Entrevista a Martin Persner, líder de Magna Carta Cartel y ex de Ghost (II): ‘Tocando con Ghost en Alemania en 2011 recuerdo que no gustamos y se rieron de nosotros’

A veces sucede que, al terminar una entrevista, el entrevistado, te agradece que hayas hecho preguntas diferentes y que se lo haya pasado bien. Lo que nunca me había ocurrido es que lo demostrara tan efusivamente y que su manager luego me escribiera para subrayarlo otra vez. Martin Persner es un tipo especial, sensible y de una visión de la vida algo oscura y pesimista, pero tiene un aura genial.

En esta segunda parte iba a por Ghost y su pasado como Omega en el grupo. Es obvio que su forma de componer es puramente del grupo de Tobias Forge y estaba claro que en algún disco hay material suyo como aquí se confirma. Persner no es de los que le denunció pues han sido amigos íntimos y posee todo el respeto del mundo hacia el proyecto de Forge. Más allá del pasado os recomiendo encarecidamente el nuevo disco de MCC, pues es realmente una obra excepcional

¿Qué tan importante fue ABBA para ti?

Provengo de una familia muy relacionada con el mundillo musical. Somos muchos hermanos, incluso toco con uno de ellos, y mi padre, es un viejo profesor de música que antes tenía una tienda de discos. Mi madre se divorció de él y conoció a otro chico, que curiosamente también tenía una tienda de discos…

La música me rodeaba completamente y mi madre también tocaba el piano. A mí padre no le interesaba ABBA para nada y a mi madre tampoco, pero siempre es un grupo que ha estado allí. Fue cuando ya tenía 20 años que les empecé a escuchar pues cuando sonaban por la radio o en la tienda de discos pensaba: “no está mal, puede que tenga que darles una escucha algún día”. Pero es que a mí me parecía que era música para gente mayor.

Lo divertido de ABBA y lo que les hace especiales respecto a muchas bandas de su generación es que después de ellos muchos grupos experimentaron con su sonido. Eran cinco personas trabajando en ese sonido tan característico, ABBA era como si fueran científicos metidos en la música pop. Es como si sentaran y pensaran el cómo podían hacerlo de la mejor manera… Me gusta mucho como sonaban, especialmente a mediados de los 70 y principios de los 80. Y ahora me encanta su música, pero tampoco todo lo que escribieron.

Hay algunas canciones que… arghhh. Pero a bote pronto se me ocurren por lo menos 10 o 15 canciones fantásticas. Me gusta ABBA porque la gente no se da cuenta, pero ABBA tocan una música muy triste a pesar de que parece feliz y es incluso bailable. “Dancing Queen” suena a feliz, pero es tremendamente triste.

Interesante reflexión esta…

Casi que los definiría como pop melancólico sueco.

Bien… uno de los grandes clásicos de MCC es “Sway”. ¿Qué me podrías decir de esta canción y en especial de la letra?

Bien… Es la única canción que yo compuse en un solo día. La completé en 40 minutos en el año 2004. Vi a una chica que me gustaba y… yo no le gustaba a ella. Me encantaba esa chica, me senté y escribí esa letra. No era para ella, obviamente, era para mí. Descargaba mi frustración hacia la situación a través de una canción. De eso va la canción. La grabamos en demo ese mismo 2004 con mis amigos. No la sacamos hasta 2016, por lo que es un tema muy antiguo…

Sé que mucha gente cree que es una canción que escribí una vez ya no estaba en Ghost, pero es anterior, es de 2004, y en esos momentos, no existía ni la mera idea de crear Ghost como grupo. Sí que cambié una cosita en las letras que dice “no hay nada que hacer con los fantasmas”, ya estaba en la demo, pero lo cambié porque era un error gramatical.

Yo no soy inglés, lo escribí con 24 años y cambió un poco el significado… y claro, la gente cree que hablo de Ghost. Realmente trata de conocer a alguien que es incapaz de demostrar sus emociones. La conocí, se quitó la máscara y… bueno, una historia triste. Va sobre una chica, no sobre mi relación con Tobias Forge de Ghost. Siento decepcionarte si creías que iba sobre eso…

Pues de veras que me parece genial el que hayas podido crear una canción que haya dado tanto juego. Es genial.

A veces, no importa lo que digas porque la gente va a creer que eres tú el que estás equivocado. Joder, ¡yo sólo escribí una canción antes de todo aquello! Que os jodan… Es que me parece hilarante, pero, a la vez… lo entiendo. Todo se reinterpreta (risas).

Estuviste antes en la banda Subvision (con Tobias Forge). ¿Está terminado este proyecto?

Conocí a Tobias Forge cuando tenía 20 años y él es tres o cuatro meses más joven que yo. En esos días quería formar su propia banda y creó Subvision. Subvision era su banda… Yo estaba en esos tiempos en varios grupos, pero me preguntó si quería entrar en ella ya que tocaba la guitarra y vivía en Estocolmo, aunque viví un tiempo en Inglaterra. El caso es que empecé a tocar con él, pero tampoco pasaba mucho tiempo en la capital de Suecia con sus amigos.

No sucedió nada importante hasta que me llamó diciendo que estaba grabando un disco completo con Subvision y me pidió si quería producirlo. Obviamente le dije que sí. Y después de grabar ya volvía a estar en su banda otra vez. No había estado con ellos entre 2004 y 2008. Finalmente le dio carpetazo al proyecto porque estaba con Subvision, con Repugnant, yo estaba con MCC, luego teníamos una banda llamada TYD, una banda hermana…

Estábamos ambos en cuatro o cinco bandas al mismo tiempo. Y de repente te encuentras con una llamada de un promotor que te dice que necesita una banda para abrir para un gran grupo en una ciudad sueca… Y el problema pasa a ser: “¿Cuál de mis cuatro bandas es la indicada para ello?”. Estaba claro que había que cancelar los proyectos y focalizarlo todo en una banda. Y así se hizo y la banda elegida fue MCC. Eso nos duró un año, dos o tres como mucho. Incluso grabamos un disco completo.

Pero había muchos proyectos a la vez que se canibalizaban unos con otros. Puedes vivir de eso, pero para mí era un estrés. Y fue cuando en 2010 sacamos el primer disco de Ghost. Entonces todo el mundo vio que ese proyecto tenía que ser EL PROYECTO, el principal. Era el billete dorado para algo importante. Pusimos el resto de proyectos a dormir, en nevera. Ghost era lo más importante y a por ello fuimos. Le dedicamos todo el tiempo y energías a Ghost. Todo lo demás quedó en vía muerta…

Al escuchar los primeros álbumes de Ghost, me parece a mí que escribes algunas de las canciones, y de eso estoy bastante seguro puesto que tu música y tu estilo es realmente cercano a Ghost. ¿me equivoco?

La verdad es que en el primer disco de Ghost poco hice… Yo andaba por allí en el estudio, pero eran las ideas de Tobias y sus canciones. Luego lo pasamos al directo funcionando como banda, los mismos chicos con esos ropajes iguales. Luego vino el segundo disco Infestissumam, y claro, obviamente que escribí música pues es lo que suelo hacer.

Allí hay cosas mías… y si escuchas con atención puedes escuchar bien mi guitarra. Y pienso que lo que pasó fue justo en ese momento fue que Tobias y yo empezamos a escribir música en una misma dirección. Hay gente que dice: “Martin, esas canciones suenan en tu estilo”, pero es que ambos llegamos a ese punto de componer de forma muy similar. Uno no sabía si el material era mío o de él puesto que los dos nos fuimos influenciando a la vez.

También escuchábamos las mismas bandas, teníamos las mismas influencias, mismos amigos con los que salíamos, mismas fiestas, comíamos lo mismo… En definitiva: que recibíamos los mismos inputs de todas partes. Y sí, llegué a componer cosas para Ghost. Grabamos ese disco en Nashville durante seis semanas… rock n’ roll y muy buenos tiempos (risas).

Ahora estoy recordando que asistí a Wacken en 2011 y Ghost tocó, pero no en el escenario principal…

Sí, sí, recuerdo perfectamente ese festival.

¿Tú tocabas allí? Fue mi primera experiencia con Ghost.

Sí, allí estaba. Era mi primera vez en Wacken y aluciné porque no se trata de un festival: eso es una ciudad. Una ciudad de heavy metal, muy grande. Recuerdo estar allí, pero también mezclo años y conciertos. Piensa que estuvimos girando unos seis años y medio en total y eso son muchos conciertos (risas).

Fue un show en la carpa, bastante modesto y tampoco es que fuera nada espectacular. Tuve la misma sensación que con Powerwolf en esa misma carpa. No me dio la sensación de que el grupo pudiera hacerse tan grande, pero luego, en disco, se veía que había algo grande allí.

No recuerdo exactamente ese concierto, pero es que hicimos más de mil conciertos en todos esos años. Sería en el verano de 2011. Ya llevábamos muchos directos encima, pero seguíamos en la búsqueda de nosotros mismos. Teníamos claro el cómo queríamos sonar e íbamos creciendo en sonido, compenetración y teniendo claro el cómo queríamos presentarnos ante la audiencia.

Estábamos muy unidos. Recuerdo que en ese verano de 2011 viajamos muchísimo. Éramos todavía una banda muy pequeña y no parábamos, durmiendo muy poco… Ahora lo recuerdo y fue todo muy divertido, pero ahora mismo estoy seguro que no lo disfrutaría de la misma forma ya que he pasado la barrera de los 40 años. Y sin recordar específicamente ese de Wacken te diría que sí hicimos grandísimos conciertos ese mismo verano.

Fue allí cuando percibimos que ese proyecto podía funcionar, que algo grande estaba surgiendo. Y especialmente en Alemania recuerdo que había muchísima gente, pero no les gustamos en absoluto. Se rieron de nosotros. Ghost tuvimos una pequeña crisis tocando en Alemania (risas). Fue bastante duro.

Siempre pensé que en Ghost había gente de Tribulation, una banda que me encanta especialmente. ¿Qué opinas de Tribulation?

Me gustan mucho, hemos tocado mucho con ellos y tenía el CD de Children of the Night, lo escuchaba mucho. Con el tiempo he conocido a los chicos de la banda, pero ya hace tiempo que no coincidimos. Me parecen fantásticos porque hacen una cosa que yo no puedo aprobar, y eso es el rock vampírico, o lo que sea. No es un heavy metal muy masculino, y se aleja mucho de lo que a mí me gusta.

Pero son un grupo muy cool. Tienen algo propio, hacen su camino y respeto mucho lo que consiguen. Pero no son una de mis bandas favoritas. No te mentiré: no me despierto por la mañana y pincho Tribulation. Pero sí los escucho ocasionalmente y cuando escucho noticias de ellos pienso siempre que son muy cools.

¿Cuál fue el primer disco que compraste con tu propio dinero?

Pregunta complicada puesto que mi padre tenía una tienda de discos y mi padrastro otra… La colección de discos de vinilo de mi padre era enorme. Así que no compré un disco hasta que fui a bastante mayor. Si el disco que quería no estaba en casa lo traíamos de la tienda de discos. Así que mejor te hablaré del primer disco que tuve como mío: el Appetite for Destruction de Guns N’ Roses.

Imagina que tienes mucho dinero para invertir en tu nueva gira. ¿Qué truco siempre quisiste hacer en el escenario, pero nunca conseguiste llevarlo a cabo?

Pensando en MCC sería difícil pues nunca he pensado mucho en ello, la verdad. En cambio, Tobias lleva pensando en la producción de un concierto desde que tenía tres años, ese era su objetivo y nació para ello. Yo creo que para mi proyecto contrataría a algún tipo de artista y le preguntaría ideas posibles para desarrollar algo pues no soy muy bueno en este tipo de cosas y de cómo presentarnos sobre un escenario. Otras veces creo que soy un poco vago.

Quizá algún tipo de capa, por la connotación mágica… pero ya te digo que me encantan los láseres y el humo. Me gustan ese tipo de bandas que aúnan la espectacularidad de los efectos con su música y se les ve cómodos así, casi como tocando en el comedor de su casa. Algunas de ellas no necesitan grandes montajes de luces y focos. Me gusta más cuando hay esa ambientación de cuento de hadas, no sé si me entiendes.

Hora de hablar de canciones perfectas. Dime tu opinión sobre las siguientes canciones:

“A Whiter Shade of Pale” de Procol Harum: No me gusta esa canción… No la puedo escuchar porque murió el padre de mi (medio) hermano mayor y sonó en ese funeral, y… siempre que la escucho tengo que salir de allí. Vale… no es mi canción perfecta, pero sí que es una de las más grandes que se han compuesto nunca. Y es que la canción es fantástica, pero no produce en mi ningún sentimiento positivo… A ver: si la diseccionamos y la analizamos desde un punto de vista técnico: es fantástica. Pero… es que no puedo escucharla. Me hace sentir muy triste, es horrible. Te diría otras canciones que pueden inyectarme más positividad. No sé… quizá tenga que darle otra oportunidad y escucharla otra vez.

“Spirit Crusher” de Death: Es fantástica… uno de mis mejores amigos siempre dice que Death es una banda que no tiene un tema malo, pero “Spirit Crusher” es del Sound of Perseverance, ese disco rojo de 1998 y yo prefiero otro disco: Human. Creo que es de 10 años antes vi su aparición el Headbanger Ballroom de la MTV y no entendía ese grupo y cómo sonaban: ¿qué es eso? Pensaba. Para mí, Death no son los del Symbolic ni el Screaming Bloody Gore, son los del Human. Esos son los Death que más me gustan.

“Square Hammer” de Ghost: Esta canción es fantástica, y en ella yo nunca participé, es obra de Tobias. Él la compuso toda y es genial. Es el perfecto ejemplo de lo que te decía antes de que es un pop endurecido, me encanta y creo que es genial

Y la última pregunta… si de repente te saliera la oportunidad de girar con Ghost, ¿aceptarías?

¿Por qué no? ¡Claro! Ghost es una gran banda. Si no aceptase ese ofrecimiento me estaría disparando en el pie. No habría ningún problema para aceptarlo. Pero no sería algo bueno para Ghost porque MCC no traería mucha gente de gustos diferentes a los cabezas de cartel… o eso me parece a mí (risas).

Ya que terminamos déjame decirte algo: las preguntas que has hecho son muy buenas. Muchas gracias por tu trabajo. Han sido muy interesantes y diferentes.

Jordi Tàrrega
Sobre Jordi Tàrrega 1372 Artículos
Coleccionista de discos, películas y libros. Abierto de mente hacia la música y todas sus formas, pero con especial predilección por todas las ramas del rock. Disfruto también con el mero hecho de escribir.