Esta veterana agrupación griega siempre tiene cosas que decir. El mundo y la escena les han dado la razón a su estilo retro, pues se le ha dado la vuelta al marcador y ahora están de moda. Empezaron en 1989, así que supongo que es algo que ya les tocaba. Los tuvieron muy buen puestos al empezar en los días que el grunge llamaba a la puerta, y puede, que después de tanto tiempo, hayan alcanzado ya su momento. Riffs sabáticos, stoner de primera y excelentes composiciones. La escena griega de stoner es sublime y una de las mas potentes de la escena mundial. Las influencias de bandas como Monster Magnet o Kyuss están presentes, pero los helénicos consiguen añadirle a la mezcla bastantes ingredientes propios y tienen una legión de seguidores en todo el globo terráqueo.
Se inicia todo con la brillante y breve “Black Cloud” en la que las guitarras y bajo se funden para riffear en la más evidente tradición Sabbath. Destaca el juguetón bajo de Andreas Lagios y la voz de aires Ozzy que gasta Argy. Todo muy compacto, con un groove lúcido y sumamente atractivo. Giro de guion en la templada “Sweet Knife”, mucho más atmosférica y con Argy cantando de inicio con voces limpias. En definitiva, retro rock de altísimo voltaje que puede recordarte a Graveyard cuando atacan sus superlativas baladas. El acelerón final le sienta de maravilla a la composición. Hay mucho sentimiento en composiciones de la talla de “Sad Side of The City” pues se nota que hay excedente de ideas consiguiendo que todos los temas sean suficientemente dispares entre ellos. Aquí estaríamos, quizá, ante el corte más accesible y melódico del compacto.
Los dejes más profundos y sabbathescos quedan plasmados en “Seven Out of Ten”. Gran trabajo de densidad en la guitarra de Tolis Motsios pero es sobre todo la base rítmica ben combinada del bajo de Andreas Lagios y los timbales de Dinos Roulos lo que hacen que el grupo camine en buena senda. La divertida “Cursed” podría ser perfectamente el single por su accesibilidad manifiesta y ese encanto que viene de cuna. En “Half Crazy” se adentran en la vereda de Corrosion of Conformity y vuelven a salir airosos. De verdad que el trabajo de Argy es encomiable. “Hole in the Mirror” te sume en tristeza mostrando otra cara del grupo que se mantiene en el inicio de la extensa y final “Great Hallucinations”. El título un poco alude a sus inicios más psicodélicos y el tema va creciendo desde lo pausado con voces muy Ozzy. Final con protagonismo instrumental y excursión lisérgica.
Pocos discos del estilo me han atrapado tan inmediatamente como Great Hallucinantions. Nightstalker se desmarca como una abrumadora realidad capaz de plasmar toda su calidad en un disco que se hace corto y que entra desde la primera vez que lo disparas. Si te va el estilo es de obligada escucha. Es un todo dinámico y puramente analógico con un grupo que funciona de forma orgánica y es capaz de acelerarse, ralentizarse y jugar con las intensidades con pura maestría. A pesar de que Argy es leyenda viva en Grecia aquí pecamos todavía de desconocimiento hacia su trabajo. Con este disco es planteable una gira europea apoyando a una formación más asentada.