Pixies en Barcelona, el valor de una apuesta siempre segura

Ya es una constante en nuestras vidas esto de que nuevo disco de Pixies = cita en Sant Jordi Club. Tras tres pasos por Primavera Sound, la banda de Boston ha encadenado tres giras acudiendo a la incómoda hermana menor del Palau Sant Jordi. Tuve la surte de verles en la gira de Head Carrier en 2016, también pude ver y disfruté como nunca en su cita en el pasado Mad Cool 2022. Y no podía perderme esta nueva cita de presentación de Doggerel (2022), su último y muy acertado disco.

Con el cartel de sold out ya hacía muchas semanas, me preparaba psicológicamente para no caer en el agobio que supone el Sant Jordi Club cuando está lleno hasta la bandera. Ruido, incomodidad, calor… una mala elección de su posición puede representar escuchar mal todo el show… Con lo que subir a Montjuic a primera hora tendría que ser un acierto. Además, Wunderhorse abría la noche un rato antes.

Poco puedo decir de este artista, pues no lo tenía aún fichado. El alter ego del artista británico Jacob Slater, ofrece una mezcla de post punk / cantautor original. O al menos a simple vista fue mi opinión sin indagar previamente en su propuesta. Su debut titulado Cub se publicó en octubre de 2022.

Puntuales a las 20:00 entraban en el escenario. Con una austera decoración y una puesta en escena sobria, los jóvenes británicos en formato cuarteto, anchos y ocupando todo el ancho del escenario, presentaban su propuesta de una forma atractiva. Apoyándose sobre todo en la cálida y cercana voz de Jacob, la banda se proponía hacer olvidar, al menos por un breve instante, que todos subimos al Sant Jordi Club para ver a Pixies.

Con un sonido realmente bueno considerando la habitual mala acústica de la sala, el cuarteto fue in crescendo al igual que el aforo de la sala. Con esa mezcla indie y americana, la banda de Slater demostró en todo momento que su presencia abriendo la noche no fue una casualidad, pues realmente sus 30 minutos fueron ligeros y quedaron cortos. Impecable su actuación que dio paso a una espera de “preparación” de 30 minutos. Una “preparación” curiosa, pues poco hay que preparar para un concierto de Pixies.

Puntuales como un reloj suizo entraba el cuarteto de Boston sobre el escenario. Evidentemente sin saludar, con Black Francis en el centro, Paz Lenchantin con la derecha, Joey Santiago en la izquierda y en segunda linea un activo David Lovering armado con su gorra y su deshilachada camiseta. Daba arranque el espectáculo con “Cecilia Ann”, una versión de The Surftones, con problemas en el micro, solucionados ya para el arranque del repertorio original con “Brick Is Red”.

Qué contar de un concierto de Pixies que nadie sepa a estas alturas. Pues que Pixies vienen a tocar, a rockear, sin florituras, sin monólogos. Nuna he oído la voz de Black Francis más allá de su canto. No se presentan, no hablan, pero nos da igual, pues no paran casi ni para afinar las guitarras. Para el gusto de los asistentes, el concierto fue épico, con dos horas justas de actuación, con 37 canciones, sí, 37. Entre las que no faltaron TODOS sus clásicos, que no son pocos.

Tampoco es de extrañar la diferencia de acogida de las canciones del repertorio. Pues las canciones de Doolittle, Surfer Rosa y Come On Pilgrim fueron las claras triunfadoras de una noche marcada también por la puesta en vivo de su flamante nuevo disco Doggerel (2022) del que interpretaron hasta ocho canciones. Tengo que admitir que es un disco que me encanta y ver las canciones en directo dan un plus de personalidad al disco.

“Caribou”, “Isla de Encanta” con ese acento spanglish, “Here Comes your Man”, “Hey” y “Monkey Gone To Heaven” fueron aclamadas como ningunas, pero la recta final con “Debaser”, “All the Saints” y “Where Is My Mind?” sirvió como broche de oro a 2 horas de puro orgasmo de rock alternativo. Para endulzar la noche y tras comprobar que aún disponían de unos minutos, nos regalaron “Winterlong”, una versión de Neil Young.

Magistrales como siempre, unos saludos con las manos para despedirse de una abarrotada sala, y jolgorio entre los más de 4000 fieles reunidos en Montjuic. Ganas de más con la sensación de que esta banda es tan incombustible como imprescindible.

Setlist Pixies

Beto Lagarda

Rock en todas sus extensiones