Obituary – Dying of Everything

Hablar de Obituary sin ponerse un esmoquin debería estar penado con una nada exigua sanción pecuniaria. Nadie se atreverá a negar que la banda de los hermanos Tardy, con sus más y sus menos, son uno de los puntales del death metal norteamericano.

Para este Dying of Everything, la banda se ha tomado las cosas con más calma. Sí, es el sexto disco grabado en los RedNeck Studios de Gibsonton (Florida), donde es la propia banda la que se encarga de la grabación y la producción de sus trabajos desde Xecutioner’s Return (2007) tal como nos comentaba en la entrevista que publicamos con Trevor Peres en motivo de la salida del disco. Tampoco sorprenderá a nadie el estilo ni la sonoridad de este Dying of Everything. A estas alturas del partido poco van a innovar. Lo que sí que es digno de remarcar son los seis años que han pasado desde aquel homónimo Obituary (2017) que tan buenas críticas cosechó y que contribuyó notablemente a confirmar la línea ascendente de estos dinosaurios del metal extremo en la última década. Entremos en materia.

Este nuevo trabajo de los de Florida nace a partir de las experiencias vividas durante los dos años de la pandemia que cambió la realidad de todo el planeta. Su título, un acertado Dying of Everything describe a la perfección el momento de la historia del que nos tocó ser testigos y/o protagonistas. Los diez temas de los que está compuesto tienen una duración media de algo menos de cinco minutos para completar un metraje total de casi tres cuartos de hora, algo que entra dentro de la normalidad de los discos que se publican en la actualidad. Finalmente, su portada, obra del recientemente desaparecido Mariusz Lewandowski nos muestra una suerte de escena de autodestrucción de un mundo en llamas a la luz de la luna llena.

Dying of Everything comienza de forma directa, sin paños calientes, con un trallazo que va más allá de la hipervelocidad y lleva por título “Barely Alive”. Tras ella, la tónica general del disco se halla en una mayoría de temas que cabalgan entre el death metal clásico de la banda acoplado con bastante acierto a los riffs y a los ritmos del groove metal. Buena muestra de ello podrían ser temas tales como “Without a Conscience” y el notabilísimo trabajo de los señores Peres y Andrews. No obstante, también coexistent en este ecosistema musical temas más rápidos como “Weaponize the Hate” y con dos cortes, los dos últimos del trabajo, más tendentes hacia el thrash (“Torn Apart”) y hacia el doom metal (“Be Warned”). En cuanto a los temas tratados, estos van desde el absoluto pesimismo de “The Wrong Time” hasta el positivismo de “My Will to Live”, pasando por el pacifismo de “War”.

Este nuevo trabajo de los Tardy y compañía nos trae un puñado de temas de metal extremo crudo y desgarrador, de guitarras crujientes y con los característicos growls de un John Tardy que se permite el lujo de enriquecer el sonido de Obituary con nuevos registros y mejores matices vocales. En definitiva, Dying of Everything mantiene la línea ascendente de los últimos años pese a que en algún momento los temas pueden llegar a sonar, por los ritmos y por la tipología de sus riffs, un tanto repetitivos.

Franz S. Heiligen

Soñador en tiempos de hierro, solitario corredor de larga distancia, disfruto tanto de leer un libro en el más absoluto silencio como de la música más salvaje imaginable. Y a veces escribo algo.