Iconic – Second Skin

Parece que, últimamente, hay una nueva categoría musical, y es la de “supergrupos”, entendiendo por esto a formaciones con músicos reconocidos de diferentes bandas, que especialmente se juntan en Frontiers. Iconic puede estar dentro de esta categoría. De echo no solo puede, sino que está, pues el elenco es de infarto: Michael Sweet (Stryper) en las guitarras y voces, Joel Hoekstra (Whitesnake, Trans Siberian Orchestra) también en las guitarras, Marco Mendoza (Thin Lizzy, ex Whitesnake) al bajo, Tommy Aldrige (Whitesnake) a la batería y Nathan James (Inglorious) a la voz. Al ser Frontiers, Alessandro del Vecchio  anda también por ahí. Casi nada el line up, ¿eh?

La idea de Iconic nace de la mente de Serafino Perugino, mandamás del sello discográfico, cuya  intención era rodear a un cantante de gran talento y heredero de las grandes voces de los 70 y 80, como es James, de un elenco de figuras de renombre y amplia trayectoria.

La producción corre a cargo de Michael Sweet y Alessandro Del Vecchio. Ya se conocían de haber colaborado juntos en Sunbomb y existe buena química entre ellos. Por otra parte, Sweet y Hoekstra tenían desde hace tiempo la intención de colaborar juntos. Sweet se había convertido en fan de la voz de Nathan James a raíz de Inglorius. Y Nathan y Joel son amigos desde que coincidieron en Trans Siberian Orchestra. Por tanto, con la dupla de guitarristas ya en marcha, faltaba la sección rítmica, y nada mejor que la dupla Mendoza y Aldridge.

Second Skin (2022) es una colección de 11 temas de puro hard rock ochentero. No del festivo que suelo reseñar, es más elegante y técnico (nada que la formación no mostrase), con cosas de Whitesnake, por ejemplo, muy bien hecho, muy elegante y con mucha fuerza. A pesar de lo dicho, y especialmente viendo el line up, quizá esperase un poco más. Es un buen disco, de lo mejor del año, no se me malinterprete, pero creo que podría haber salido algo al estilo de 1987 (1987), y no es el caso. Bueno, quizá debamos esperar un cuarto de siglo para ver si estoy, o no, errado, pero esa es la sensación. Veamos el 1×1 de los temas.

Empezamos con uno de los singles, “Fast As You Can”, y es una de las destacadas. Desde el punteo inicial hasta el juego de voces James – Sweet, los cuatro minutos y medio largos nos llevan a la década prodigiosa con droga en vena. “Ready for Your Love” es, desde el título y pasando por el riff, Whitesnake puro, quizá con la excepción de algún arreglo de guitarra. El tema que da título al disco, “Second Skin”, gana enteros, en parte por el (muy) buen hacer de Aldrich a la batería (que bueno es este tío), en parte por el aroma a puro rock que desprende. Acabamos el cuarteto inicial con “All I Need” a modo de balada potente – medio tiempo. A mí no es de las que más me ha gustado, aunque alguna línea vocal es muy buena.

Empezamos el segundo bloque con “Nowhere to Run” y vuelve a ser otra de las destacadas. Me sobra algún punteo, como en tantas canciones del disco, pero es un gran tema rockero, sin duda, en el que todos los integrantes demuestran su nivel. De nuevo bajamos muchas revoluciones con “Wolrds Apart”, y de nuevo es de las que menos me gustan, especialmente si el disco ya tiene (y tendrá) algún tema así. Es un buen tema, sí, pero… si hay un pero, está todo dicho. “All About” no gana en velocidad, pero sí en actitud rockera y riffacos muy marca de la casa del dúo guitarrero.  Entre estas dos últimas encontramos “This Way”, que en algunos momentos me ha recordado a Pretty Maids. Este tema es un gran ejemplo de lo que decía antes: siendo una muy buena canción, creo que podría dar más de sí viendo la pólvora que tiene el grupo.

Empezamos la recta final con “Let You Go” y de nuevo podemos irnos al párrafo anterior: un medio tiempo melódico que está muy bien pero que, para mi gusto, puede dar más de sí. ¿Hacemos copy+paste? Venga, pero ahora le cambiamos el título por “It Ain’t Over”, a pesar de la aceleración que toma tras la intro. No sé, me da la sensación de que han hecho un tema (un gran tema) con retazos de otras canciones. Acabamos con “Enough of Your Love”, y de nuevo nos transportamos a Whitesnake. Temazo de hard rock muy en la honda del mencionado grupo que, para mí, también es de las destacadas.

Lo que son las expectativas y el talento, ¿eh? Nos encontramos ante un gran disco de rock, sin duda, pero le falta un puntito de no sé qué para ser una auténtica bomba. Quizá menos medio tiempos melódicos y algo más de actitud rockera, incluso propia. Quizá indagar otros caminos. No sé qué es exactamente, pero ese punto lo pueden dar y espero que lo hagan en un hipotético segundo disco, porque el talento de los cinco (seis) componentes lo puede.

Xavi Prat

Llevo en esto del heavy más de media vida. Helloween y Rhapsody dieron paso a Whitesnake y Eclipse, pero Kiske sigue siendo Dios.
Como no sólo de música vive el hombre, la literatura, Juego de Tronos y los tatuajes cierran el círculo.
Algunas personas dicen que soy el puto amo, pero habrá que preguntarles por qué.