Los alemanes Orden Ogan nos traen su nuevo trabajo desde el Far West. Gunmen (2017) es un magnífico trabajo de power metal con tintes folks. Desde el primer tema, «Gunman», y durante los 10 que componen el álbum, esa mezcla entre Blind Guardian, Rage y alguno más te atrapa y no te suelta. Todo parece estar muy bien pensado en este disco: las melodías, los estribillos, los puentes… toda la estructura de las canciones y su ejecución es para tenerlo muy en cuenta.
Originarios de Alemania y formados en 1996, Orden Ogan nos regalan un must have para los fans de Blind Guardian o Falconer. Pero volvamos a la música, que es lo que nos corresponde, porque por muchas similitudes con otras bandas que tenga, el disco debe valerse por si mismo. Y Gunmen se vale. Aunque es aparentemente “simple” (power metal sin más, pero tampoco con menos), una escucha más detallada ofrece matices que hacen que esta obra sea especial. Los teclados se entremezclan con las guitarras ofreciendo melodías y composiciones dignas de disfrutar. Si además te gusta el Far West, ya cierras el círculo.
La grandilocuencia de los teclados que abren el primer tema, «Gunman», te atrapan durante todo el disco y hacen que este corte sea perfecto para empezar el álbum. «Fields of Sorrow» lo petará en directo, uno de los mejores cortes del disco. «Forlorn and Forsaken» tiene ese regusto agudo en el estribillo a Blind Guardian que decíamos antes.
«Vampire in Ghost Town» hará las delicias de los amantes del folk mientras que «Come With Me to the Other Side» gustará a los más tranquilos… o eso parece con la intro, aunque luego el acelerón que da es tan grande como inesperado. En este tema les ayuda Liv Kristine de Theater of Tragedy. Los grillos iniciales de «The Face of Silence» no son indicativos de sueño. En este Gunmen apenas hay tiempo para darse un respiro.
«Ashen Rain» rompe la pana como medio tiempo grandilocuente y con un riff de guitarra más que interesante. «Down Here» es, quizá, el tema que menos me ha llamado la atención. Sin ser una mala canción, tengo la impresión de haberla escuchado anteriormente. «One Last Chance», en cambio, recupera la fuerza con contundencia y una batería interesante. El álbum cierra con «Finis Coronat Opus», más de ocho minutos de deliciosa y variada melodía, ritmos, estribillos y estructuras. Sin duda, otro de los puntos álgidos de Gunmen.
En definitiva, los teutones demuestran una y otra vez que están en su cima artística. No hay una sola canción fuera de lugar. Si lo tuyo es el power más cañero, el nuevo trabajo de Orden Ogan te hará pasar un gran rato escuchándolo.
Llevo en esto del heavy más de media vida. Helloween y Rhapsody dieron paso a Whitesnake y Eclipse, pero Kiske sigue siendo Dios.
Como no sólo de música vive el hombre, la literatura, Juego de Tronos y los tatuajes cierran el círculo.
Algunas personas dicen que soy el puto amo, pero habrá que preguntarles por qué.