Vidres a la Sang lo dejaron actualmente hace unos nueve años allá por el lejano 2010. La decisión seguramente no fue fácil de tomar (en esta primera entrevista nos lo explican) y desde esa época se les ha echado de menos. Fueron pioneros en una manera diferente de entender la música dando mucha importancia al mensaje y sobre todo en que lengua se expresaban. Tras una travesía de nuevos mundos y experimentación y seguramente derivado de las ganas de todos y el boom que ha habido del revival, decidieron el año pasado volver a la acción con su nuevo disco Set de Sang bajo el brazo. Un disco que sigue la estela de su característico estilo moviendose entre el death y el black metal de una manera natural.
No había duda que lo presentarían en la ciudad condal, exactamente en la sala Boveda el próximo día 8 de marzo donde nos mostrarán el poderío de canciones como «Els Vents Bufen a Favor» (primer single que presentaron), «Emergiré» o «El Mur» desplegando todo un arsenal de buen gusto. Con otras influencias que han entrado en su mundo musical nos harán ver el resurgir de entre las cenizas cual ave Fénix. Esperemos que también nos deleiten con clásicos de sus otros discos como «Policromía», «Amb tota rancunia» o «El més dur sempre guanya».
Estarán acompañados por los irreverentes Barbarian Swords con Von Päx a la cabeza escupiendo sus blasfemias e insultos proferidos al respetable con su mezcla infecciosa de black y doom metal, una mixtura que puede parecer extraña pero que ellos saben hilvanar de manera perfecta y oprimirte sin compasión.
Esperemos que se llene la sala para darles la bienvenida como es debido a estos clásicos de la escena catalana a los cuales tenemos muchas ganas de volver a ver en acción. Concierto organizado por Blood Fire Death.
Death, thrash, djent, dark, progresivo, doom, black, experimental, jazz, clásica, electrónica… La música me mantiene vivo, es una droga que da sentido a este extraño sueño llamado vida. Músico autodidacta, guitarrista, cantante y enfermo de escuchar y escuchar música sin parar.
