Mi última experiencia con Crim fue bastante agridulce a pesar del bolazo que se marcaron en el escenario del Fòrum. Las condiciones para disfrutar del concierto no fueron las mejores: punk rock, mascarillas y distancia social.
Pero todo esto queda en el olvido leyendo cualquiera de las crónicas que mis compañeros han hecho tras prender fuego a cualquiera de las salas en las que han tocado. Un ejemplo, las palabras de Jordi Tàrrega:
“A veces los sueños se cumplen para los grupos, y cuando hice de pitoniso en la entrevista con los cuatro miembros de Crim, aposté a que, no sólo iban a llenar la mayor de las Razz, sino que ya podían ir buscando recintos más grandes. La primera de las predicciones se cumplió y los cuatro tarraconenses colgaron el cartelito de sold out, algo realmente extraordinario, pues parece ciencia ficción que un grupo de punk cantando en catalán esté consiguiendo un éxito absoluto sin necesidad del apoyo de medios generalistas.”
En esta ocasión no llenarán la mayor de las Razz pero seguramente volverán a colgar el cartel de “no hay entradas” en la Salamandra de L’Hospitalet de Llobregat, en una prometedora gira en la que vendrán acompañados por un buen puñado de bandas, que irán cambiando en función del lugar en el que toquen.
Puestos a analizar la ya importante discografía de los tarraconenses, siete discos en 12 años de carrera, nos encontramos que no hay disco malo, ganando a pulso y mucho sudor el respeto, la admiración de todo aquel que se acerque a su propuesta, sin contar con el apoyo de medios generalistas a pesar del éxito de sus trabajos y el lleno absoluto de cualquier sala en la que decidan tocar.
En esta ocasión vienen presentando Cançons de mort (2023), espectacular último trabajo de estudio que se ha hecho de rogar tras su memorable Pare nostre que esteu a l’infern (2018), mitigando la impaciencia con su auto homenaje de aniversario 10 anys per veure una bona merda (2021).
Si el pasado mes de marzo la liaron parda en la grande de las Razz, Salamandra promete ser una olla a presión contando la cercanía existente entre público y banda dentro de la sala. En esta ocasión vendrán acompañados de Arkada Social y Sewer Brigade.
Los guipuzcoanos Arkada Social escupirán su street punk forjado durante los 26 años de intermitente trayectoria. Potentes y agresivos, vienen girando con su último trabajo No retorno (2019) mientras esperamos novedades de un nuevo disco.
Sewer Brigade, traerán su último trabajo Fins que tot sigui cendra (2021). Punk directo y contestatario que caldearán el ambiente en una noche otoñal.
Pero tranquil@s, si no puedes acudir, aún tenéis otras oportunidades de disfrutarlos aún más cercanos en la intensa Rec On Fire de Igualada al día siguiente, en Valls, Vic o Mataró durante el mes de noviembre y diciembre antes de volver a quemar más salas durante la gira española.
Amante del metal en su variedad de estilos. Vivo con la esperanza de poder llegar a viejo acudiendo a salas de conciertos y festivales. Si los rockeros van al infierno, que me guarden sitio y una cervecita.
Salud y Heavy Metal.