Starscape – Colony

Estaba más que claro que la irrupción de Hällas iba a traer sus réplicas, y eso es algo excelente para todos aquellos que amamos rock y heavy metal retro. El caso es que Starscape tampoco es que se parezcan particularmente a los suecos, pero portada, concepto y esa aura épica les acercan en gran parte. Hay aquí heavy metal old school con producción oscura y cruda, casi maquetera. Arrebatos true metal, teclados Hammond, guitarras dobladas… la verdad es que este dueto sueco tiene algo muy interesante entre manos.

Este proyecto que nace con este disco lo forma Per-Olof Göranson a las voces y Anton Eriksson en guitarra, teclado, bajo y batería. Un crack que además tiene una capacidad compositiva muy elevada. Ya en 2020 habían editado su primer EP titulado Pilgrims con dos extensos temas que aquí se incluyen. La calidad del mismo hizo que les fichara una discográfica norteamericana. La palabra “Pilgrim” (era su primer nombre) aparece en las letras de todos los temas por lo que pinta que es un trabajo conceptual de colonización en el espacio exterior. Ya en 2017 hubo una maqueta instrumental por parte de Anton como primera piedra.

Una de las razones por las que podemos compararlos con Hällas es porque sus temas son largos, con estructuras cambiantes y con multitud de coros. En “Pilgrims of the Stars” pasamos de momentos cavernosos a lo metal vikingo de Bathory para luego deambular por heavy metal true de base 80’s, muy de escuela griega. Ese toque futurista lo ponen los teclados, las atmósferas y las voces narradas.

Atención a un corte como “Colony”, que da nombre al disco y se revela como un gran single. Hay momentos en los que la cosa suena a Slough Feg por lo enrevesado del riff. La voz de Per-Olof es rasgada y agónica a la vez que va acompañada de un estribillo potente y de puño en alto. El Hammond también mantiene su cuota de protagonismo con momentos puramente Uriah Heep y solos de guitarra muy trabajados y netamente heavy metal. El pesado bajo de Anton abre “Interstellar” para luego derivar en una compleja línea vocal y un enorme trabajo de guitarras, con percusiones opacas y otra dosis de teclado, que va apareciendo en los momentos clave.

“A New World” da momento de reposo a medio tiempo a la vez que Per-Olof demuestra aquí que es uno de esos cantantes que amas o que detestas. Lo considero ideal para este proyecto, pero puedo entender que tenga detractores. Aquí se muestra teatral y fuerza rasgados y agudos. El estilo empieza a quedar muy marcado y el dueto se mantiene fiel y conservador por momentos.

De la tosquedad y lo ceporro de “Not Build By Human Hands” pasamos a un sonido más NWOBHM, con tappings de guitarra incluidos en un tema instrumental que un poco conecta con sus inicios. El ramalazo Maiden es notorio si bien también hay mucho de la escuela sueca de las bandas de los 80 como Warlord. Terminan con una extensa suite de más de 10 minutos, “Towards the Unknown”, con el sonido general más alto, curiosamente. Teclados introductorios, bajo de base y líneas vocales arriesgadas pero efectivas.

La gracia de este proyecto es que se nota que son primeros pasos, con un sonido tosco y a veces maquetero, pero también es lo mismo que le da ese toque diferencial. Temas muy trabajados, una forma de componer ambiciosa y todo con pocos medios. No está a un nivel de lo que consiguen Bloody Hammers en su sótano, pero estamos ante un proyecto más que interesante. Ahora que estamos pisando Marte es perfecto ponerse a los Starscape como banda sonora a las imágenes… Pintaría a bolazo en el Rocksound con la gente de Metal Cova trayéndolos… Lástima que la sala ya no exista.

Jordi Tàrrega

Coleccionista de discos, películas y libros. Abierto de mente hacia la música y todas sus formas, pero con especial predilección por todas las ramas del rock. Disfruto también con el mero hecho de escribir.