
Desde el último lanzamiento de estudio con Street Lethal en 2021, los fans han estado ansiosos por escuchar nuevo material de Crazy Lixx, y mientras que el álbum recopilatorio Two Shots at Glory (2024) dio a los oyentes unas cuantas versiones, nuevas versiones de viejas canciones y un par de temas nuevos, este álbum es lo que todo el mundo se muere por escuchar.
Thrill Of The Bite (2025) promete elevar el rock de Crazy Lixx a nuevas cotas. Tras el éxito de su anterior álbum, este nuevo disco está repleto de poderosos himnos, riffs y melodías memorables, electrizantes solos de guitarra y la alta energía que los fans esperan de la banda, ofreciendo lo que ya se perfila como uno de los trabajos más fuertes de los nóridocs en sus más de 20 años de carrera.
El álbum contiene canciones que ponen de relieve la capacidad de la banda para equilibrar sus raíces nostálgicas y sórdidas del hard rock con su amor por los años 80 y principios de los 90, inspirándose tanto en la música de la época como en las películas. Crazy Lixx han dado una vuelta de tuerca a algunos temas, apostando por un estilo más pesado, basado en riffs, pero manteniendo sus característicos estribillos melódicos y su actitud influenciada por el glam. La formación de la banda ha evolucionado a lo largo de los años, pero está liderada por su fundador y líder Danny Rexon, cuyas habilidades vocales, de composición y producción musical son la fuerza motriz del grupo. Junto a él, la banda está formada actualmente por el bajista y socio creativo Jens Anderson, los guitarristas Jens Lundgren y Chrisse Olsson, y la última incorporación, el batería Robin Nilsson.
Las canciones son una amalgama de los 80, no es una serie basada en la nostalgia de una época; es una historia de decisiones, descubrimientos e inventos que cambiarían el futuro más allá de lo que sus propios protagonistas pudieran imaginar. Canciones como «Highway Hurricane», «Who Said Rock N” Roll Is Dead» y «Little Miss Dangerous» hacen una mezcla de avances tecnológicos, excesos, glamour y ostentación, dando lugar a la sociedad en la que vivimos hoy en día. La huella que dejó la era Pac Man en los ordenadores, los teléfonos móviles y la explosión global de las comunicaciones fue sólo el pistoletazo de salida de la realidad tal y como la conocemos hoy. Melodías a raudales, estribillos interminables y estribillos contagiosos en lo que es puro rock melódico ochentero.
Viajemos a esa época con «Call of the Wild» y «Recipe For Revolution», a través de la música, la imagen y la actitud. Sus valores, sus ideas, su rebeldía, su forma de pensar, su oposición a la tradición y a la extravagancia. Sin duda, esta es la seña de identidad de los suecos, tanto que hoy en día sigue siendo tendencia. Sus vídeos son una clara referencia a la nostalgia que sentimos los más viejos del lugar. Colores neón y accesorios muy grandes. El uso y combinación de ambos son elementos rompedores de la época que no sólo se limitaban a la ropa, sino también a los peinados. Crazy Lixx reúne todo esto.
Otro elemento clave del sonido es el uso de la batería. Con una producción musical muy específica, da a los músicos la oportunidad de explorar nuevos ritmos y tempos. Lo notamos en canciones como «Run Run Wild», «Midnight Rebels” y “Hunt For Danger” donde el rock se diversifica en numerosas subcategorías, como el glam o el rock melódico aderezado con toques AOR. Representan un capítulo fundamental de nuestro tiempo, dejando una huella indeleble.
Para terminar este maravilloso disco de los 80 nos ofrecen «Final Warning» y “Stick It Out”, creatividad musical, a todo volumen, enciende el Hi-Fi y disfruta escuchando música. El legado de los 80 sigue vivo, tanto que son una influencia duradera hoy en día. Cada nota y cada ritmo se tratan con una precisión y una pasión inigualables.
Llevo en esto del heavy más de media vida. Helloween y Rhapsody dieron paso a Whitesnake y Eclipse, pero Kiske sigue siendo Dios.
Como no sólo de música vive el hombre, la literatura, Juego de Tronos y los tatuajes cierran el círculo.
Algunas personas dicen que soy el puto amo, pero habrá que preguntarles por qué.