Por las calles de Viveiro ya se empieza a respirar ambiente de metal y es que como viene siendo habitual, cada vez son más los festivaleros que alargan su estancia en este hermoso pueblo gallego para disfrutar de la playa, la cultura y la gastronomía además de cuatro días de metal en todas sus vertientes.
Este año se vuelve a prever un gran ambiente en el festival ya que tras anunciar el sold out de abonos en el mes de enero en abril anunciaron cambios en el recinto que les permitió poner a la venta 500 nuevos abonos que también volaron. También colgaron el cartel de sold out en el Resucamp poco después de ponerse a la venta y el ritmo de venta de las entradas diarias es superior al de años anteriores.
El Resurrection Fest se ha caracterizado siempre por ofrecer los servicios que son un valor añadido para los festivaleros. Además de la acampada gratuita, las clásicas taquillas o el servicio de duchas incluidas en el Resucamp y el Beachcamp, la zona A de acampada gratuita tendrá a disposición un supermercado itinerante gracias a la colaboración de Velgasa. También para los mas pequeños vuelve una nueva edición del ya exitoso Resukids, en los que la chavalería podrá disfrutar de múltiples actividades relacionadas con el festival mientras que los padres están en el concierto. Y como novedad este año ofrecen un servicio gratuito de recarga a través de un servicio de baterías de móviles, para no tener que esperar pegado a un enchufe mientras carga el dispositivo.
Pero todo esto por si solo no valdría de nada de no ser porque el cartel de este año es uno de los más potentes de todas las ediciones. Este 2019 la organización ha optado por el volver un poco a los orígenes del festival, huyendo de grandes cabezas de cartel que atraían gente, pero que poco tenían que ver con el espíritu del Resu. Sin duda el mayor atractivo es Slipknot, que vuelven a los escenarios y cuyo nombre ya sonaba desde que el año pasado Corey Taylor dijera en el escenario que volvería al Resu. Y frente a unos que vuelven, están otros que se van. Slayer hará parada en Vivieiro como parte de la gira de despedida. La banda lleva girando desde 1981 y es sin duda uno de los nombres de oro del thrash metal, además de ser de una de las más apreciadas por el público.
El mismo día tendremos también otra de las descargas más esperadas: Parkway Drive. Los australianos darán en exclusiva en Vivieiro su único concierto en la península y vendrán con su producción completa. También contamos entre los cabezas de cartel con King Diamond, uno de los últimos en unirse al cartel por problemas de exclusividades y también uno de los más esperados. El danés vendrá con su producción completa de la que podremos disfrutar en plena noche el mismo día que también tendremos a Within Temptation también con su show completo. Todo un lujo
Pero el Resu es mucho más que cabezas de cartel, ya que 100 bandas en cuatro escenarios dan para mucho. Así podremos tener por fin en un escenario grande a Municipal Waste en la Warm Up Party, tenderemos de nuevo por el festival a Gojira, Arch Enemy y Crystal Lake. Los amantes del punk más clásico podrán disfrutar de The Addicts, una de las bandas más míticas que sigue en activo. Los más thrashers seguro que no se perderán a Testament, Crisix o Strikeback. Y nos despediremos también de otra de las bandas estatales más queridas Berri Txarrak.
Como ocurre en este tipo de festivales, no se podrán ver a todos los grupos y en algunos casos habrá solapes más o menos dolorosos, según los gustos de cada uno. En mi caso el solape entre el final de Parkway Drive y The Addicts, junto con el de Lamb of God y Analepsy me van hacer pensar mucho que hacer. Pero, a pesar de eso, este año el horario está bastante más conseguido que en años anteriores, teniendo en cuenta el volumen de conciertos. Lo que se echa en falta este año es más presencia de black metal y de punk, aún así, está claro que esta va a ser la edición más brutal, masiva y con más expectativas del Resurrection Fest.
Donde hay música, hay vida y alegría. Blues, Hard, Punk, Hardcore, Thrash, Death, Crossover, Folk, Black… que más da la etiqueta si me gusta? Primero abrí la mente y después las orejas.
