De donde nunca podrías imaginar, ni dando 10 respuesta al azar, es originario el proyecto La Perra Blanco. De hecho, no voy a decirlo hasta el final de la reseña de este nuevo disco que hoy nos ocupa. Alba Blanco capitanea con orgullo un trio de urgente rock ‘n’ roll y rockabilly. Con urgente me refiero simplemente que es poco habitual en nuestro país encontrar un sonido tan marcado como lo es en distante en influencias. El sonido de la Norteamérica profunda es el santo y seña de La Perra Blanco, lejos de rock, ahora también filtreando con el country e incluso con cierto deje popabilly en alguna de sus nuevas composiciones.
Alba actúa y compone a partes iguales, de ella es la guitarra y la voz. No sabríamos decir cual de las tres facetas domina mejor, pues la verdad es que es un gozo en cualquiera de sus labores. El trio en cuestión lo completan Guillermo González con su bajo y Juan Andújar con la batería. Comentar que no son meros espectadores de la función, su labor en las sombras dota a La Perra Blanco de una verticalidad y poderío digno de admirar.
El proyecto debutó en 2019 con Bop & Shake, en 2021 regresaron un un homónimo EP y ahora retoman el camino con Get It Out (2024) un disco que podemos asegurar, no pasará inadvertido. Ya por así comentarlo, La Perra Blanco fue una de las últimas y más celebradas incorporaciones al flamante cartel del próximo Azkena Rock 2024.
Para entender el rock de La Perra Blanco es necesario viajar 70 años atrás en el tiempo. Artistas como Little Rickard o Carl Perkins han sido la influencia directa de Alba Blanco quien ya de jovencita disponía de la vieja guitarra de su padre para practicar. Puedes caer en la tentación de buscar un símil con la grandiosa Amy Winehouse, quizás por estética, su peinado y su provocadora forma de ser tan sureña (primera pista de su lugar de nacimiento).
Get It Out es un trabajo de 12 cortes de rock de ese que invita a uno a mover el esqueleto, algo que la propia Alba luce como nadie en sus directos por cierto. Un disco divertido, ligero, dinámico y armonioso. El rockabilly se funde con la americana con hermosura creando canciones memorables como la deliciosa “Don’t Break My Heart” en el que el amor vs desamor crean el resto. Una temática recurrente en todo el disco, decía Alba en una entrevista reciente que “por mal que me sepa decirlo, el género masculino influye bastante en mi vida”.
A destacar el trabajo de producción y masterización a cargo de Mike Mariconda el primero, capaz de encontrar un sonido más agresivo. Jorge Perez el segundo, abriendo las miras de la banda buscando un sonido más abierto. Este sonido más abierto podemos degustarlo en la comentada “Don’t Break My Heart” con una estética más pop y más alejada de lo que conocíamos de La Perra Blanco.
Pero si vamos a mirar las verdaderas raíces de este proyecto, lo mejor es dejarse llevar por canciones como “Come Back Home” de aire rockero que cuenta con la inestimable ayuda en las voces de Carlos Tarque. O en “Treat Me (Like a Man Should Do)” en el que la banda añade un teclado Hammond por primera vez en su carrera haciendo crecer el sonido hasta nuevas cotas. El estilo frenético de “New Lover New Sweetheart” te invita a levantarte del sillón.
Sin entrar a revisar corte a corte este maravilloso nuevo disco, comentar que la gaditana (¡ahora sí!) ha nacido para esto. Se nota en su soltura, su pose, su talento y su forma de componer y actuar. Crea una conexión entre su música y el oyente posiblemente arraigada a su forma de cantar, su estilo cercano. Con Get It Out confirma con rotundidad que este torbellino que es La Perra Rubio no puede dejar de crecer, ni por asomo.