A falta de giras, este 2020 será recordado por el año de los discos en directo. Cientos de bandas han aprovechado el parón para editar álbumes en vivo ante la falta de nuevo material y para afrontar esta tan y demasiado etapa sin conciertos en nuestras ciudades.
Y los reyes de los discos en vivo se unen al festín y nos presentan un directo de la pasada gira Legay of the Beast 2018-2019. El nuevo disco titulado Nights of the Dead recoge lo que presuntamente era lo mejor de cada una de las tres citas de Iron Maiden en el Palacio de los Deportes en Ciudad de Méjico. La Doncella citó a los siempre calurosos fans latinos las noches del 27, 29 y 30 de septiembre de 2019. ¡Casi nada!
Se trató de una gira de 82 fechas repartidas entre 2018 y 2019 y con parada en el Metropolitano de Madrid el 14 de julio de 2018. La banda de Bruce Dickinson y Steve Harris no es habitual en mover mucho el setlist en las giras y, si no voy errado, ejecutó las mismas 16 canciones en las 82 fechas.
¿Qué podemos esperar de un nuevo directo de Iron Maiden? Sinceramente, no creo que nadie espere alguna novedad. Y más cuando has publicado ya 11 discos en directo, cinco de ellos en los últimos 15 años. Evidentemente no van a superar nunca el nivel de Live After Death (1985), ni siquiera van a intentar igualar el Rock in Rio (2002). Pero bueno, siempre es una buena excusa para echarte una dosis de Maiden en vena.
Escondido tras una portada algo “amateur” acostumbrados a las míticas imágenes de la banda, Nights of the Dead nos azota durante 1h 40′. Lo primero que un servidor piensa es en Bruce. Su gira post cáncer fue un éxito y lamentablemente no la pude disfrutar en directo. Pero, ¿en qué estado físico estuvo Bruce en la citada gira?
Tras una escucha al disco entero me sacude la triste percepción e impresión de que Bruce ha perdido el filo. Adoro a Bruce Dickinson como persona tanto como el excelente cantante que ha demostrado ser. Admiro su valentía para afrontar una terrible enfermedad y alucino con su vuelta al ruedo. Pero, seamos sinceros, esta es la peor versión de Bruce Dickinson en vivo. No vocaliza, no llega, no atina. De las 16 canciones, solamente le he visto bien en “The Wickerman”. Lo siento, Bruce, te quiero, pero tengo que ser sincero.
En cuanto a la banda, bien, viento en popa como es habitual. Pero ya no arriesgan nada ni tocando ni preparando el setlist. Lo más destacable en este nuevo directo es “The Clansman” y “Sign of the Cross”, dos canciones de la época Blazeinterpretadas con poco carisma por Bruce. ¡Cómo echo de menos ver canciones diferentes en los shows de Maiden!
Otro detalle a tener en cuenta y creo que es el más importante de todos, la producción. Horrible. Han querido pulir tanto el sonido de la banda que parece que estén en el estudio y pongan unos rellenos de aplausos o coros de público en algunos momentos clave. Los fans Mejicanos tienen fama de ser calurosos, próximos e incluso salvajes (sin ánimo de ofender claro) y en este disco no se recoge nada esta sensación de comunión banda – fans.
A parte de esto, hay momentos que los instrumentos suenan demasiado fuertes e incluso molestos. Véase el sonido de los platos de Nicko en “Sign of the Cross”, horripilantes. Y para acabar, los coros de ayuda a Bruce de Adrian y Steve… mal.
Pero bien, no todo va a ser malo. La banda sigue sonando intensa y pulcra. Los clásicos siempre serán clásicos. Y por esto adoramos a Iron Maiden. Me encanta ver “The Wickerman” en el repertorio, una canción que adoro. Al igual que escuchar “Flight of Icarus” o “Revelations”. Lejos de los demasiado expuestos, estos clásicos me hacen vibrar como ninguno.
Al final, entiendo que el objetivo de un disco en directo es captar la energía de la banda en ese preciso momento de la carrera. Con la sucesión de discos en vivo de Iron Maiden podemos analizar que la banda va a capa caída. Es evidente, Nicko McBrain ronda los 70, mientras que el resto del quinteto se acerca a los 65. Si fuesen los Rolling Stones me preocuparía ver como envejecen así, pero son Iron Maiden, no vivirán eternamente como Mick Jagger, Keith Richardsy Charlie Watts. (Lease la ironía entre lineas).
Todo esto me lleva a la conclusión final. Disfrutemos de Iron Maiden en directo cuando podamos. Porque no todo dura eternamente. Mientras, esperamos con ansias un nuevo disco de estudio. Pero que si éste no llega, no pasada nada. Ya se han ganado el cielo.