No tuve el gusto de conocer a Oceandvst hasta hace unas semanas, pero desde entonces he perdido la cuenta de las veces que he escuchado tanto su EP Escape Rovte, publicado en el 2017, como su recién estrenado Floating. Y es que la banda, natural de Grecia, me ha resultado desde la primera escucha inexplicablemente magnética, con su forma de coger características de diferentes géneros y fusionarlas a su manera. Y mientras sigo dándoles vueltas para ver si soy capaz de desentrañar el misterio de mi atracción por ellos, vuelvo a darle al play a este Floating buscando esa pieza mágica.
El pistoletazo de salida corre a cuenta de “The Risk”, donde se percibe desde el primer compás toda la esencia del trío, esa macedonia de influencias que les hace sonar de forma tan personal y a la vez trayéndonos a la memoria grandes y variadas bandas.
Con “After All These Years” los griegos se adentran en los terrenos del skate punk más canónico. Dando al género, como no podía ser de otra manera, un punto de vista totalmente subjetivo, el resultado es un tema ligero y fresco cargado de detalles melódicos que lo adornan en todo momento.
Con un contraste de envolvente calma en las voces y apremio en la batería entra “Grey Is the Hardest Color to Live With”, en la que la banda vuelve a acercarse a sus raíces, en las que asomaban, sin llegar nunca a hacerse demasiado evidentes, las influencias de grupos más oscuros y alternativos; influencias también innegables en “Every Word You Say”, a la que vuelven a engalanar con cierta faceta punk, ofreciendo otra vez un tema que suena a otros y a nadie.
“All Yours” saca a relucir la faceta más pop de Oceandvst, con melodías amables y una cadencia en la guitarra que nos acompaña durante todo el corte, que podría caer en lo meloso si no fuera por la peculiar forma del trío a la hora de encararlo.
No se alejan de esa sosegada línea en la acústica “Minor”, donde es la voz de Chrysa la principal encargada de mantenernos bien atentos, consiguiéndolo sobradamente gracias a su indiscutible carisma.
Se reconducen hacia su carácter más representativo con “Surface”, que paso a paso va cargándose de vehemencia hasta que la velocidad vuelve a presentarse en primera línea gracias a la festiva “The Lies Will Give You What You Need”, otro chute de punk desenfadado observado bajo su inimitable prisma.
Entre lo alternativo y lo melódico anda “Again”, cuya aparente sencillez acaba revelando un tema pegadizo y bien cuidado, que se encarga de dar paso a “Great Escape”, que cierra el disco con un sabor a trabajado pop rock parsimonioso pero cargado de energía que acaba perdiendo su primer nombre a medida que avanza el corte, culminando el álbum con la traca final que se merece.
Y aunque una vez más, no consigo explicar qué es exactamente lo que me hace disfrutar tanto de estos helenos, acaba el disco y vuelvo a quedarme con un estupendo sabor de boca. Estoy a punto de darme por vencido y simplemente dejarme llevar sin buscar un por qué . Total, tampoco hay que racionalizarlo todo.