Después de demasiado tiempo postergando esta decisión, desde la redacción de Science of Noise finalmente hemos decidido que ya era hora de que se nos recompensara por el arduo trabajo que le dedicamos a ésta, vuestra revista. Cada año superamos nuestro récord de visitas, lo que quiere decir que cada día tenemos más lectores que se aprovechan con todo el morro de nuestro sudor, talento y conocimientos sin igual del mundo metálico. Y hemos pensado que esto se tiene que acabar ya.
Por supuesto, lo primero que consideramos para capitalizar estos millones de visitas (qué digo millones, ¡billones!) fue adherirnos a las tendencias más modernas que ya hace años que han puesto en práctica nuestros principales competidores en el mercado español. Por ello, creamos un prototipo de nuevo diseño de la página con un total de 17 espacios para banners y anuncios de todo tipo (en este sentido, aún nos quedamos cortos al lado de otras revistas del sector), llenándola así de color, lucecitas y pop ups emergentes que estamos seguros que apreciaríais.
Pero cuando nos pusimos en contacto con nuestros potenciales anunciantes haciendo uso de los centenares de emails promocionales que hemos ido recibiendo estos años, descubrimos que casi todos ellos ya agotaban su presupuesto anual de 75 euros en publicidad en esos medios que mencionamos, sin duda más sabios y veteranos y quizás más relevantes que nosotros. Las únicas empresas que acabaron interesándose fueron aquellas enfocadas decididamente al público que suele leernos, pero tras una acalorada discusión consideramos que llenar la página de anuncios de sonotones y tratamientos contra la calvicie iba a jugar en contra de intentar perpetuar la ilusión colectiva de que los jebis aún somos cool a ojos del mundo.
Así que finalmente hemos decidido que actuaremos como la mayoría de empresas han hecho en este caso, que es repercutir el aumento de costes y la generación de beneficios directamente en vosotros, estimados y fieles lectores, ya que seguro que vuestros sueldos ya deben haber subido en similar proporción a la inflación que todos también sufrimos (¿verdad?). Por ello, si a partir del 1 de enero queréis disfrutar de contenidos tan exclusivos y de tanta relevancia existencial como, por ejemplo, nuestra necesaria opinión sobre el enésimo nuevo disco de Eclipse o el concierto número 81 que cubrimos de Crim, debéis apoquinarnos unas pesetas. Creo que 10 o 20 euros al mes estaría bien. O más, si os lo podéis permitir, claro.
La única excepción serán los artículos escritos por nuestro compañero Xavi Prat, que estos seguirán siendo gratis (o incluso estamos considerando pagaros por leerlos).
Pensándolo mejor, si conocéis a algún otro miembro de la revista no hace falta que le comentéis nada de todo esto, así que por favor proceded a suscribiros mediante una transferencia a:
Albert Vila
Cayman Islands National Bank – Número de cuenta: CNATKYKY 069432641723
¡Muchas gracias, amigos! El metal os necesita y os lo agradecerá.
Siempre me ha encantado escribir y siempre me ha encantado el rock, el metal y muchos más estilos. De hecho, me gustan tantos estilos y tantas bandas que he llegado a pensar que he perdido completamente el criterio, pero es que hay tanta buena música ahí fuera que es imposible no seguirse sorprendiendo día a día.
Tengo una verborrea incontenible y me gusta inventarme palabras. Si habéis llegado hasta aquí, seguro que ya os habéis dado cuenta.