Haren – Demo (EP)

Echo un ojo al calendario y, si no me engaña, parece que la época estival ha finalizado. Unas semanas en las que a base de eventos, junto con ciertos problemas técnicos y, no nos engañemos, haber pisado la casa menos que un feriante, me he prodigado poco o nada por estos lares. Y aunque dudo que nadie me haya extrañado especialmente, a mí me alegra decir que vuelvo a asomar por aquí, a intentar poner en el escaparate a cuantas bandas me vaya encontrando por el camino.

Y para encarar mi personal vuelta al cole, lo que traigo es una bofetada sin manos que lleva por nombre Haren y viene desde Murcia a repartir punk, pero punk de verdad, cargado de mala baba, rebosante de energía y contundente como lo fue en sus mejores tiempos. Tiempos que nunca se han ido del todo, pero ya sabéis aquello de las nostalgias, cuando éramos jóvenes y esas cosas.

El trío, que se puede decir que está recién formado, abre su demo con “Mátalos”, y hace evidente desde el primer acorde de guitarra que con ellas, tonterías las justas. Las formas y el fondo dejan patente que lo que nos vienen a ofrecer es punkarreo de la vieja escuela, con el encanto de las maquetas de antaño y la rabia que los kilómetros recorridos va otorgando.

La segunda patada, “Frakaso”, me llevó, desde la primera escucha, a acordarme de la voz de Yoli, quien se encargó (y parece que vuelve a encargarse) de agarrar el micro con Liposo+ Pa Tu Jeto. Lo dicho, estas murcianas han cogido el relevo de la mejor manera posible.

Para seguir repartiendo zapatilla arremeten con “Juventudes perdidas (Oi! Oi! Oi!)”, en el que nos encontramos un tramo final encabezado por el bajo de María puramente eskorbutiano, para dar paso a “Élite del punk”. Como el panorama de cualquier escena es igual en prácticamente cualquier ambiente, puedes coger el título de la canción y cambiar punk por el género que prefieras. Un ataque frontal a quienes con su pasividad dejan que los eventos y proyectos que siguen surgiendo a diario sean minoritarios y sólo se les oye/ve cuando la cosa va con ellos. O con su colega del barrio. Todos conocemos más de uno, supongo.

Y como colofón a esta breve pero impepinable presentación, las murcianas nos dejan “Soy una marrana”, primer tema que compusieron y del que reconocen estar un poco hartas, pero obligadas a cargar con él. De hecho, a punto estuvo de quedarse fuera de la grabación, pero la insistencia de María hizo que al final sí la registrasen. Y fue un acierto su empeño, porque el corte es perfecto para bajar la persiana: se desprende de la agresividad de sus antecesores, pero rebosa por los cuatro costados macarrismo y actitud. Una despedida a lo grande.

Con poco más de diez minutos de duración, la presentación de Haren va a hacer que todo aquel al que le guste el punk más callejero y rabioso (¿acaso puede el punk ser de otra forma?) le entren las prisas por tener un álbum completo del trío a la venta, y aún más por tener a la banda presentándolo en su ciudad. A mí, el primero.

Puti Allin

Melómano empedernido desde la más tierna infancia (lo de tierna es un decir). Todo lo demás que haya que contar, lo contaré sin problema en presencia de mi camarero.