Niña Polaca es una banda alicantina/madrileña formada cuando Álvaro Surma y Alberto «Beto» Rojo se conocieron siendo vecinos del mismo edificio en Malasaña, Madrid. Tras poner en firme ideas musicales e incorporar al también compositor y futuro batería de la banda, Kobe, el aún “grupo de amigos” emprendió un roadtrip por Polonia. Allí nació el nombre de la banda.
Cinco años han pasado desde ese momento, con algún que otro cambio de formación y con dos grandes discos en su legado, Niña Polaca llega a este fin de curso con un nuevo disco bajo el brazo. Que adoren tu nombre (2023), trabajo del que habíamos podido ya escuchar hasta siete adelantos, es justamente lo que la banda necesitaba, un disco para asumir que ha llegado ya su momento.
Pues Que adoren tu nombre es fácilmente el mejor álbum de la banda. El disco con el que deberían dar el salto a la liga mayor. Calidad y genio no le falta. 14 canciones en 40 minutos de rock, del independiente, de pop con ganchos. De letras afiladas y algunas, incluso hipnóticas. El tercer disco normalmente es el que permite a las bandas explorar, y aquí han incorporado un elemento nuevo con el que jugar: el teclado. La incorporación de Claudia Zuazo ha dotado a la banda de un plus en sus melodías tanto a nivel de teclados como de sintetizadores.
Todo arranca con “Travieso”, una canción que rápidamente se mete en tu cabeza y no dejas de cantar. Una de las canciones más directas que la banda ha compuesto nunca. Seguimos con la genial y alegre “Lo que yo te he querido (pretérito perfecto)” cuenta con los citados arreglos de sintetizadores y los coros en los que Claudia también pone voz. Mientras y en contraste, “Dolores Rayo” muestra un estilo más maduro e introspectivo.
En “Te vi en el concierto” siguen con la calidez mostrada en el anterior corte y ademas cuenta con unos arreglos de teclado fantásticos, hecho que demuestra una vez más el gran acierto de la banda de contar con este nuevo instrumento. Por cierto, brillantes las letras de esta canción.
Y entonces llegamos a la que puedo considerar la mejor canción que la banda ha compuesto nunca: “Los días malos”. El nuevo himno, con teclados, con estribillo superior a la media, con unas letras de las que tocan el corazón. Musicalmente intensa y, suerte para nosotros, la más larga del disco. Genial.
Tras un arranque tan intenso uno ya ha visto que Niña Polaca van muy en serio con este disco. Uno puede imaginarse estos nuevos himnos en una sala grande con el público entregado. Lo han hecho, han consolidado y mejorado su propuesta. A partir de ese momento, todo el disco va creciendo, va deslizándose felizmente por tu reproductor. Encontramos piezas divertidas como “Mucho tiempo contigo” u otras pegadizas como la medio folclórica “Caballo” (sí, a uno le recuerda a una jota maña). Delicadas como “Mejor sin ti” o de esencia más punkarra como en “Alfredo el canallita”.
Que adoren tu nombre se coloca fácilmente entre los mejores discos nacionales de 2023 y nos presenta a la próxima banda que romperá las salas y festivales de verano en 2024: Niña Polaca. Un disco genial, maduro, inteligente y muy divertido. Tal y como nos aconseja el nombre del disco, tendremos que adorar este nombre.