Es curioso que hasta ahora no me hubiera puesto a escribir sobre canciones perfectas de una de las bandas fundamentales de mi vida: Virgin Steele. El amor que siento por David DeFeis y lo agradecido que me siento de haber disfrutado de su música durante décadas hace que este momento sea realmente especial. Sin ser mi canción favorita creo que, objetivamente, debía atacar esta, pues es de lo más elaborado que hizo la banda de Nueva Jersey en ese majestuoso álbum titulado Invictus de 1998.
Justo en ese año me tocó este disco en un concurso por Internet de la discográfica Noise Records y literalmente me voló la cabeza. Qué lejos quedaban Manowar del nivel de Virgin Steele y qué maravilla de canciones perpetraba el León DeFeis en esos días… Obra maestra con la estatua de Perseo habiendo arrancado la cabeza de la Medusa. Era un heavy metal con fondo de armario basado en las Tragedias griegas de Esquilo y demás. (Un día tendremos que hablar sobre la muerte de Esquilo, pues es la más tronchante de la historia…).
Venga va… un águila cazó una tortuga enorme y quiso lanzarla sobre un peñasco para partir el caparazón y comérsela. En un ejercicio de precisión absoluto confundió la calva de Esquilo con una piedra y le lanzó la tortuga a la cabeza del célebre escritor y filósofo griego. Nos quedamos sin Esquilo y el águila sin cena. No hay tragedia griega más célebre y corta que esta.
La canción
“Veni, Vidi, Vici” es una especie de síntesis de más de diez minutos de lo que es el disco Invictus: una de las más grandes obras de heavy metal de la década de los 90 y… me atrevería a decir que de todos los tiempos. “Veni, vidi, vici“ es una cita atribuida a Julio César: “Llegamos, vimos lo que había y vencimos”. Esa sería la traducción y concepto de lo que es el título y la letra de lo que perpetró DeFeis en 1998.
Casi podemos hablar de metal progresivo por lo de los cambios constantes de tempo. Se abre a balada con coros ampulosos doblando la voz del propio David hasta que irrumpen las guitarras de Edward Pursino y entran bajo y batería. Terrenos muy Manowar para un verso de letra bélica. Puedes escuchar los aullidos de DeFeis antes de repetirse el verso. Todo explotará en sus dos estribillos (aquí hay dos, aunque algunos puedan considerarlo puente) y es que se me hace realmente difícil decir ahora mismo canciones de doble estribillo. Cuando crees que todo explota en épica y melodía, luego hay otra sorpresa que eleva la canción por segunda vez.
Hay momentos de teclado para diferenciar las partes y siempre con variaciones sutiles para no hacer que el tema sea repetitivo. El riff de guitarra juega su papel y para la segunda vuelta el primer estribillo viene con doble bombo y con el bajo de Rob DeMartino doblando las notas:
“We came, we saw, we conquer you all”
Llevan a la canción lo que era la dicha romana a pesar de que DeFeis siempre ha sido más de los griegos. Y es que, en el fondo, si lees un poco de historia sabes que Roma copió toda la herencia griega para adaptarla a su cultura.
La destreza en los teclados de “El león” le permite jugar con uno de los interludios sinfónicos para poner la pausa, echar el ancla y bajar de la cumbre al valle. Qué lástima que nunca pudiese dotar a su música de una orquesta real. Luego DeFeis juega con piezas de otras canciones ya compuestas haciendo un guiño a su pasado y conseguir otro momento manowaresco con la epicidad al 11. Para la tercera ronda de estribillos añade al segundo estribillo unos arreglos de teclado y vuelve Frank Gilchriest a arremeter con el doble bombo. El final del tema es absolutamente Hollywood, una especie de banda sonora en pobre que no posee la orquesta para explotar como debería. Tanto da, es gloria…
La letra
«Are the wings of angels all a lie?
Tell me is this not you
Are these signs and warnings all we know?
Tell me is this not youWest wind at my shoulder,
North wind at my back
On the bridge of death no turning back
The cavern waits before me,
A falcon at my fist
Seven rings of knowledge I exist…
To kill!!!Guardian of the red Queen, seven rivers wide
This won’t end til one of us has died
Eternal death devour those who left their mark
Bleeding all the light out of the dark…
To kill!!!Gods of the night, gods of day
Lead me to another place
We have the force to make wrong right
As the river leaves the stream
All your yesterdays, shining bands unfold
With the power to smash!!!!!!!We came, we saw,
We conquered you all
We came, we saw,
We live by the sword!!!
We came, we saw,
We conquered you all
We came, we saw,
We live by the sword!!!Arrows rip my shoulder, forge a distant prize
Shadows of their might I know their eyes
On the black horizon see our banners wave
Baring all perdition for the brave…
To kill!!!Gods of the night, gods of day
Lead me to another place
We have the force to make wrong right
As the river runs away…
All your yesterdays, shining bands of gold
With the guardian that hangs on the pine
We are children of those who left their mark
With the power to smash!!!!!!!We came, we saw,
We conquered you all
We came, we saw,
We live by the sword!!!
We came, we saw,
We conquered you all
We came, we saw,
We live by the sword!!!All your yesterdays shine on wings of light
Sky father, lord of our sorrows,
Our victory is at hand watch us…
Shine!!!Gods of the night, where are you now?
I laugh at your fate!
Fortune’s on the run, see it now…We came, we saw,
We conquered you all
We came, we saw,
We live by the sword!!!
We came, we saw,
We conquered you all
We came, we saw,
We live by the sword!!!Will we ever meet again?
Will we see the light of love
At the edge of the world?
Hold it now Will we see the Sun arise
Recognize the god in Man
At the edge of the worldI crown us… Kings!!!!!!!
I crown us… Kings!!!!!!!
Kings!!!!!!!»
Veredicto
No sólo es Invictus su mejor trabajo, es que el momento que vivía el grupo era absolutamente arrollador. Venían de los Marriage y luego atacarían los House of Atreus, pero nunca dieron el salto definitivo y han quedado como banda de culto. No creo que “Veni, Vidi, Vici” sea el mejor tema de Virgin Steele, pero es una auténtica barbaridad y son más de 10 minutos de gloria. Puedo recordar todavía cuando cerraron su concierto en la Salamandra (2012) con este tema y fue un subidón agridulce, pues yo esperaba otra hora más de concierto. Veremos qué hacen en el Leyendas del Rock de este 2023…