La diosa rubia alemana de Düsseldorf recala otra vez en la Península Ibérica para ofrecernos otra demostración de que sigue estando por encima del bien y del mal. Serán tres fechas en Pamplona (15 de marzo), Madrid (16 de marzo) y Barcelona (17 de marzo), y ya os avisamos que en la capital se ha colgado el cartel de “no hay entradas”. La última vez que Doro subió a nuestros escenarios fue el pasado agosto en el Leyendas del Rock. En esa ocasión nos ofreció un set muy especial en el que los clásicos de Warlock eran la tónica general.
Esta vez hay un giro en el guion y la teutona se centrará en su último doble trabajo: Forever Warriors y Forever United. Un trabajo arriesgado pues en pleno 2019 pocas bandas optan por un doble disco en estudio, pero ella siempre ha ido a la suya, y de hecho ha conseguido algunas de las mejores composiciones en años. Obviamente tampoco va a poder olvidar algunas de las composiciones más míticas de su paso por Warlock como son “I Rule the Ruins”, “Für Immer” o la archiconocida “All We Are”. Recordemos que Doro Pesch lideró a los Warlock en Burning the Witches ya en 1984. Eran tiempos en los que era una rareza que una mujer liderara una banda de heavy metal, pues desde su concepción el heavy metal estaba ideado para un público joven y mayoritariamente masculino.
Doro ha sido (y es) una gran vocalista y compositora, pero ante todo es un símbolo, una pionera en un mundo de hombres que nunca se arrugó y que se ganó fácilmente el respeto de toda la escena. Alcanzó la gloria con Triumph and Agony en 1987 y pronto las ofertas para que realizase una carrera en solitario se multiplicaron. Empezó en solitario con Force Majeure (1989) y ha ido encadenando grandes trabajos a lo largo de estas tres décadas aunque el exitazo conseguido con su último disco con Warlock nunca ha sido igualado. También ha podido trabajar con compositores y músicos de primera línea mundial.
Durante décadas fue imposible verla por estos lares y en los 90 uno sólo podía soñar con viajar a Wacken para poder asistir a sus conciertos. Pude cumplir mi sueño en el año 2000 en la Meca del Metal y poder vivenciar todos sus clásicos más el entonces excelente material del Calling the Wild. Incluso, y sin saberlo, supimos de rebote que Doro estuvo en Barcelona tocando en el interludio de un partido de fútbol americano con los entonces Barcelona Dragons contra un equipo alemán. Era un intento perpetrado en los 90 para acercar el fútbol americano a las masas europeas y funcionó a medias. Nadie hubiera imaginado que el equipo germánico se hubiera traído a la eterna Doro para tocar en playback “Burn It Up”.
Luego supimos que en Wacken era una habitual y que cada año corría por allí. La he podido ver cantando junto a Lordi, Udo o Holy Moses e incluso he podido hablar con ella en persona. Si algo define a esta mujer es pasión y autenticidad. Transmite con su palabra y con su mirada, y lo que ves, es lo que hay. Es una obrera del rock por lo que está a años luz de cualquier rock star al uso. La pudimos entrevistar también en un programa radiofónico hace varias décadas y de verdad que se mostró tan cercana y entusiasmada que te hace disfrutar cuando habla. Sale a darlo todo y cuida al fan como pocos artistas lo hacen. Hay muchas palabras para definirla, pero yo me quedaría con una: la de EJEMPLO.
Como curiosidad deciros que ella siempre ha dicho que nunca se casó ya que había dado el sí antes a los fans ya al rock. ¡Chapeau!