Hace menos de un año, Evan Wind y Brad Soria, tras abandonar su último proyecto musical, decidieron quedarse el uno con el otro y dar forma a uno nuevo, esta vez de la manera más simple: el primero con su bajo y el segundo con su batería, sin necesidad de nadie más. Para diciembre ya tendrían algunos temas listos para cocinarse, y a ello se pusieron unos meses después, y aquí está el resultado final: Frances Fang y su EP homónimo, en el que se hace evidente la procedencia californiana de ambos, pero también el abanico de sus influencias, pues aunque el principal cimiento de la grabación es el punk rock de la zona, hay innegables ramalazos de hard rock también.
Abre la veda “What’s Left” de una forma no especialmente acelerada pero sí bien cargada de la suficiente electricidad para hacernos vibrar y quitarnos las dudas, si las hubiere, sobre sobre cómo se las arreglará un dúo para defenderse sin guitarra. Que los presentes no son los primeros ni serán los últimos, pero no es raro que pueda haber dudas en un primer instante; aunque durarán eso, apenas un instante.
Con un pie en terreno de The Offspring y otro en el de Guns N’ Roses (por nombrar a dos), encontramos “Seen It All Before”, en la que sale a la luz la fusión de la que hablaba antes. Sin casarse con ninguno de los dos géneros predominantes en su estilo, pero con continuos guiños a ambos, la personalidad propia del tema termina de convencernos de comprar el formato.
Y por si no quedaba claro que los californianos se encuentran más que cómodos zigzagueando entre sonidos, como tercer envite nos sueltan “In the Dark”, una descarga de post-grunge para quien echase de menos un toque más alejado de la west coast.
Pegadiza y bailable tenemos “Parallel Hell”, con un estribillo que parece sacado directamente de un cajón olvidado a finales del siglo pasado, y cuyo relevo se encarga de recoger sin ningún tipo de conflicto “Don’t Call Me”, formando ambas un tándem de punk rock a la vieja usanza americana impecable.
Para encarar la recta final de los veinte minutos que Brad y Evan nos ofrecen, vuelven a jugar con varias barajas a la vez, y en “Once More” tenemos la mejor forma posible de despedirnos del dueto.
Con la sencillez por bandera y el corto tiempo de vida que tienen, Frances Fang ya han sido capaces de avisar, con tan solo seis cortes, de que habremos de estar atentos a su trayectoria, que nos augura más de una alegría. Espero tener suerte y que ellos tengan tantas ganas de publicar nuevos temas como yo de escucharlos.