Los madrileños Toundra no son una banda que acostumbre a conformarse con repetir los mismos patrones y los mismos ciclos. Si hace unos años nos sorprendieron juntándose con El Niño de Elche y fundaron Exquirla, esta vez se han animado a componer y grabar la banda sonora de todo un clásico del cine expresionista alemán como es la centenaria El Gabinete del Doctor Caligari. Por ello, y aunque ya sé que lo hacemos a menudo, siempre es un placer ponernos en contacto con la banda (en este caso, con su guitarrista Esteban Girón) para que nos explique las motivaciones tras este proyecto y para que nos ponga al día de lo que se cuece en el seno de este fascinante cuarteto. Vamos allá, pues.
¿Qué pasa, Albert?
Qué tal, Esteban, ¿cómo estamos? ¿Qué tal la mañana?
Bien bien, aquí estamos toda la mañana haciendo el idiota.
(risas) Bueno, de eso se trata…. si vais sacando discos no os queda otro remedio que hacer entrevistas a menudo…
Ya tío, todo el puto día, ¿eh? (risas)
Bueno…. pues nada, muchas gracias por atendernos de nuevo y dedicarle algo de tu tiempo a nuestras preguntas. ¿Cómo han ido las fiestas? ¿Estás ya listo para empezar de nuevo?
Pues en las fiestas por fin he descansado, que nunca lo hago tío. Por fin me he relajado, he ido a Asturias, mi tierra, y ahí se está tranquilito. Así que listo para volver on fire.
Me alegro, y de eso se trata. Os hemos entrevistado ya un par de veces este último par de años, primero cuando salió Vortex y en el pasado Download, pero siempre es un placer hablar con una de las bandas que a mí personalmente más me fascinan del panorama estatal.
Muchas gracias, tío.
De nada hombre, un placer. Y más aún si es con la excusa de la publicación de un disco tan especial y tan «curioso» como es la banda sonora de la película El Gabinete del Doctor Caligari. Explícanos un poco cómo y cuándo surgió la posibilidad de embarcaros en un proyecto como éste.
Pues salió a raíz de que el Café Kino, una pequeña promotora que suele trabajar con un pequeño cine de aquí de Madrid y que había hecho este tipo de cosas con Metropolis y con El Acorazado Potemkin, con otros músicos. En ese casi simplemente escogían los músicos y les ponían a tocar mientras se proyectaba la película. Así que tocaban e improvisaban. Pero nosotros lo que dijimos es que lo íbamos a hacer en directo mientras ellos proyectaban la película en los cines Capitol, en la Gran Vía de Madrid, pero vamos a componer la banda sonora. Ni vamos a improvisar ni vamos a usar temas nuestros. Queríamos que fuera todo original por y para la película, y por eso nosotros queremos que el mensaje, en toda promoción, se base en dos cosas: la primera, que esto es por y para la película y que no es un disco de Toundra, sino que es una banda sonora hecha por Toundra. Esto no es un disco más. No es un disco que tiene una imaginería inspirada por la película, no, sino que está hecho por y para las imágenes. Y por otro lado, cuando nos lo propusieron, fue muy importante para nosotros que el universo visual que se maneja en la película era muy potente, así que estéticamente pensábamos que casaba muy bien con la música que hacemos nosotros cuatro pero por otro lado, también lo hacía a nivel de guión. Porque no es una película de terror, sino que es una película que habla de política y está situada en un periodo de entre guerras en el que surgen las ideologías fascistas y autoritarias. De eso hace cien años, y nosotros justamente componemos la banda sonora en los meses previos en que VOX irrumpiese en el congreso de los diputados. En un momento en el que parecía que el PP les quería adelantar incluso por la derecha y en un momento con un resurgimiento muy importante en Europa de este tipo de ideologías, con la evidencia de lo que han hecho en Cataluña o lo que quieren hacer con el movimiento obrero en Francia a través de las religiones. Igual que les robaron las fábricas a los romanos, les quieren robar el «Divide y vencerás». Y estas fueron dos motivaciones muy importantes para nosotros: la cinta y la política.
Pero vosotros escogisteis precisamente esta película o os fue sugerida por la gente de la promotora?
No, no, nos la propusieron ellos. Tengo un compañero muy cinéfilo y yo también estudié comunicación audiovisual. Entones te vuelves a re-documentar y al final profundizas y ves que aunque pensabas que era un peliculón, no la ibas a volver a ver más en treinta o cuarenta años, y ahora me encuentro que me lo he chupado más veces que Solo en Casa.
Ya me imagino… ¿porque cuántas veces crees que la debes haber visto a día de hoy? Porque para componerla entiendo que habéis tenido que estar viéndola constantemente…
Pues cien veces, fácilmente, sí si.
Debes estar hasta los cojones ya de la peliculilla de marras…
No, no te creas. Es bastante amable. Es cortita y es amable. Y ya es como de mi familia, ¿sabes? Yo vivo solo, así que estos personajes ya me hacen compañía.
(risas) ¿Y cómo se compone un disco así? Porque debe ser un proceso bastante distinto al de un disco normal…
Sí, lo es. Por ejemplo, Álex coge el piano y percusiones en vez de la batería. Alberto no coge el bajo sino los sintetizadores. Y Macón y yo, como somos retrasados y no sabemos tocar otra cosa que la guitarra, pues tocamos eso. Y bueno, coges influencias de otro lado, haces otro tipo de cosas y no dependes tanto del audio, así que tienes una mayor independencia porque tienes unas imágenes que lo complementan. Por eso es importante que la gente sepa que es por y para la película, porque sin las imágenes creemos que no se entiende la música.
Y a la hora de encajar la música con lo que ocurre en las imágenes, tanto a nivel de duración exacta de cada acto como a nivel de subidas y bajadas de intensidad, os ha salido muy fluido o habéis tenido algún tipo de dificultad por culpa de este tipo de limitaciones?
Sí mira, nos vino en diciembre la propuesta, y entonces estábamos de gira por España con Vortex (2018). En febrero hicimos la gira europea y volvimos exactamente el 9 de marzo a Madrid. Nos pusimos a componer y el 13 de abril lo estábamos tocando en el cine en directo.
Caray. ¿Así que os costó muchísimo menos que un disco normal?
A ver, tardamos menos, pero porque por un lado ayuda la imagen y porque también nos pusimos a tocar todos los días tres o cuatro horas, que no dormíamos y yo no tenía ya tiempo ni para hacerme la colada (risas). En diciembre y enero ya habíamos estado cada uno en nuestra casa haciendo el trabajo por separado.
Aunque sea un disco que suena realmente a Toundra, como bien dices no se trata de un trabajo al uso de la banda, ni una continuación de Vortex ni nada de eso, sino más bien algo paralelo a vuestra carrera discográfica. Así que si lo comparamos con vuestros trabajos habituales me parece encontrar bastantes detalles distintos. Principalmente me ha llamado la atención que no hay esos cambios de ritmo y de intensidad tan característicos de vuestra música y que desembocan en momentos más cañeros y más apoteósicos, siendo todo un poco más taimado en general. ¿Qué grandes cambios ves tú, a nivel musical?
Hombre, es que esto es otra cosa. Ten en cuenta además que hay ciclos en Toundra: componemos los cuatro primeros discos, que es nuestra juventud por así decirlo. Siete años, cuatro discos, somos unos pesados y todo lo que tú quieras. A partir de ahí nos vamos y hacemos Exquirla, respondiendo a una pulsión flamenca y política muy explícita. Y aunque IV y II fueron dos discos muy políticos para nosotros, lo de Exquirla es un paso más allá. Así que salimos de casa para volver con ganas, y lo hacemos con un disco de rock ‘n’ roll como es Vortex, donde claro que utilizamos la política de nuevo, pero es un disco de Toundra más normal, por así decirlo. Y ahora volvemos a salir de Toundra, nos vamos de casa, hacemos otro Erasmus por así decirlo y nos vamos a hacer la banda sonora de una película cuyas imágenes nos sirven para dar otra vez un mensaje más explícito. Después de esto es el momento de volver a casa después de navidad y hacer otro disco de rock ‘n’ roll, que es lo que toca.
¿Así que tú crees que ha llegado el momento de empezar a poneros con el siguiente disco de Toundra?
Sí sí, es el momento. Pero también dejándonos disfrutar un poco, porque a veces se nos va la olla y llegamos a un ritmo que quizás nos pasamos. Éste saldrá en 2021, pero ostia. Yo voy a cumplir 33 años este año, empecé con 19 y todo lo que he hecho en mi vida es por y para esto. Y estoy encantado, ojo, pero también mola alimentar otras facetas de la vida también. Mola tener vacaciones, por ejemplo (risas)
¿Sí, no? Ahora que has descubierto lo que son durante unos días has dicho «joder, esto está bien»… (risas)
Ya, tío. Es como la heroína. (risas)
¿Y qué es lo que más te enorgullece de este disco?
Nada… Si eso me enorgullece sentarnos y estar vomitando antes de tocarlo allí en la Gran Vía. Tocarlo y que nos saliera perfecto. Hacerlo y que a la gente le guste.
Yo vi a Obsidian Kingdom hace un par de años haciendo algo parecido con The Phantom Cabinet en Barcelona, no sé si te suena. Fue en el CCCB y entiendo que una propuesta similar a lo que comentas que se hace en estos cines Capitol. Pero claro, eso fue un concierto con la película y listos, mientras que vosotros habéis dado un paso más tanto a la hora de componerlo como al pensar en grabar un disco e incluso en hacer una gira temática tras ello. ¿Qué os animó a dar ese paso más allá y a darle este protagonismo extra?
Bueno, lo primero es que ese primer concierto obtuvo muy buena respuesta. Por otro lado, creemos que un proyecto así nos diferencia y demuestra que aunque somos un grupo de rock ‘n’ roll, también somos un grupo con diferentes inquietudes. Como la Velvet Underground o como Sonic Youth, por ejemplo. Y no me quiero comparar con estos dos totems, por supuesto, pero sí que me gusta pensar para mis adentros que no somos la típica banda de rock ‘n’ roll, motos y Jack Daniel’s, sino que asumimos el rock (porque lo nuestro es el rock) como un movimiento cultural, no como un mero entretenimiento.
¿Qué os comentó Century Media cuando le propusisteis grabar un disco de este tipo?
Pues nada en especial. Ellos confían en nosotros y lo cogieron con las manos abiertas, así que muy bien. También piensa que ellos son alemanes y la peli es alemana, así que quizás les tocó un poco la fibra.
Supongo que en un disco así las perspectivas comerciales deben ser muy distintas que las de un disco normal, ¿no?
Sí, sí, por supuesto. Es que éste no es un disco normal, así que las expectativas comerciales supongo que serán menores. Supongo, vaya. Lo cierto es que tampoco he hablado con ellos. Nuestro manager, Paco, que representa a Century Media en España y que es mi amigo íntimo, lleva todo esto al día.
Durante estas últimas semanas he estado escuchando bastante el disco, pero justo ayer por la noche me pasaron la versión sincronizada de la banda sonora con las imágenes de la película. Y aunque solo pude ver un trozo la verdad es que al integrar las dos cosas la música toma una nueva dimensión. ¿Lo vais a publicar solo en audio y hay también la opción de algún tipo de DVD o algo?
No, se publicará solo en audio, pero tú tranquilo que yo voy a conseguir que esté en YouTube gratis.
Vale (risas). Te lo compro pues. ¿Hay algún tipo de historia legal o de derechos con una cosa así, por cierto?
Sí, sí. Hay temas de derechos, pero bueno…. trabajaremos en ello y todo llegará.
Perfecto. Bueno, ya hemos estado hablando antes que hace unos años os metisteis con un proyecto tan arriesgado como Exquirla, ahora habéis compuesto y grabado la banda sonora de una película muda… Está claro que os gusta saliros de la norma y que, como dices, no sois una banda de rock ‘n’ roll al uso. Más que preguntarte sobre otros proyectos fuera de lo habitual que tengáis pensados de cara el futuro, porque me imagino que no me los vas a decir, me gustaría preguntarte si en los últimos años habéis tenido alguna idea que hayáis empezado a pensar o a trabajar pero que al final descartarais por el motivo que fuera y que creas que ya no va a tener un sitio en el futuro de la banda.
No, no, qué va. Nosotros, como todo en la vida, pensamos que lo que se empieza se termina. Y eso es intuición: si crees que no va a funcionar, pues no lo comiences. Con este disco teníamos muchas dudas. Teníamos una agenda complicada de curro, de mucho curro en general. Y cuando nos propusieron esto pensamos «ostia… esto es un currazo».. así que dudas un momento, pero creímos que el proyecto podía salir bien, y una vez que te pones a ello nos tiramos de cabeza y a por todas. Porque sino no lo consigues. Lo que no puedes hacer es algo así como de chichinabo, sabes, a medias. ¿Que decides hacer alguna cosa? Pues oye, con todo el arrojo que tenga tu persona. Lo que no puedes estar es aquí a medias tintas.
Ni que lo digas… y la verdad que con esto os estáis diferenciando un montón de cualquier otra banda, y ya no de aquí sino de cualquier otro sitio, así que felicidades.
Gracias, tío.
En un par de meses os embarcaréis en la gira de presentación del disco, y un poco antes os tendremos de nuevo por Barcelona… ¡por partida triple! El 7 de marzo estáis en los Cines Aribau tocando la banda sonora, el 13 en un teatro en Badalona y el 14 en Granollers, en un concierto que desde Science of Noise co-organizamos. ¿Qué podemos esperar de cada uno de estos conciertos? ¿Son todos diferentes?
Sí, bueno. Los conciertos del Gabinete son proyectando la película y haciendo la banda sonora, mientras que un concierto de Toundra es un show con guitarrazos y donde todo vale (risas). Un concierto de rock ‘n’ roll.
(risas) Pero por ejemplo, el del teatro este de Badalona, que es un Auditorio con la gente sentada, va a ser un concierto normal de Toundra?
Sí, igual. Va a ser un concierto de rock ‘n’ roll.
¿Igual que el del 14 entonces?
Sí.
Perfecto. Bueno, la verdad es que vuestros conciertos en Barcelona suelen petarse bastante y ser exitazos de gente. Recuerdo vuestras últimas visitas a la ciudad, tanto en Apolo como en BARTS, en los que hicisteis sold out o andasteis muy cerca, así que está más que demostrado que en la ciudad hay muchísimo seguimiento a Toundra. Aún y siendo así, ¿crees que la gente va a responder a tres conciertos en una semana, o incluso van a repetir?
Pues no tengo ni idea, la verdad, y es mejor no pensarlo porque si te quedas todo el rato haciendo números y mirando los sold outs y todo eso entonces dejas de ser músico. En mi caso, y como ya bien sabes, ya tengo mi faceta de curro, y con Toundra me puedo llegar a subir a la furgoneta y no saber ni a qué ciudad voy.
Jajaja, perfecto. Bueno, pues esto es todo. Nos ha quedado una entrevista muy centrada en el nuevo disco, pero en parte de eso se trataba. Gracias de nuevo por tu tiempo y espero verte ahora cuando vengáis a Barcelona y, especialmente, a Granollers. ¡Mucha suerte y un abrazo!
Venga Albert, muchas gracias y un abrazo para ti también.
Siempre me ha encantado escribir y siempre me ha encantado el rock, el metal y muchos más estilos. De hecho, me gustan tantos estilos y tantas bandas que he llegado a pensar que he perdido completamente el criterio, pero es que hay tanta buena música ahí fuera que es imposible no seguirse sorprendiendo día a día.
Tengo una verborrea incontenible y me gusta inventarme palabras. Si habéis llegado hasta aquí, seguro que ya os habéis dado cuenta.