Lo que pasa en Suecia siempre me ha parecido impresionante, un país con una cultura musical excepcional, un hervidero de buenas bandas de pop, rock, metal… Desde hace ya algunos años el revival del hard rock de corte más clásico y melódico está a la orden del día, han sabido renovarlo con un exquisito gusto y cada vez van saliendo más y más bandas interesantes que engrosan una atractiva escena.
Una de ellas son Reach, que provienen de Estocolmo, banda relativamente “nueva” que a base de pico y pala y mucho escenario han ido pegando fuerte desde hace un par de años en el país escandinavo. The Promise of a Life es el nuevo trabajo de los suecos y el que, a priori, les tendría que dar un mayor reconocimiento fuera de sus fronteras gracias a una mejor promoción. En su primer lanzamiento, Reach Out the Rock (2015), la banda aun mostraba esa inmadurez característica de un debut, además aún no habían pasado a ser un trío y ni Ludvig Turner se encargaba de las voces ni Soufian Ma’Aoi era el bajista. En ese disco aun mostraban unas influencias del hard rock más melódico, algo de sleazy angelino y pinceladas de AOR, que a día de hoy han desaparecido por completo. Ya rearmados como trío y con Turner en el papel de vocalista y guitarra editaron en 2018 su segundo larga duración de nombre The Great Divine, producido por Jona Tee, teclista de H.E.A.T Si ya en ese segundo trabajo se apreciaba un sonido más profesional y personal, lo que nos vamos a encontrar en este nuevo disco es otro paso más de la evolución de la banda.
De excelente art-work (gracias a la entrevista que nos brindaron pudimos saber que es de un tal Vangelis Petikas) y producido nuevamente por Jona Tee, este nuevo lanzamiento nos presenta a unos Reach más poperos y alternativos, más pomposos e incluso más experimentales y sinfónicos.
Solo con los primeros compases del tema que abre el disco, “New Frontier”, ya aprecias ese nuevo sonido. Como su título indica, parece una pieza perfecta para dar pistoletazo a una nueva etapa de la banda.
“Standing at a new frontier
Show no sign of fear
Welcome to the new frontier
Me against the world.”
De estribillo cinematográfico, “New Frontier” es épica y sinfónica; Turner juega vocalmente con unos falsetes que le dan ese toque de pomposidad del que he hablado antes. ¿Hola, Muse? La misma fórmula es usada para “Satellite”, uno de los temas que más me han gustado. Más guitarrera que la anteriormente citada y tirando de un hard rock modernete vuelven a conseguir un corte con un estribillo pegadizo que, al igual que “New Frontier” puede funcionar muy bien en directo. En ese contexto más rockero podríamos también meter a la cañera “The Streets”.
Por otro lado tenemos algunos temas que suenan más experimentales, rimbombantes y barrocos, con una orquestación por momentos muy cabaretera y teatral. “Motherland” nos podría servir como claro ejemplo. En estos cortes es donde más se nota el buen hacer de Jona Tee con la producción del disco, sinfónica, muy nítida y cristalina, además la voz de Turner suena genial
En el apartado más comercial del disco, el que hará rasgarse las vestiduras a más de uno y más de dos, nos topamos con sonidos más propios de innombrables emisoras de radio que nunca hemos querido ver ni en pintura en la búsqueda del dial, y no, no me refiero a la Cope. Las melosas y poperas “The Law”, “Young Again” o “Cover My Traces” nos alejan totalmente de los Reach más rockeros. “Cover My Traces” incluso no desentonaría para nada en cualquier disco de Twenty One Pilots por su tratamiento vocal y su sampleado.
No sé si el cambio de sello al ecléctico y poco rockero Icons Creations Evil Art y esa nueva sonoridad e imagen más pop pueden dejar un poco en tierra de nadie a Reach, me explico: Hasta ahora, por ciertas circunstancias, Reach, aunque poco conocidos, era un nombre indiscutiblemente asociado al actual hard rock melódico, pero cuando uno termina de escuchar este disco e intenta analizar lo escuchado le vienen a la cabeza nombres como Panic! At the Disco, Muse, The Killers e incluso Imagine Dragons, y no estoy seguro de que a quien consuma este tipo de bandas pueda acceder fácilmente a la música de Reach. Una cosa sí que es clara: el que no arriesga no gana. Si todo va bien, en octubre de este mismo año los podremos ver teloneando a H.E.A.T, y ahí veremos ver cómo ha ido funcionando el disco y, seguramente, disfrutar de la energía y el buen rollo que parece transmitir esta banda en directo.
Pota Blava y fanzinero de los 90. La música siempre ha sido una de mis grandes pasiones, y aunque el Metal es mi principal referencia, no he parado de moverme por diferentes estilos sin encerrarme a nada. Con los años el escribir también se convirtió en otra pasión, así que si junto las dos me sale la receta perfecta para mi droga personal. Estoy aquí para aportar humildemente algo de mi locura musical, y si además me lo puedo pasar bien…pues de puta madre.