Paralyzed – Paralyzed

Desde una pequeña ciudad alemana nos llegan con su segundo álbum Paralyzed, joven banda dispuesta a hacer las delicias de los amantes del hard rock de los setenta, siendo capaces de capturar en sus temas toda la energía de la época como si no hubiese pasado el tiempo desde entonces.

A modo de intro sirve un tema homónimo tanto del disco como de la banda, oscuro, pesado y con unos aires casi teatrales, que da paso “Lucifer’s Road (My Baby and Me)”, sin ninguna intención de disimular el sonido que buscan, ofreciéndose sin tapujos a los nostálgicos del rock y la psicodelia más duros de antaño.

Tétricamemte potente se nos presenta “Prophets”, que gana velocidad según avanza, siendo rematada con los guitarrazos de Caterina marcándonos un ritmo imposible de ignorar antes de volver a sumirse en una cadencia de gris stoner.

No pierden su protagonismo las guitarras en “Noise on the River”, innegablemente marcada por la corriente británica más clásica, en la que banda demuestra su capacidad de generar ritmos trepidantemente electrizantes sin tener que pisar demasiado el acelerador.

“Golden Days” se adereza con un acompañamiento de órgano que sirve de colchón en el que descansa la contundencia del resto de la formación, trayéndonos a la mente, sin remedio, nombres inolvidables como John Paul Jones o Jon Lord.

La cosa se pone algo más áspera en “Lowlands”, con los cuatro miembros perfectamente congeniados, dando como resultado un tema tan sencillo como bien ejecutado, que da paso a “Green Eyes”, de melodías pegadizas que hacen absurdo el intento de no dejarse llevar por ellas.

Nuevamente se relajan los ánimos en “This Lady”, donde se dan la mano el stoner rock y el blues más sucio, hasta la recta final de la canción, donde otra vez serán las guitarras las que animen al baile.

El punto más calmado del álbum lo encontramos en “Mother’s Only Son”, rabiosamente desesperanzada, llegando a sonar a bandas de los géneros más oscuros del rock.

Como despedida nos ofrecen “Parallel”, con una distendida introducción que acaba derivando en la que puede ser la canción más personal del disco, elegante y tajante a la par, sin desviarse ni por un momento de la ruta que el grupo tenía marcada desde el momento de su nacimiento.

Así que si lo que te sigue erizando el vello son aquellos vinilos que marcaron un camino y nunca envejecen, en Paralyzed tienes un claro ejemplo de que a día de hoy pueden seguir surgiendo bandas de calidad encargadas de que la esencia de aquellos años no desaparezca.

Puti Allin

Melómano empedernido desde la más tierna infancia (lo de tierna es un decir). Todo lo demás que haya que contar, lo contaré sin problema en presencia de mi camarero.