Carnifex – World War X

Carnifex empezaron en 2005 como un grupo de deathcore al uso que han ido evolucionando hacia un híbrido entre el black metal sinfónico y tanto elementos del citado deathcore como death metal realizando unos geniales discos como Hell Choose Me (2010). Tras éste el nivel solo fue ascendiente y con su anterior Slow Death (2016) llegaron a unas cotas de brutalidad impresionantes desde su explicita y sencilla portada hasta toda la colección de canciones que encierra este disco. El pasado año nos regalaron un Ep con una canción original y unas más que meritorias versiones para avisar que no estaban parados para nada. Y este año, que parece ser el de la reafirmación del deathcore como un género más que vivo con la salida de discos de Thy Art is Murder, Whitechapel y Fit for an Autopsy, demostrando el buen estado de forma que tiene en la actualidad. El haber sabido evolucionar y mezclar con otras influencias les ha ayudado a no estancarse y mostrar una música llena de calidad.

En 2019 sacan a relucir su nuevo disco llamado World War X, una declaración de intenciones en toda regla aunando todas y cada una de las facetas que han tenido durante sus casi 15 años de carrera. Un disco muy potente en el cual no bajan el nivel en ningún segundo pudiendo apreciar a un grupo mucho más maduro y con las ideas más claras si es que no las tenían antes. Los elementos de black metal les quedan muy bien implementados en la estructura de sus canciones y saben jugar muy bien con los pasos entre las distintas partes que forman cada canción.

Al darle al play sonidos de guerra nos dan la bienvenida a su Guerra Mundial X con unas acertadas orquestaciones. Una producción impresionante facilita una escucha que se hace amena donde los ritmos se van alternando de manera muy natural y orgánica. Muy oscuros y contundentes donde la voz de Scott Lewis brilla con luz propia realizando unos registros muy profundos entre el desquiciado black y el gutural del death. Nos brindan unos buenos breakdowns que te hunden en la más absoluta miseria.

«Visions of the End» es una canción bastante corrosiva y agresiva con unos buenos detalles técnicos, buenos arreglos y una genial estructura. Cuando se ponen rápidos y se aceleran tanto con blast beats o dobles bombos de locura es cuando más me gustan aunque las partes más lentas le dan un buen contraste.

En «This Infernal Darkness» (ya vemos que los títulos no son muy alentadores) empiezan un poco calmados pero no saben estar mucho rato así y van alternando entre varias partes hasta llegar al éxtasis con una parte totalmente blackie donde los teclados toman el protagonismo. Nos sorprenden con un interludio de piano en medio de la canción, muy solemne y que le da un toque épico con un final delicado que empalma con la siguiente después de habernos adentrado en la oscuridad.

«Eyes of the Executioner» es una burrada a todo trapo y exponen su poderío musical en estado puro. Se nota que estar en un sello como Nuclear Blast da un gran empuje y sobre todo te asegurar sacar una producción de esta calidad. Mención también para su batería que domina a la perfección todos y cada uno de los elementos de su kit.

En este trabajo y como han ido realizando a lo largo de su carrera se han rodeado de colaboraciones de grandes músicos. En «No Light Shall Save Us» nos encontramos la voz de Alissa White-Gluz (Arch Enemy) tanto su lado gutural como su lado melódico dotando a la canción de una gran fuerza y personalidad. Fue el primer single que presentaron y la verdad que reúne todo lo que uno busca en una canción de los californianos. Buen solo y una parte final que me recuerda a grupos como Tristania o Draconian.

Después de la épica es momento de algo más clásico con «All Roads Lead to Hell» tirando hacia un death metal melódico, no exento de breakdowns. En este corte encontramos la colaboración de Angel Vivaldi, guitarrista y compositor estadounidense, con un solo corto pero genial.

A estas alturas la formula parece que empieza a flaquear y «Brushed by the Wings of Demons» suena algo parecida al resto pero tienen unos cambios tan buenos y unos arreglos tan bien implementados que al poco se te olvida. Eso sí, si en el próximo disco no hay una evolución clara y algo de riesgo en su propuesta puede que tiendan a repetirse a ellos mismos, el tiempo dirá. Un elemento que me ha encantado es el trabajo de guitarras tanto en el apartado rítmico como en el solista.

Brutos, sucios y a toda castaña empiezan «Hail Hellfire» en otra canción marca de la casa con constantes cambios, esa aura maligna de los teclados ambientales, guitarras melódicas, riffs enormes y monolíticos y voces infernales. Meten una parte bastante industrial que podrían haber desarrollado un poco más ya que vuelven de nuevo al «estribillo» demasiado rápido.

Y ya llegamos al final con «By Shadows Thine Held» en la que pocas novedades nos encontramos pero como he dicho antes siempre hay algo que te hace captar la atención, ya sea un riff, un ritmo o una línea vocal. Esta gente ha sabido evolucionar su propuesta y aquí han llegado a una buena madurez musical.

Robert Garcia

Death, thrash, djent, dark, progresivo, doom, black, experimental, jazz, clásica, electrónica… La música me mantiene vivo, es una droga que da sentido a este extraño sueño llamado vida. Músico autodidacta, guitarrista, cantante y enfermo de escuchar y escuchar música sin parar.