Melvins es una banda, originaria de Montesano, Washington, que fue fundada por Buzz Osborne (también conocido como King Buzzo) en la guitarra y Dale Crover en la batería, y ha sido una fuerza pionera en la escena musical underground durante más de tres décadas.
Sus inicios se caracterizaron por su sonido crudo y experimental, influenciado por el punk rock y el metal. A lo largo de los años 80, la banda comenzó a tocar en clubes locales y a desarrollar un pequeño pero leal séquito de seguidores. En 1986, Matt Lukin se unió como bajista, completando el lineup clásico de Melvins.
Melvins lanzó su álbum debut, Gluey Porch Treatments, en 1987, un trabajo que estableció su reputación en la escena underground gracias a su sonido pesado y abrasivo. Durante esta época, la banda también destacó por su actitud independiente y su rechazo a conformarse con las tendencias musicales convencionales.
A medida que la década de los 80 llegaba a su fin, Melvins continuó explorando nuevos territorios musicales. Lanzaron una serie de álbumes experimentales y colaboraron con otros músicos, como Jello Biafra de Dead Kennedys y Mike Patton de Faith No More. Estas colaboraciones demostraron la versatilidad de la banda y su voluntad de desafiar las expectativas del género.
Sin embargo, fue en 1993 cuando Melvins dio un paso significativo en su carrera al firmar un contrato con la discográfica Atlantic Records y lanzar el trabajo que hoy cumple 30 años. Este álbum marcó un punto de inflexión en la trayectoria de la banda al ofrecer un sonido más accesible y comercial sin perder su identidad distintiva. Con la inclusión de canciones como «Hooch» y «Honey Bucket», Houdini ganó reconocimiento a nivel nacional y se convirtió en uno de los trabajos más icónicos de la banda.
A lo largo de su carrera, Melvins ha seguido explorando nuevas direcciones musicales y colaborando con una variedad de artistas. Han lanzado numerosos álbumes y siguen siendo una fuerza influyente en la escena del rock alternativo y el metal experimental. La creatividad incesante y la resistencia a la comercialización han mantenido a Melvins como una de las bandas más respetadas y longevas del mundo del rock. Su legado perdura y sigue influyendo en generaciones posteriores de músicos y seguidores del género.
Veamos pues de qué ve este Houdini, el que fuera su trabajo más mainstream hasta la fecha. El álbum se abre con la poderosa «Hooch», una canción que establece de inmediato la intensidad característica de Melvins con su pesado riff de guitarra y la voz distintiva de Buzz Osborne, el líder de la banda. Esta canción es una declaración de intenciones que señala que aunque Houdini podría tener un sonido más comercial en comparación con los álbumes anteriores de Melvins, no ha perdido ni un ápice de su ferocidad. «Hooch» es, para mucha gente y para algunos de los medios más importantes del sector, uno de los temas más importantes de los 90.
Uno de los aspectos más destacados de Houdini es la inclusión de una versión electrizante de «Goin’ Blind» de Kiss. Melvins le da su propio toque distintivo a esta canción, añadiendo una capa de oscuridad y pesadez que la hace aún más impresionante que la original. Esta elección de cover es un testimonio de la influencia diversa que Melvins tenía en su música.
El álbum continúa con «Lizzy», una canción que muestra la capacidad de la banda para crear atmósferas inquietantes y opresivas a través de su música. La voz grave y ominosa de Osborne se complementa perfectamente con la batería poderosa de Crover y los riffs inquietantes de guitarra.
Houdini también presenta algunas de las canciones más experimentales y eclécticas de Melvins. «Set Me Straight» es un ejemplo de esto, con su ritmo irregular y sus cambios de tempo que mantienen al oyente en constante desconcierto. «Sky Pup» es otra pieza intrigante que combina sonidos extraños y disonantes con momentos de pura energía, creando una experiencia auditiva única.
El álbum toma un giro sorprendente con la inclusión de «Honey Bucket», una canción que se ha convertido en un clásico del repertorio de la banda. Con su riff pegajoso y su letra directa, «Honey Bucket» es un ejemplo de cómo la banda puede crear una canción adictiva sin sacrificar su sonido característico.
Sin embargo, uno de los aspectos más controvertidos de Houdini es la participación de Lori Black como bajista. Aunque salga acreditada como la bajista en el álbum, no es su bajo el que se escucha en el álbum; hay quien dice —y tomemos esta afirmación con 1.000 pinzas— que fue Kurt Cobain de Nirvana, un amigo cercano de Melvins, quien lo tocó en su lugar. Esta controversia ha generado debate entre los fans y ha arrojado sombras sobre la integridad del álbum, pero independientemente de quién haya tocado el bajo, el resultado final sigue siendo un testimonio de la habilidad musical de Melvins. Si nos fiamos de lo que dice la Wikipedia —tomemos otras 1.000 pinzas—, las pistas de bajo fueron interpretadas por Bill Bartell, guitarrista y miembro fundador de la banda de rock independiente White Flag y propietario de Gasatanka Records, y Billy Anderson, productor, ingeniero y músico que ha trabajado con bandas de la importancia de Neurosis, Swans, Sleep, Fantômas, Cattle Decapitation y Mr. Bungle, entre otras. Pero, para salir de dudas, mejor recurrir al propio Sr. Buzzo:
«Este álbum somos principalmente yo y Dale. Casi todas las pistas de bajo las grabamos entre él y yo, independientemente de lo que digan los créditos… Cobain lo ‘produjo’ hasta que le despedí por ser un coñazo en el estudio. En retrospectiva, no nos deberíamos haber molestado en contar con él pues todo terminó costándonos mucho más dinero.» (Buzz Osbourne)
Volviendo al disco, otro punto destacado de Houdini es la inquietante «Joan of Arc», que combina la narrativa sobre la mártir francesa con riffs de guitarra apocalípticos y una intensidad emocional abrumadora.
El álbum concluye con «Spread Eagle Beagle», una pista instrumental eminentemente percusiva que permite a la banda explorar sonidos más experimentales y abstractos antes de que la pesadez regrese en todo su esplendor en «Goin’ Blind (Demo Version)», una versión demo de la canción de Kiss que aparece al principio del álbum.
Todas las bandas tienen en su haber un trabajo que marca un antes y un después en su carrera discográfica, y en el caso de Melvins es este Houdini que hoy cumple 30 años de vida. Con su mezcla de melodía, potencia y experimentación, es un trabajo que merece un lugar destacado en la discografía de la banda y en la historia de la música alternativa. Si miras una lista de los mejores álbumes alternativos de la década de lo 90 y no aparece Houdini, envía un sicario a la casa del CEO de la revistucha/web de turno… y que parezca un accidente.
Tipo peculiar y entrañable criado a medio camino entre Seattle, Sunset Boulevard y las zonas más húmedas de Louisiana. Si coges un mapa, y si cuentas con ciertos conocimientos matemáticos, verás que el resultado es una zona indeterminada entre los estados de Wyoming, South Dakota y Nebraska. Una zona que, por cierto, no he visitado jamás en la vida. No soy nada de fiar y, aunque me gusta “casi todo lo rock/metal”, prefiero las Vans antes que las J’hayber.