Sepultura – Against: 20º Aniversario del nacimiento de la v2.0 de los brasileños y de eso de «si no está Max, no son Sepultura»

Apenas unas horas antes de subir al escenario del Monsters of Rock de Inglaterra de 1996, la banda se enteró de que el hijo adolescente de la manager (y la esposa de Max Cavalera) Gloria había muerto en un accidente de tráfico. Aún así, unos todavía perplejos Sepultura, subieron al escenario como trío, mientras que Max y Gloria tomaban el primer avión de regreso a América. Pocos meses más tarde, la banda se enfrentó a Max para cesar su relación contractual con Gloria y para encontrar un nuevo manager. Aún recuperándose del reciente trauma que supuso aquella muerte, Max se lo tomó como algo personal, como una gran traición, y dejó la banda de muy malas maneras. Como líder creativo de Sepultura, muchos esperaban que su partida fuera el final de la banda, pero la banda anunció que continuaría y pronto comenzó a buscar un nuevo vocalista.

Después de una larga búsqueda, Sepultura reclutó al norteamericano Derrick Green y comenzaron a crear las pistas de lo que sería Against (1998). El corpulento nuevo vocalista previamente había militado en Outface, banda de hardcore punk formada en el área de Cleveland, Ohio, a mediados de la década de los 80, en la que también militaron el bajista Frank Cavanagh (Filter) y el guitarrista Charlie Garriga (CIV).

Aunque Against conservó gran parte de la intensidad y la diversidad de su predecesor (incluida la colaboración del conjunto japonés de percusión Kodo en la canción «Kamaitachi»), el álbum carecía de la chispa única que había caracterizado a Roots (1996). Además, vendió solo la mitad de las copias que vendió el primer álbum de Cavalera con su nueva banda, Soulfly, mostrando claramente con quién se mantuvo la lealtad de la gente. Max dejó la banda y se llevó consigo a tres cuartas partes de los fans.

Este álbum ha recibido una cantidad indebida (quizá exagerada) de malas críticas e ira por parte de la comunidad metalera, por parte de los trves. Parece que, junto con Roots, tienden a ser el foco de todas las críticas y pataletas de la peña… pero demos una pequeña lección de historia sobre cómo Sepultura se sobrepuso a tanta crítica y mierda vertida sobre ellos.

Lo que tenemos aquí es un álbum que nace de la ira y de la frustración. Los fans comenzaron a dejara de lado a Sepultura, y comenzaron a abrazar a Soufly, mientras que Max aprovechaba cualquier oportunidad para echar pestes sobre sus antiguos compañeros de banda. Soulfly tenía partes de canciones que estaban dirigidas directamente a Sepultura, por los ex de Max decidieron responder, pero en una dirección diferente. Una que habían explorado ya con Chaos A.D. (1993), groove meet hardcore, con resultados sorprendentes.

Against se abre con la pista que le da título, comenzando con unos sonidos ambientales antes de que irrumpa un vicioso patrón de batería muy de Igor. Luego, la guitarra se activa y lo que oímos es muy diferente de lo que les escuchamos a estos tipos un par de años atrás. Se acabaron los riffs serpenteantes, laboriosos, afinados, de una sola nota. En su lugar, encontramos una música agresiva, un híbrido entre la música punk y el thrash metal. Atrás quedaron los gruñidos de Roots. En su lugar, tenemos los enormes rugidos de Derrick Green. Después de derribarte con un opener de traca, llega «Choke». Si crees que «Against» está un poco fuera de lugar, este segundo tema te regresa a tu zona de confort, pues es muy del estilo de las canciones que encontramos en su acojonante Chaos A.D.. La canción es genial y te prepara para el nuevo álbum. Pesado, grueso y agresivo serían adjetivos que le vendrían como anillo al dedo a todo el álbum. La mayoría de las canciones aquí contenidas son bastante aceptables y muy dignas de nuestros headbangings y moshes, especialmente la pieza que más me gusta de todo el álbum, «Common Bonds». Esta canción te mete una hostia de tres pares de cojones en todo el tarro, y muestra el soberbio rango vocal de Green, algo que Sepultura nunca (y probablemente no pudo) explorar con Max dirigiendo el cotarro.

Ojo, pero no todo es oro en esta defenestrada joyita. Against está lleno de grandes momentos, cierto, pero también hay algunos mojones a modo de relleno. «Tribus» es aburrida y se reproduce en toda su extensión al final del álbum. «F.O.E.» y «Unconscious» son muy, pero que muy obviables. «Reza», en la que colabora el vocalista gordaco de Ratos de Porão, es genial… pero solo durante los primeros segundos, ya que luego se vuelve pesada, cansina e incluso algo irritante. Esto mismo le sucede a «Hatred Aside», a la que le sobran un par o tres de minutos.

Aún así, Against se ha llevado muchas más críticas que elogios. Mucha gente quiere comparar esta obra con sus clásicos Beneath the Remains (1989) o Arise (1991), y eso es algo que simplemente no se puede hacer; no es justo, seamos diplomáticos. Against tiene más en común con Chaos A.D. que con sus primeros álbumes, pero incluso así es una obra completamente diferente. Es una fiesta de agresión y de mala leche digna de ser escuchada con los oídos bien abiertos. Muy recomendable.

Rubén de Haro

Tipo peculiar y entrañable criado a medio camino entre Seattle, Sunset Boulevard y las zonas más húmedas de Louisiana. Si coges un mapa, y si cuentas con ciertos conocimientos matemáticos, verás que el resultado es una zona indeterminada entre los estados de Wyoming, South Dakota y Nebraska. Una zona que, por cierto, no he visitado jamás en la vida. No soy nada de fiar y, aunque me gusta “casi todo lo rock/metal”, prefiero las Vans antes que las J’hayber.