Puede no gustarte el estilo gótico comercialoide de Mono Inc., pero juntamente con sus compatriotas Lord of the Lost están llevando el resurgir del gótico alemán hasta puntos jamás vistos. The Book of Fire salió a principios de 2020 y… agárrense: fue número 1 en las listas germanas. Una banda de heavy metal (con peros) vuelve a lo alto de las listas. No es sorpresa pues hace años que les sigo y sé que con la canción “Children of the Dark” ya lo tenían todo casi hecho. Es imposible que nadie no sucumba a esos encantos…
Este cuarteto de Hamburgo posee una personalidad desmedida y unos músicos perfectamente distinguibles y de mucho carisma. Pero es que también tienen canciones… Parecía complicado superar ese maravilloso Welcome to Hell de 2018, pero con The Book of Fire lo han conseguido sobradamente. Es una edición De luxe con un disco en directo y otro con las versiones del disco a piano, así que si no posees la edición original hay dos buenas razones más para hacerlo. Dignos sucesores de Lacrimosa y Crematory si bien ellos abrazaron el inglés desde su génesis.
La canción homónima es templada, con aires folk, esa batería de Katha Mia deudora del patrón de “Over the Hills and Far Away” del maestro Gary Moore. Añaden coros infantiles y cambios de tempos con mucha clase. Un single perfecto, pero como veremos, hay muchos en esta obra. Otra podría ser “Louder Than Hell”, más animada y ejemplo perfecto de cómo jugar al verso + puente + estribillo. Martin Engler es un cantante expresivo, con aspecto de Udo gótico, pero con una voz tremendamente diferente.
En “Warriors” ya nos topamos con la primera balada orquestada, dejando que piano y orquestaciones irrumpan, aunque con la guitarra de Carl Fornia marcando terreno y recordándote que estamos ante una banda que tiene el metal como base. Su versión del “Shining Light” de Lacrimosa es sencillamente estelar. Es una canción que siempre tengo en mente para el apartado de canciones perfectas, y no creo que tarde en hacer. Participa Tilo Wolff de los susodichos en el estribillo, y la verdad es que en inglés la cosa gana enteros. Es sencillamente preciosa.
El cuervo es símbolo para los germanos y “Where the Raven Flies” posee un groove muy bonito, además, incluyen varias paradas sorpresivas, lo que hace el tema muy original. El final es casi de caja de música. Ya en “The Last Crusade” entramos en una épica potenciada por los coros y varias orquestaciones. Realmente lo comercial es su razón de ser y tampoco se esconden, pero les funciona perfectamente. “Death of Life” es una especie de ejercicio de aires medievales y folk, con aires puramente orquestales repuntados en el estribillo.
En “Nemesis” hay palabras mayores por ser una de las grandes canciones del disco. Las acústicas de Carl Fornia marcan la canción a fuego, y más con esas campanas de fondo. Puede que sea la respuesta a “Dying in the Moon” de sus competidores y amigos Lord of the Lost. Preciosísima balada gótica con interludio de teclado. Se sirven de los folkies Tanzwut para el “Right for the Devil”, que podría venir de la mano de In Extremo o de Saltatio Mortis perfectamente, pero está claro con quién comparten sello.
Pero aquí va la cosa de singles potenciales y en “Run for Your Life tienes un inmejorable ejemplo de ello, con samplers de fondo y un gran estribillo en primera línea. No es de o mejor, pero ya tienes una primera impresión del cuadro: son muy buenos. También incluyen voces femeninas en la ecuación y Martin Engler te demuestra su calidad vocal sin hacer grandes esfuerzos.
“The Gods of Love” no termina de despegar pues es más de lo mismo en un disco muy logrado, pero para volver a elevar las armas está esa coda titulada “What Have We Done” en la que orquestaciones y excesos sinfónicos le dan la razón. Posiblemente sea lo más cercano a Nightwish que hayan hecho nunca. Destinada a dar un final y poco más.
Luego hay el disco en directo que va de más a menos y en el que el grupo termina titubeando en su clásico “Children of the Dark” con la que cierran. Martin no llega al feeling de la original, aunque el resto del disco es perfectamente disfrutable con sus más grandes canciones. Eso sí, siempre es bonito escuchar al público dándolo todo. No faltan a la cita temas como “Right for the Devil”, en la que aquí participan los Storm Seeker en el arsenal folkie. También de este trabajo hay “The Book of Fire” y “The Last Crusade”.
De sus primeros tiempos en los que cantaban en alemán y cantaba Mono incluyen el “An Klaren Tagen” con mucha participación del público. Es un buen directo, pero para nada el definitivo. Luego hay ese disco con las versiones del disco a piano que entran bien y que suenan relajadas y muy bellas. Bien como complemento, pero claro, escucharás siempre las del disco original.
Puede entender perfectamente que la gente vea en Mono Inc. algo puramente comercial, pero los números les dan la razón y las ventas lo apoyan. Podríamos discutir quién odias más, si Mono Inc. o Lord of the Lost, pero que dos bandas germanas hayan llevado el gótico alemán a la primera línea es algo inaudito en pleno 2022. Señores del festival Mera Luna, trofeo ganado por aclamación, creo que hay que darles la razón. La propuesta de Mono Inc. está destinada a seguir creciendo…