Siete u ocho años han pasado desde que Dimmu Borgir sacaran algo nuevo al mercado y en este tiempo el mundo de cómo se concibe la industria de la música ha variado mucho. Unos dicen, casi todos músicos de la antigua escuela, que a peor, aunque yo como gran consumidor de música opino todo lo contrario.
En la época que vivimos para vender un producto hay que hacerlo entrar por los ojos, este tema lo tienen muy bien aprendido grupos como Ghost o Arch Enemy, que venden una imagen que es inconfundible frente a otros grupos que pueden hacer igual o mejor música. En el caso de Dimmu Borgir han tenido que retomar el rumbo del grupo y no era posible hacerlo en el punto en que quedó en el año 2010. Para empezar han variado su estética para adoptar una que impacte y no deje indiferente a nadie. Para mi gusto la nueva estética ‘choni’ Black Metalera ha llamado la atención en todos los sentidos, pues en el video del primer adelanto «Interdimensional Summit» pensamos que eran una especie de Zombies con capuchas militares actuando delante de pentagramas invertidos como si fueran neones de Las Vegas.
En el tema musical tengo que decir que la primera vez que escuché «Interdimensional Summit» me tiró para atrás como a un gato cuando se lleva un susto. Solo escuchaba un teclado que me recordaba a Camela con la voz de Shagrath de fondo sin cantar. Todo era muy inconexo y desconcertante, ya que recordaba las épocas del Godless Savage Garden (1998) y del gran Death Cult Armagedon (2004) con Barker a la batería y la nueva canción hizo que se me cayera el alma a los pies. Pero hay que decir que soy muy cabezón y que el tiempo me ha demostrado que no se puede juzgar siempre por la primera impresión, así que me cogí hacer esta review como un reto personal.
Después de escuchar el disco bastantes veces tengo que desdecirme de muchas primeras impresiones. También tengo que decir que quien haya escogido los dos adelantos del disco para promocionarlo es más un enemigo que aliado del grupo porque dentro de Eonian hay como mínimo tres grandes temas entre los que no están «Interdimensional Summit» ni «Council of Wolves and Snakes», pero ahora empiezo a detallaros.
El disco empieza con «The Unveiling« que me parece un gran tema introductorio muy al estilo Dimmu Borgir con un doble bombo muy rápido en algunos momentos y unos riffs sencillos acompañados de la voz de Shagrath tan desgarradora como nos tenía acostumbrados. También tiene trozos con coros que le dan un toque muy místico ideal para la primera canción del disco.
Después viene «Interdimensional Summit», que en un principio me pareció un desastre porque la analicé en clave de los Dimmu de la década de los 2000, pero quitando la primera parte de la canción que me parece un abuso excesivo del teclado, la segunda parte de la canción a partir de la introducción de los coros me parece más al estilo de «The Unveiling», aunque la voz de Shagrath no brilla en absoluto eclipsada por los coros que hacen el estribillo. Hay que decir que esta canción es uno de los ejes del álbum en cuanto a temática por el asunto de las múltiples dimensiones y el caos que es eterno.
Como tercer tema tenemos «Ætheric», una de las mejores canciones del disco. Es una canción con tramos rápidos, sin ser la velocidad de los antiguos tiempos, y muchos cambios de ritmo. El teclado hace su función creando una atmósfera grandilocuente que encaja perfectamente con los coros y los cambios de la canción.
«Council of Wolves and Snakes» es una canción que no me acaba de entrar del todo. Comienza con un mantra y como si fuera una canción del folkore nativo Norte Americano, todo muy lento e intentando ser tenebroso hasta la mitad del track que introduce un par de partes de batería rápida y acaba con los ya acostumbrados coros de este trabajo.
El siguiente tema, «The Empyrean Phoenix», es el más lento del disco que combina los más típicos riffs de guitarra al estilo Dimmu Borgir con la voz desgarrada de Shagrath, es un tema que no resta al disco.
Uno de los temazos de Eonian es «Lightbringer«. Empieza con una intro de riffs guitarreros hasta que rompen el tempo con unos teclados para comenzar a combinar las voces de Shagrath con los coros y posterior mente entrar unos ritmos ultrarápidos de batería. Es una canción que nos recuerda a las épocas de Death Cult Armagedon. También extraigo una retirada a los nuevos trabajos de Rotting Christ con la utilización de palabras a modo de mantra sin ser una mera copia.
«I Am Sovering» es una canción al estilo de «Interdimensional Summit», con un abuso excesivo (para mi gusto) de un teclado que en algunos momentos me recuerda al órgano que recorría las calles de nuestras ciudades los domingos ya sin cabra. Realmente la canción empieza a arreglarse con el paso de los dos primeros minutos aunque cae también en el abuso de los coros.
Después del anterior susto viene «Archaic Correspondence» de las que no molestan en un disco y que introduce la voz clara sin coros, por fin algo novedoso, aunque este recurso ya lo habían usado en anteriores trabajos.
Antes del final del disco viene por lo que ha merecido la pena el disco. Tenía ganas de llegar a este punto ya que «Alpha Aeon Omega» es el tema que me muestra que no está todo perdido, queda la esencia pura de lo que fue este majestuoso grupo de black metal sinfónico. Con una atmósfera tenebrosa, un teclado que crea ambientes de perdición, con riffs del más puro black metal y con tramos de canción rapidísimos he de decir que esta canción me encanta.
Para cerrar el disco, con «Rite of the Passage» el grupo ha querido relajar el ambiente con una canción lenta y mística.
En definitiva Dimmu Borgir han demostrado que quien tuvo retuvo, aunque haya que buscar muy en el fondo. Creo que este no es el mejor disco del grupo ni de lejos pero tengo esperanza que en la siguiente entrega tengan fuerzas para sorprendernos y consigan limar este nuevo estilo que empiezan a explorar.