Año nuevo, vida nueva, dice el dicho (y el trabalenguas, casi), pero nosotros seguimos igual. Este principio de 2020 viene cargado de cosas buenas. Tantas que es difícil hacer una criba y quedarse sólo con 5. ¿Qué pongo? ¿A los que les tengo más ganas? 5 no son suficientes. ¿A los más esperados o más grandes? Relativo. Pondré los que cubriré seguro y alguno más. Y esperar a que, en un mes o dos, pueda cambiar todo por anuncios que estén por llegar.
Sabaton + Apocalyptica + Amaranthe
Martes, 4 de febrero de 2020 | Sant Jordi Club | Barcelona
Una vez leí, en un artículo humorístico que comparaba el metal con la política, que Sabaton era como Ciutadans. Es decir, nada nuevo, lo mismo de siempre, pero con una capa de pintura que los hacía atractivos.
Bien, sin entrar a valorarlos políticamente, es innegable que si hablamos del heavy más tradicional (en cuanto a estilo), Sabaton se lleva la palma en cuanto a bandas más o menos nuevas. Además, la estética/temática bélica, la puesta en escena espectacular y una voz algo diferente a lo que se suele esperar del estilo, hacen que estén pegando con fuerza.
Por si fuera poco, vienen con dos acompañantes de lujo. Apocalyptica hará las delicias con sus instrumentos más tradicionales y Amaranthe deleitarán con sonidos modernos y un gran trío de cantantes.
Rage + Serenity + Savage Messiah
Miércoles, 12 de febrero de 2020 | Sala Boveda | Barcelona
Hace años, muchos años, quería montar un grupo con un amigo. Lo dije bien claro: «el estilo, el que hacían Rage, el de «Don’t Fear the Winter» o «Solitary Man»». Con esto, creo, está más que justificado que los alemanes estén en este top.
Siempre he considerado a los de Wagner, y al propio Peavy, una de las bandas más underrated de la escena europea. La capacidad de reinventarse y sobrevivir a mil cambios y estampidas de formación que tiene es tan brutal como su talento. Si, además, le sumamos el sonido más crudo que tienen últimamente (y que, escuchando los temas de adelanto de su próximo trabajo, parece que mantienen e, incluso, potencian), estoy más contento que unas castañuelas.
Esta vez vendrán acompañados de Serenity y Savage Messiah.
Mägo de Oz
Sábado, 7 de marzo de 2020 | Sala Razzmatazz | Barcelona
Debería haber ido a verles, en esta misma gira, hace unos meses en Tarragona, pero no pudo ser, así que esta vez asistiré. Si me llegan a decir, a principios de 2019, que estaría escribiendo esto, no me lo hubiese creído. Los daba por muertos (en cuanto a interés para mí), pero su concierto de 30 aniversario y el lanzamiento de su gran Ira Dei (2019), totalmente inesperado, despertaron de nuevo mi interés por la banda.
Además, las noticias que llegan de la gira no son nada malas. Según dicen tocarán todo el disco (que peca de lo habitual: ser doble y, por lo tanto, contar con demasiados temas de relleno), llevarán una gran parafernalia y hasta la mismísima Diva Satánica les acompañará. ¡Pues qué queréis que os diga, me llama mucho la atención este concierto!
Crashdïet
Martes, 21 de abril de 2020 | Sala Razzmatazz | Barcelona
Creo que Crashdïet no han explotado como podrían (o se intuía que podrían) haber hecho. Sin embargo, su Rust (2019) me parece uno de los mejores lanzamientos del estilo de 2019. Los cambios en su formación parecen haberles traído aire fresco e ideas buenas. Y como será la cosa que, si no se cambia, el concierto será en la sala Razzmatazz. No la 2, no otra, sino la típica Razz. Primera gran sorpresa, sobretodo si llenan (difícil, teniendo en cuenta que es un martes).
¿Qué espero? Un par de horas de diversión, de melodía, de travesuras y de buena música. Si se supieran los teloneros, la cosa ya sería la repera, pero de momento no tenemos esa información (a no ser que se confirme la internacionalización de Cruel Intentions y Highride).
H.E.A.T + Reach + Deaf Rat
Viernes, 15 de mayo de 2020 | Sala Razzmatazz 2 | Barcelona
Supongo que estarán mirando pisos por el Eixample, porque pasan más tiempo por aquí que su tierra. La primera vez que los vi fue en el RocFest 2018, y esta será la cuarta vez que los vea. ¡4 veces en menos de dos años! Pelín exagerado, pero es que ver a los suecos en directo es una experiencia que cualquier amante del estilo no puede perderse, especialmente por la energía de la bestia de Erik, uno de los mejores frontman que he visto en mi larga trayectoria de conciertos.
Quizá en disco no den lo mejor de sí, o al menos eso es lo me parece, pero en directo la cosa cambia completamente, llegando a unos niveles que, por el estéreo, no se adivina. Temas como «Beg beg beg», «Point of No Return» o alguna de las nuevas, como «One by One», bien merecen pagar la entrada y disfrutarlos.
Llevo en esto del heavy más de media vida. Helloween y Rhapsody dieron paso a Whitesnake y Eclipse, pero Kiske sigue siendo Dios.
Como no sólo de música vive el hombre, la literatura, Juego de Tronos y los tatuajes cierran el círculo.
Algunas personas dicen que soy el puto amo, pero habrá que preguntarles por qué.