Había quedado en el tintero un disco espectacular del rock neogótico actual. Lord of the Lost son junto a Mono Inc. las dos bandas alemanas que parece que están tomando el relevo a los enormes Lacrimosa o Crematory. Indagan en su legado, pero aportan a la escena una enorme personalidad y una gran colección de himnos realmente potentes. No son flor de un día, pues llevan mucho tiempo avanzando, y en el caso de Lord of the Lost estamos ante su obra más extensa y trabajada. Marcará su porvenir.
El disco ha alcanzado el número dos en las listas alemanas y ya ha conquistado todos los países de habla germana, por lo que pronto se va a expandir por países colindantes. Os recuerdo que cantan en inglés… Me parece un grupo comercialmente par explotar pronto y que lo posee todo para triunfar allende de sus fronteras. Aquí hay un disco doble bajo los nombres de Damnation (más triste) y Salvation (más positivo) en los que se explora la historia apócrifa de Judas Iscariote, el gran traidor a ojos de la Biblia. Hay un órgano de iglesia y un piano de cola. Se agradece que hayan apostado por instrumentos reales.
Damnation
El inicio es de quitarse el sombrero con la inicial “Priest”, siendo un inicio de disco que va a medio tiempo, con arreglos casi orquestales y momentos muy duros en el riffeado. Juegos de volúmenes e incluso pasaje acústico. Es una demostración de fuerza de lo que son capaces Lord of the Lost. Y hay más… el segundo tema fue un clarísimo single, de esos que se te van repitiendo en la cabeza durante días enteros: “For They Know Not What They Do”. Suave y melosa, dándose la mano con el piano y con el añadido de las voces angelicales de los niños, aunque bañadas en oscuridad. Chris “The Lord” Harms demuestra que su profunda garganta es perfecta para el estilo practicado.
Sorprende lo efectiva que es “Your Star Led You Astray” pues parece que juega con todos sus tópicos, pero aun así hay un par de vueltas a la tuerca, funcionando a la perfección. “Born with a Broken Heart” no baja el listón en un medio tiempo cercano a los de Crematory, especialmente por los arreglos y esa base de batería por parte de Niklas Kahl. El tratamiento de coros y la cadencia puede incluso recordarte a Kamelot cuando juegan con ampulosos coros y voces femeninas invitadas.
Sigue el idilio con las musas en “The 13th”, buscando aunar melodía de medio tiempo, con juegos de samplers y unas percusiones con reverb, todo cosido con el órgano de iglesia. Voces agónicas en “2000 Years a Pyre”, otra canción con madera de single que luce especialmente en el primer disco. Es obvio que el grupo tiene una fórmula ganadora y la explota, pero sabe encontrar suficientes elementos diferenciales para que las canciones funcionen.
La balada “Death Is Just a Kiss Away” es un bonito momento en el que orquestan con ese órgano de iglesia, dejando a Harms mano a mano con el instrumento, mientras unos violines embellecen la propuesta. Realmente logrado, especialmente cuando el resto lo ponen los coros. Coqueteos industriales en “The Heart Is a Traitor” con la que ahondan en esa dirección, además que juegan con gritos desgarrados. La serie media de las composiciones es realmente alta.
Sobria y elegante es “Euphoria” siendo otro medio tiempo con las orquestaciones en todo lo alto y con el sello que marca siempre la voz de Chris. “The Death of All Colours” cierra de forma solemne el primer acto, muy teatral, y con voces angelicales de iglesia. Mucha profundidad y colores, siendo uno los momentos más rompedores del disco.
Salvation
El segundo disco es tan bueno y trabajado como el primero. En “The Gospel of Judas” el grupo arremete con otro tema que es un single evidente pues lo tiene todo, a la vez que les define perfectamente, jugando tímidamente con lo industrial. Continúan con otra pieza realmente inspirada como es “Viva Vendetta”, que se va oscureciendo entre sombras para encontrar unos teclados arbolados y con las caídas de caja y bombo bien acentuadas por parte de Niklas.
“Argent” es esotérica en su apertura cumpliendo bien el expediente y aludiendo a las monedas de plata, y “The Heartbeat of the Devil” ahonda en los sintetizadores dando un enfoque más post punk 80s con muchísima clase. Os diría que me parece uno de los mejores temas de esta extensísima obra repleta de matices. Mismos ingredientes para “And It Was Night”, aquí con coros envolventes y celestiales. Los guitarrazos de Pi Stoffers ponen la base para “The Ashes of Flowers”, de las más duras del disco, pero también buscando el contraste evidente con esos momentos de pausa y coros de iglesia.
A fiesta gótica no decae e “Iskarioth” es una de las canciones más definitorias de su estilo y que más conecta con su pasado. ¡Cómo canta este hombre! El momento sosegado llega con “Apokatastasis”, poco más de dos minutos que te llevan hacia el gran final que supone “Work of Salvation”. Aquí resumen un poco todo lo que es este ambicioso trabajo. Medios tiempos con orquestaciones y de gótico elegante, que tributa a los grandes del género, pero buscando su propia personalidad. Si es que escuchas “A World Where Be Belong” y ves que es otra candidata a sencillo. Puede que haya repetición de esquemas, pero el disco pasa como un suspiro, y estamos hablando de 24 temas de más de cuatro minutos. Tienen la fórmula y la hacen lucir una y otra vez.
Es un disco al que hay que dedicarles escuchas y tiempo, pero más por su extensión que por otra cosa. Verás cómo esa música penetra fácilmente en ti sin apenas esfuerzo. Es la enésima demostración de que este grupo está para salir del Centro de Europa y llegar a todas partes del mundo. Estoy más que convencido que conquistarán Sudamérica sin apenas esfuerzo y que el combo de Chris Harms pronto estará en festivales de todo tipo de música. El M’Era Luna se les ha hecho pequeño ya.
No solamente estamos ante los reyes del gótico alemán (con permiso de Mono Inc), sino que estamos ante un grupo que posiblemente tenga la propuesta de rock gótico más brillante que hay en la actualidad. Se marcan un disco doble plagado de singles, con una historia que hilvana el disco y en la que no hay momentos para el relleno. No se me ocurre ahora mismo a ningún grupo capaz de conseguir algo así que no sean Lord of the Lost. Impresionante.