El pasado 5 de septiembre nos despertamos con la desgraciada y triste noticia de que Ínigo Muguruza había fallecido a la edad de 54 años.
Íñigo siempre será recordado por ser miembro fundador, entre otras, de Kortatu y Negu Gorriak junto a su hermano Fermín, siendo pioneros en la introducción de los sonidos ska en nuestro país y estandartes de lo que más tarde se denominaría rock radical vasco.
He de reconocer que el rock radical y reivindicativo ocupó una pequeña parte de mi vida pero que no ha trascendido más allá de entonces, sin acabar de profundizar en unos grupos y un estilo de los que, por desgracia, no quedan demasiados representantes de la época.
Así pues mi aportación a éste Top 5 se basará en las primeras canciones que escuché de cada uno de ellos, convirtiéndose en un acto de nostalgia de aquellos años de adolescencia.
«Mierda de Ciudad»
Artista: Kortatu
Disco: Kortatu (1985)
Autores: Fermin Muguruza e Iñigo Muguruza
Buuufffff, Kortatu llegó a mis oídos durante los primeros años de bachillerato. Podía haber escogido cualquier otra canción como «Sarri Sarri», «Zu Atrapartu Arte» o «La Línea del Frente», pero «Mierda de Ciudad» la coreamos y sudamos en las fiestas que organizábamos en el instituto para recoger fondos y abaratar el viaje de fin de curso. Memorables aquellas fiestas en el Punt de Can Massallera de Sant Boi en las que el rock, punk y ska copaban nuestras listas de reproducción.
Fuera del contexto político-social que envolviera a la banda -y que más tarde entendería-, Kortatu crearon la base racional para ser más autocrítico con el sistema. Genial el vídeo en directo disfrazados de ertzaintzas, porra incluida.
Formados por los hermanos Muguruza, Fermín y el recientemente fallecido Íñigo (DEP), fueron pioneros en introducir el ska dentro de la Península. Aunque inicialmente cantaban en castellano, fueron de los primeros grupos a los que escuché en euskera, lo que les daba aún más ese simbolismo reivindicativo y arraigado a su tierra y tradiciones.
Himno fiestero en cualquier bar que se ponga.
«Lola»
Artista: Cicatriz
Disco: 4 Años, 2 Meses y 1 Día (1991)
Autores: José Arteaga, José Luis Rodrigo, Natxo Etxevarrieta y Pedro Landache
Joder, volvemos a las fiestas de instituto, pero en esta ocasión, no a las primeras, sino a las que nos tocó organizar para nuestro viaje. Nos desgañitábamos cantándola y bailando pogo con su acelerado final.
Nacidos en Vitoria en 1983, no los conocí hasta el año 93-94 debido a las mencionadas fiestas. 4 Años, 2 Meses y 1 Día (1991) fue el segundo disco de la banda a pesar de los años de actividad, pero una larga serie de desdichas -entre las que se encontraban las drogas, penas de cárcel y un accidente sufrido por su vocalista Natxo (DEP) que le obligó a una larga recuperación-, hizo que se demorara la grabación.
Cicatriz carga la negra leyenda del gran grupo atacado por las prematuras muertes de sus miembros originales a causa del SIDA y las drogas, pudiendo haber cosechado más popularidad, pues reunían las características necesarias para poder haber llegado más lejos.
«Mucha Policía, Poca Diversión»
Artista: Eskorbuto
Disco: Eskizofrenia (1985)
Autores: Francisco Galán, Jesús M. Expósito y Juan María Suárez
Originariamente editada en 1985 dentro del segundo disco de la banda vizcaína, no llegué a conocerlos musicalmente, porque camisetas y el logo lo había visto infinidad de veces, hasta que ésta canción fue incluída dentro de la brutal banda sonora de El día de la Bestia (1995). Años más tarde fuí consciente que llegué a verlos con anterioridad en la televisión, pues muchos de nuestra generación, durante unos años de nuestra tierna infancia, veíamos La bola de cristal. Allí salieron los amigos de Eskorbuto en 1985 cantando «Os engañan». Con nueve años ya nos preparaban para lo que se nos venía encima.
Eskorbuto son un claro ejemplo de minimalismo musical, pues sin apenas saber tocar pero con letras directas y combativas llegaron a situarse como uno de los referentes del estilo. Con gran éxito en el País Vasco los erigieron como uno de los líderes del movimiento que inspira el artículo, aunque años más tarde ellos intentaran desvincularse negando ser la bandera de nadie.
«Los Siete Enanitos»
Artista: La Polla Records
Disco: Salve (1984)
Autor: Evaristo Páramos Pérez
Sí, posiblemente no sea de las mejores, pero aún todavía sigue dando guerra y muchos pogos. Ciertamente no fue la primera que llegó a mis oídos, pues tenía un compañero de clase, en aquella lejana E.G.B., que nos cantaba «Come Mierda» o «Tope Bwana» con 11 o 12 añitos. Pero la denuncia de los abusos laborales de «Los Siete Enanitos» con su “Ayho, ayho” me enganchó años más tarde para descubrir más genialidades de Evaristo y Cía.
Poco podemos decir de La Polla que no se conozca. Formados en 1979, se disolvieron en 2003 siendo una de las bandas con más reputación del panorama musical a pesar de la contundencia de sus letras, dejando a títeres políticos, militares y religiosos sin cabeza. Tras su disolución el legado no se detuvo ahí, pues el incombustible Evaristo ha estado guerreando hasta nuestros días con sus diferentes proyectos. Este año han retomado la actividad para seguir pateando conciencias sobrepasando todas las expectativas creadas.
«Mi Generación»
Artista: M.C.D.
Disco: Inoxidable (1997)
Autor: Tonino Pérez y Neil O’Keeffe
Descubrí a M.C.D. por casualidad -aunque sí que conocía el significado del acronismo (Me Cago en Dios)-, pero lo que es su música, por casualidad, a raíz de un pedido a la mítica revista Tipo con el cual me vino de regalo el cassette del directo Inoxidable (1997). No fue un grupo que entrara a la primera, pero «Mi Generación» y su estribillo se me clavaron en el cerebro. No tiene desperdicio la portada del disco Asako Pako! (1995), en el cual se encontraba originalmente la canción escogida.
Originarios de Bilbao, se formaron en 1979 cosechando una rápida aceptación desde la grabación de su primera maqueta, pero la suerte no ha llegado a acompañarlos del todo. Los continuos cambios de formación, y el poco reconocimiento que tuvieron tras participar en la banda sonora de Historias del Kronen (1995), no han hecho justicia a estos luchadores. Posteriormente, tras participar en un recopilatorio realizado por el Athletic Club en el año del centenario (1998), se hace famosa su versión punk del himno llegándose a escuchar en el estadio los días de partido.
Amante del metal en su variedad de estilos. Vivo con la esperanza de poder llegar a viejo acudiendo a salas de conciertos y festivales. Si los rockeros van al infierno, que me guarden sitio y una cervecita.
Salud y Heavy Metal.