Hemos hablado sobradamente de Machine Head estos últimos días, pero es que una visita de los de Robb Flynn siempre se convierte en un pequeño gran evento. Si a lo largo de su carrera se han ido labrando un merecido lugar en el olimpo del metal a base de personalidad y de hacer lo que les ha salido de los mismísimos en todo momento, en estos últimos años se han convertido en un fenómeno casi único por su decisión de renunciar a tocar en festivales y de prescindir de bandas teloneras para abrir sus conciertos.
De esta forma, la única manera que tenemos de ver a los californianos hoy en día es asistiendo a los rituales de dos horas y media y 25 canciones que etiquetan como «An Evening with Machine Head» y que van paseando por el mundo con orgullo. En su última visita a nuestros escenarios, en 2016, ya lo hicieron bajo este formato, en lo que fue un notable ejercicio de comunión y sinergia entre banda y público. En esta ocasión, lo repetirán con un nuevo disco bajo el brazo, el polémico Catharsis, cuya presencia en el setlist apunta a ser bastante limitada.
Ríos de tinta se han escrito sobre este nuevo trabajo de Machine Head, desde exageradas alabanzas hasta palos injustificados y llenos de rabia. Algunos dicen, y no es un cumplido, que se trata del nuevo The Burning Red, otros dicen que solo The Blackening lo supera. Supongo que estas opiniones enconadas y enfrentadas no dejan de ser un piropo hacia el trabajo de Robb Flynn, un tío que siempre ha luchado por no dejar indiferente a absolutamente nadie, consiguiéndolo en la mayoría de ocasiones. De hecho, de eso trata un poco el metal, ¿no?
En los últimos años nos han visitado con bastante regularidad y siempre han cumplido de sobras, algun que otro bolo de impresión con otras descargas algo más frías. Será interesante ver como responde la gente a temas tan controvertidos como «Bastards», cuyo tono folk punk ha indignado a muchos pero que me huelo que será un pepinazo en directo y, sobretodo, será interesante ver si aprovechan los 150 minutos de los que dispondrán para meter alguna sorpresa poco habitual. Si nos hemos de fiar de los setlist de este principio de gira, no va a ser precisamente así, y las perlas escondidas de sus dos primeros discos tendrán que esperar unos años más.
Almenos, podremos disfrutar de nuevo del emotivo discurso previo a «Darkness Within», donde su mención a la primera visita de la banda a esta misma sala Razzmatazz en 1994, casi 25 años atrás, teloneando a Slayer en la gira del Divine Intervention, nos recordará lo viejos que somos tanto nosotros como ellos. Ya sé que lo repite cada vez que viene, pero tampoco pasa nada por escucharlo cada par de años. ¡A mí ya me estan entrando ganas!
¿Así, qué? ¿Preparados para pasar otra noche junto a Machine Head?
Siempre me ha encantado escribir y siempre me ha encantado el rock, el metal y muchos más estilos. De hecho, me gustan tantos estilos y tantas bandas que he llegado a pensar que he perdido completamente el criterio, pero es que hay tanta buena música ahí fuera que es imposible no seguirse sorprendiendo día a día.
Tengo una verborrea incontenible y me gusta inventarme palabras. Si habéis llegado hasta aquí, seguro que ya os habéis dado cuenta.