “Innocent Times”, en 1976 y “Roll It”, en 1978; además de haber signado la misma Marcy, junto a Richard Feldman, los temas “Tangled in Love (1985) y “Walk Away” (1986) o también “Hungry” (1975), junto a Dicky Simms; destinados estos otros cinco cortes citados a otros álbumes del propio Clapton, naturalmente.

Como guinda, expresaremos que “The Core” contribuyó a que la brava y talentosa Marcy Levy fuera un poco más conocida dentro del mundo de la música, a partir de 1977.

Por otro lado, añadiremos que los dos arrolladores y virtuosos solos guitarreros de Eric Clapton en la propia “The Core” se ven arropados y secundados, perfectamente, por sus músicos de total confianza Carl Radle (bajo), George Terry (guitarra), el propio Dicky Simms (teclados) y Jamie Oldaker (batería); además de darse la muy fiable producción del prestigiosísimo Glyn Johns para cubrirles las espaldas a todos ellos; después de haber trabajado también éste último con Steve Miller Band, Led Zeppelin, The Rolling Stones, The Who, The Faces o The Eagles, entre otros trabajos que ya adornaban el tremendo curriculum del mismo Johns hasta aquel 1977.

Sobre el ilustre colaborador Mel Collins

Desde su primer álbum homónimo, en 1970, con temas como el vibrante instrumental “Slunky”, Eric Clapton no había vuelto a colocar instrumentos de viento en sus canciones; una racha ésta de 7 años sin metales que se rompió, en 1977, cuando el icónico músico inglés solicitó la presencia del muy respetado sesionista Mel Collins, en el saxofón, para que éste interviniera en “The Core”.

En consecuencia, se marcó aquí mismo Collins dos prodigiosos y muy contagiosos solos con su instrumento; siendo éste uno de los instantes más deslumbrantes e irresistibles de esta formidable tonada; junto, también, al muy vivaz y entusiasta órgano Hammond B3 del propio Dicky Simms.

No podía ser de otra forma porque recordemos que el titán del saxo del que estamos hablando, es decir, el muy solicitado Mel Collins, hasta aquel momento de 1977, también había sido integrante de King Crimson y, además, había tocado, como colaborador, con gente de la talla internacional de Eric Burdon, Alexis Korner, Alvin Lee, Bad Company, Humble Pie, Uriah Heep, Brian Ferry, The Rolling Stones, Small Faces o Camel; aparte que después de ese año 77, el mismo Collins también participó en grabaciones de Gerry Rafferty, Barón Rojo, Marianne Faithfull, Alan Parsons, Dire Straits, Roger Waters o 10 CC; entre otros astros musicales del más diverso calado.

«The Core» y otras canciones maestras del gran Eric

Además de la citada cúspide rockera como es “The Core”, la cual se hace realmente amena e inolvidable a pesar de su extenso minutaje, la carrera en solitario Eric Clapton se halla plena de otras canciones maestras y emocionantes como, por ejemplo “Let It Rain” (1970), “Mainline Florida” (1974), “Let It Grow” (1974), la propia “Lay Down Sally” (1977), “I Can’t Stand It” (1981), “Forever Man” (1985), “Tearing Us Apart” (1986), “Pretending” (1989), “Tears in Heaven” (1991), “Change the World” (1996) y muchísimas otras perlas intemporales de ese genio de las seis cuerdas apellidado Clapton.

Y es que se ha de ensalzar la figura de Eric; el cual, por ejemplo, fue de los escasísimos músicos que The Beatles invitaron a tocar con ellos; además de ser él de los pocos artistas que ha sido incluido tres veces en el reputado Rock and Roll Hall of Fame (por sus etapas con los grupos Cream y The Yardbirds y también en solitario) o también recibió hasta 17 premios Grammy.

Son éstos solamente algunos de los muchos increíbles logros y reconocimientos que reflejan la indudable grandeza del propio Eric Clapton.

Avatar
Sobre Txus Iglesias 65 Artículos
Albergo una inquebrantable fe en ese sacro, inmenso, lumínico e intemporal motor bautizado como “rock and roll”.