Nervosa – Jailbreak

La resiliencia de Nervosa, y especialmente, Prika Amaral como principal miembro, está a prueba de bomba. Los cambios de formación han sido constantes, con lo que comporta de adaptación de los nuevos miembros en todos sentidos. Cierto es que parece que la guitarrista brasileña tiene las ideas tan claras que no se mueve del camino que cree debe seguir a pesar de circunstancias y miembros. Con su anterior Perpetual Chaos de 2021 consiguieron 2,8 millones de escuchas en Spotify y sus primeras posiciones en diferentes charts (número 18 en Alemania, el 6 en la US Hard Music Albums y el número 9 en la US Top New Artist Albums), así como participar en festivales como Copenhell, Resurrection, Metal days, Summer Breeze o Wacken Open Air como colofón a un gran disco.

Jailbreak (2023) marca un nuevo capítulo en la historia de la banda con Prika Amaral de forma permanente ocupándose de las voces. Por si fuera poco, el grupo presenta una formación totalmente nueva con Helena Kotina como segunda guitarra, Hel Pyre al bajo y Michaela Naydenova a la batería. Nuevas miembros de jovencísima edad que sorprenden por su ya experiencia y, por supuesto, destreza con los instrumentos.

La banda ofrece un total de 13 temas que se abren con «Endless Ambition», un tema rápido desde el primer segundo con el toque justo de death metal pero con las raíces bien puestas en el thrash. Primer aviso, las voces de Prika son de alto octanaje. «Suffocare» es old school thrash metal con el doble bombo machacando sin piedad. Buscando la contundencia desde la intensidad y no la rapidez. Con «Ungrateful» nos encontramos una de las mejores, sino la mejor, piezas del disco. Agresión sonora total. Rápida, furiosa, anclada en un pasado punk y hardcore que Prika no disimula, pero no será la única… De las voces ya ni hablemos, no hace falta que busquen nunca más cantante.

El primer respiro viene con «Seed of Death» donde se muestra la parte más melódica de la banda aunque la unen perfectamente con una agresión controlada que se convierte en una especie de himno con guitarras dobladas. «Jailbreak» recoge el testigo de «Ungrateful» con riffs agresivos y el toque hardcore y punk con la tradición thrash. Tener dos guitarras permite el juego entre ellas y unas melodías dobladas con las que gana el grupo. «Sacrifice» sigue la estela con un poco más de protagonismo a la percusión para mostrar su poder. «Behind the Wall» muestra algunos de los riffs más notables antes que «Kill of Die» nos recuerda que de donde bebe y viene el grupo es el thrash. Los más veteranos disfrutaran con esos rasgados de púa con un pequeño interludio a lo clásico para el headbanging. «When the Truth Is a Lie» es la pieza más oscura y enigmática sin perder un ápice de agresividad thrash. Como no, contando como invitado ni más ni menos que con Gary Holt es lo mínimo. No descuidan la melodía en un tema corto e intenso. No es el único invitado ya que la vocalista de Infected Rain Lena participa también en el disco.

El cuarteto final de temas viene encabezado por «Superstition Failed» en donde Prika lleva su voz quizá al punto más extremo, «Gates to the Fall» mucho más diversa y cierto halo progresivo con bastantes cambios, «Elements of Sin» que recupera la crudeza y rapidez (por si en algún momento la pierde…) y la final «Nail the Coffin» que se mueve por derroteros mucho más en torno al heavy metal clásico, especialmente en el solo.

El tema lírico no varía mucho en su propuesta, reivindicación y mensajes de liberación de todos y de todo lo que no te impida hacer lo que quieres. Un mensaje hacia el oyente de estar orgulloso de lo que es que ya es un habitual repetitivo en demasiadas bandas. Sea como sea, las Nervosa de Prika Amaral, no nos engañemos, siguen pisando el acelerador.

Albert Perera

Live After Death tuvo la culpa de todo y tantos años después aquí seguimos. Si hay algo que me gusta más que escuchar música es hablar sobre ella y difundirla… y en ello estamos durante más de dos décadas.