Mayhem demuestran, una vez más, que siguen siendo los más grandes en lo suyo

De rotundo éxito podríamos calificar esta nueva visita de los legendarios Mayhem a la Ciudad Condal. Un más que apetitoso cartel que se completaba con la presencia de Gaahls WYRD, el excelente nuevo proyecto del ex frontman de Gorgoroth y God Seed, y los norteamericanos GosT, que daban el toque pintoresco a la velada. Poco faltó para que se llegase al sold out en la sala Salamandra, y, para cuando los encargados de abrir la velada se subieron al escenario, lo hicieron ya ante un público bastante abundante.

GosT

Tras GosT se esconde el productor y Dj James Lollar, que utiliza este nombre para dar rienda suelta a su peculiar amalgama de synthwave y metal extremo. Si bien suele actuar solo, en esta ocasión Lollar se hizo acompañar de un bajista, alternando el propio Lollar sus tareas de vocalista y sintetizadores. Con una puesta en escena muy sobria y oscura, GosT ofreció una intensa actuación, interpretando unos temas que, tan pronto incidían en pasajes totalmente electrónicos para a continuación entrar de lleno en territorios metalúrgicos con samplers guitarreros a todo tren, y la chirriante voz de Lollar en primer término. Su set caló entre la audiencia, la cual respondió en todo momento de manera bastante entusiasta.

Gaahls WYRD

Lo de Gaahls WYRD fue harina de otro costal. Con un soberbio primer trabajo bajo el brazo, Gastir – Ghosts Invited (2019), Gaahl y los suyos ofrecieron un recital sencillamente antológico. Desde los primeros compases del tema homónimo, que sirvió como apertura del show, la banda fue un torrente constante de actividad, dinamismo y buen hacer sobre el escenario. Gaahl comandaba el escenario, huyendo de cualquier atisbo de sobre-actuación, y manteniendo esa pose mesiánica tan característica, que en ningún momento parece forzada. El set combinó a la perfección temas de nuevo cuño como “From The Spear”, la monumental “Carving the Voices” o la venenosa “Through and Past and Past” con las piezas más destacadas de bandas anteriores como “Alt Liv”, de God Seed, y, cómo no, “Carving A Giant” o la tremenda “Exit – Through Carved Stones”, de Gorgoroth, que cerró el show por todo lo alto. Toda una demostración de fuerza que a punto estuvo de eclipsar la actuación de los protagonistas de la noche.

Mayhem

Mayhem son totalmente impredecibles en sus directos. Uno nunca sabe a ciencia cierta cómo pueden evolucionar sus shows. Para el recuerdo quedan actuaciones tan accidentadas como las de 2000 y 2004 en Barcelona; e incluso su anterior visita, como parte de la gira de aniversario de De Mysteriis Dom Sathanas (1994), supo a bastante poco. Pues bien, puede decirse que Mayhem supieron redimirse ante su público, ya que llevaron a cabo un muy completo show, que, todo hay que decirlo, fue de menos a más. El concierto estuvo dividido en tres partes. Un primer tramo que sirvió para presentar los temas de su reciente, y rotundo, Daemon (2019) y para dar un repaso a las etapas más recientes. Así, “Falsified and Hated” hizo los honores con un Attila Csihar reinando sobre el escenario con su fantasmagórica imagen y sus gestos característicos. “Malum” y “Bad Blood”, del nuevo álbum fueron ejecutados de manera apabullante, combinadas con piezas como “My Death” (único rescate de ‘Chimera’) o “Symbols Of Bloodswords”. Pero la noche no empezó a caldearse de verdad hasta que, ataviados con túnicas, la banda comenzó la segunda sección del set, dedicado íntegramente al eterno De Mysteriis Dom Sathanas. La sala se puso patas arriba cuando sonaron los primeros acordes de “Freezing Moon”. “Pagan Fears” y “Life Eternal” acabaron de poner las cosas en su sitio, con una banda funcionando a plena potencia. Los guitarristas Ghoul y Teloch no daban cuartel, mientras el viejo Necrobutcher dirigía miradas cómplices a la audiencia. Tras ellos, Hellhammer demostraba que sigue siendo el mejor batería que ha parido el black metal. La inesperada “Buried by Time and Dust” puso punto final a la “Suite Mysteriis”. Un nuevo, y algo tedioso, intermedio fue el preámbulo de una demencial parte final de concierto. Mayhem reaparecieron a cara descubierta (Necrobutcher sin camiseta), sin ningún tipo de efecto visual, para dar un revolcón a su repertorio más primigenio. Aquello se convirtió de repente en un tugurio noruego de principios de los noventa, mientras la banda atacaba piezas tan cafres como “Deathcrush” o una sanguinolenta “Chainsaw Gutsfuck” (probablemente el tema más salvaje de la discografía de Mayhem). Ahora sí, una audiencia enfervorecida se fundía en continuos circle pits de los cuales no fue fácil salir indemne. “Carnage” y “Pure Fucking Armaggedon” constituyeron una dupla letal que puso punto final al que, muy probablemente, ha sido el mejor show que Mayhem han ofrecido en esta ciudad. Todo un puñetazo encima de la mesa para demostrar que siguen siendo los mejores en lo suyo.

Setlist Mayhem:

Falsified and Hated
To Daimonion
My Death
Malum
Bad Blood
Symbols of Bloodswords
A Bloodsword and a Colder Sun, Part II
Invoke the Oath
Freezing Moon
Pagan Fears
Life Eternal
Buried by Time and Dust
Silvester Anfang
Deathcrush
Chainsaw Gutsfuck
Ancient Skin
Carnage
Pure Fucking Armageddon

Edu A. Crime