Noah Histeria lanza el videoclip de «43 Días Pt. I», tema incluido en su fastuoso y soberbio segundo trabajo Hautefaye (2017), disco conceptual que gira en torno a Hautefaye, pequeña aldea de la Aquitania francesa donde en 1870 tuvo lugar un caso de histeria colectiva. A partir de este suceso, la historia juega con las dualidades masa/individuo, máquina/hombre, tecnología/naturaleza y con la lucha por el sometimiento de uno sobre el otro.
En palabras de la propia banda:
Llevábamos un año sin sacar material nuevo, esperando a tener la gira montada para lanzarlo como pistoletazo de salida. Dimos conciertos el año pasado, recalando en el ProgCulture Fest, en la presentación de Dry River, el Tótum Revolútum y, de guinda, el Resurrection Fest. Pero teníamos ganas de salir a hacer carretera y manta por nuestra cuenta y riesgo, autoproduciendo nosotros mismos los conciertos, eligiendo las ciudades, las salas y, lo más importante, las bandas. Estas cosas llevan su tiempo, cuadrar agendas a veces se antoja como una alineación de planetas. Pero ya está ahí, saldrán más conciertos, son muchas las ciudades que hemos tenido que dejar, pero todo no se puede.
Decidimos grabar «43 Días Pt. I» porque… bueno, hace ya un tiempo de eso, y la verdad es que podía haber sido cualquiera. Digamos que en «43 Días Pt. I» el equilibrio en Hautefaye empieza a tambalearse, empiezan a oírse esos cantos de sirena de los que tanto echamos mano. Es un tema que no se entiende sin su segunda parte, pero que introduce varios elementos que queríamos que aparecieran en el disco: la coral abriendo el espectro sonoro, un breakdown a la antigua usanza y un solo de «sinte». En Noah cabe de todo siempre que digamos algo con ello; nunca exhibir por exhibir, o al menos así lo vemos nosotros.
El videoclip ha sido producido por Carlos Part. El disco puede adquirirse a través de su web oficial.
Tipo peculiar y entrañable criado a medio camino entre Seattle, Sunset Boulevard y las zonas más húmedas de Louisiana. Si coges un mapa, y si cuentas con ciertos conocimientos matemáticos, verás que el resultado es una zona indeterminada entre los estados de Wyoming, South Dakota y Nebraska. Una zona que, por cierto, no he visitado jamás en la vida. No soy nada de fiar y, aunque me gusta “casi todo lo rock/metal”, prefiero las Vans antes que las J’hayber.
