Este próximo viernes vamos a tener de nuevo a los Hellacopters en sala después de tantos años de espera. Algo que no pasaba desde 2008 en el Razzmatazz 2 y eso que el pasado día 1 de mayo, día del trabajador, ya estuvo el incansable Dregen con sus Backyard Babies haciendo uno de los mejores conciertos de los Babies desde su reunión. Los Hellacopters también se han reunificado hace bien poco. En 2016 volvieron a los ruedos tras tantos años de ausencia. El calendario siempre lo marca el gran Nicke Royale, uno de los tipos más ocupados del rock. Por nuestras tierras han venido dos veces en estos últimos años, ambas en el festival Azkena Rock de Vitoria-Gasteiz. La primera fue bastante desastrosa, pero en su segunda venida arrasaron y convencieron gracias al cambio de bajista. De todos es sabido que cuando tocas con Sami Yaffa la cosa siempre gana muchos enteros. Inolvidable ver ese tridente en primera línea de fuego con Royale, Dregen y Yaffa. Actualmente para esta gira tienen a Dolf DeBorst a las cuatro cuerdas.
Los Hellacopters se fundaron a principios de los 90, debutando discográficamente hablando en el 94 y siendo punta de lanza del movimiento de rock sucio escandinavo, a medio camino entre el punk y el sleazy angelino. Tomaron el nombre de los helicópteros negros que sobrevuelan la frontera con México vigilando el tránsito de la inmigración ilegal. Allí los llaman con este nombre: Hellacopters. La invasión escandinava fue uno de los grandes momentos de los años 90, la última década esencial para la era del rock. Nicke provenía de Entombed, banda sensacional de death and roll y en la que tocaba la batería. Debutaron con Hellacopters con Superhitty to the Max y allí ya se pusieron los cimientos de la invasión escandinava. Ganaron incluso un Grammy sueco. Ese mismo disco fue tocado en toda su integridad en su primer concierto de reunión en el Azkena. Nicke siempre ha sido fan de Kiss y uno de sus objetivos vitales es el de grabar el disco de rock ‘n’ roll perfecto. Piensa que no lo ha conseguido, pero hay varios con los propios Hellacopters o incluso con Imperial State Electric que se acercan mucho a la perfección.
Entre su discografía hay muchos clásicos básicos del estilo, pero fue en el año 2000 y con High Visibility cuando el grupo alcanza una de sus cotas de perfección. Dregen había abandonado el grupo para centrarse en sus Backyard Babies y tras varias pruebas fichan a un nuevo guitarrista, el rubio Robert Dahlqvist. Robert murió el pasado 2017 siendo una baja fundamental para la reunión y un golpe moral que dejó al grupo destrozado. En su último concierto en el Azkena viví una incómoda situación cuando, ya fallecido Robert, unos fans del grupo me confundieron con él y me tocó darles la noticia (la anécdota da para un delirante futuro artículo).
Aparte de Barcelona los Hellacopters van a encabezar uno de los festivales que más amamos en Science of Noise: el Kristonfest de Madrid. Una jornada de dos días con un colofón inmenso que será su concierto. Cabe añadir que hace unos meses en La 2 de TVE el rock volvió a la pequeña pantalla y ofrecieron tres temas en directo del grupo y una entrevista con Dregen y Nicke. Si quieres más información sobre lo acaecido échale un vistazo a la entrevista que le hicimos a Nicke hace un mes. Vuelven los Hellacopters, vuelve la diversión, y más cuando los ‘77 ejercen de teloneros.