En 2015, junto a un grupo de amigos, decidimos bajar a Villena para estar en la edición del Leyendas del Rock, empujados sobre todo por la letra pequeña y extrema del cartel: Satyricon, Sepultura, Death to All y Kataklysm. También sirvieron de excusa unos Blues Pills que, por aquél entonces, eran muy complicados de ver en directo en nuestro país, así como la presencia de los Big Teutonic Four.
Lo que está claro es que, cuando vas a un festival atraído por la letra pequeña, acabas por tragarte algún dinosaurio de esos a los que nunca irías a ver por voluntad propia. En mi caso, que no aguanto el metal nacional old school, sufrí con Warcry, Obús, Lujuria y Los Suaves. Aprovecho para comentar que soy un ferviente defensor del metal y el rock nacional, pero repito, el old school no lo aguanto… A ver, que si una banda se entrega y hace un buen espectáculo, soy el primero en valorarlo positivamente. Pero lo de Los Suaves fue realmente penoso. Y eso que, por cosas de la vida, los vi el año anterior en el Rock Fest de Barcelona, y aquella noche me pareció una banda de esas que dan incluso lástima, pero es que en Villena…
Los gallegos tocaban tras Kreator. Todos ya sabemos cómo son los directos de Petrozza y los suyos: rabia y destrucción a raudales. Pues tras el subidón, toparte de bruces con unos Suaves girando en la que sería la gira final de su carrera… Yosi es un tipo entrañable, pero hace décadas que su mejor versión está guardada en el fondo de un armario. Toda la recta final de su carrera era un mal chiste de lo que fue. El alcohol no ayudó y, pese a que a priori estaba limpio desde hacía ya tiempo, la sensación de demacrado era una constante. Su nivel de equilibrio sobre el escenario era preocupante. En cuanto a su verborrea, pocas cosas entendí de lo que cantaba y de lo que hablaba.
A nivel musical, pues no comparto gustos, pero la banda se entregó pese a que su frontman parecía un fantasma desaliñado. Lo más preocupante era ver como los fans, que por cierto son fieles y los hay a raudales, le permitían al viejo Yosi destrozar un legado tan grande como el de una banda tan mítica como Los Suaves.
Y por si fuera poco, tras una hora y 40 minutos de bochorno, y teniendo en cuenta que esta sería la última vez que actuarían en un festival tan afín a su propuesta, Yosi ni siquiera salió a despedirse del público. Si había alguna posibilidad de que Los Suaves le acabaran gustando a un servidor, allí perdieron todos mis respectos. Una banda vulgar con un cantante vulgar. Espero que solamente fuera una mala noche, pero desde entonces mi relación con Los Suaves es más crítica que antes de conocerles.
Setlist:
Cuando los sueños se van
Palabras para Julia
Maldita sea mi suerte
Por una vez en la vida
No puedo dejar el rock
Viajando al fin de la noche
¿Sabes? ¡Phil Lynott murió!
Mi casa
El afilador
Dolores se llamaba Lola
San Francisco Express
Ese día piensa en mí
Ya nos vamos
Dulce castigo
La noche se muere