Publicado el 25 de septiembre de 2020
Discográfica: Holy Roar Records
Componentes:
Liam Phelan - Voz, guitarra
Serena Cherry - Guitarra, voz
Chris Prince - Bajo
Mark Lilley - Batería
1. Open Wound (5:36)
2. Click Bait (5:46)
3. Throw Your Heart Away (4:04)
4. Listen to Someone (5:10)
5. Silent Restraint (4:08)
6. What Was She Wearing? (4:43)
7. The Currency of Beauty (5:47)
8. Pearlescent (3:27)
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Pese a que el nombre Svalbard puede inclinarte a pensar que son nórdicos, el cuarteto que nos ocupa es de Bristol. Hace un par de años llegó a mi el segundo disco titulado It’s Hard to Have Hope de esta banda desconocida y me impresionó sobremanera. Comenté entonces:
“Aquí todo goza de una efusión visceral y honesta de emociones profetizadas por la enorme vocalista Serena Cherry. Las melodías de todo el trabajo son brutales a la par de oscuras, las construcciones muy trabajadas y las voces, de esas que destrozan la garganta de cualquier mortal. La desesperación y la pasión se respiran a lo largo de los ocho temas que habitan en el disco, uno de los trabajos más logrados del género en este 2018”.
Pues ahora con su tercer disco me reafirmo y secundo cada una de las palabras que encumbré en 2018. Svalbard dejan de ser una promesa para ser una realidad. Estoy completamente impresionado por este disco. Des de la primera a la última nota, When I Die, Will I Get Better? te sacude los sentimientos y produce una sensación de enganche realmente intensa. El disco juega jodidamente bien todos los elementos: es pesado y denso, tiene grandes y preciosas melodías de post rock. Es increíblemente atmosférico y sobre todo es emocional. Un disco de post hardcore tiene la obligación de ser emocional. Lo ha sido el último de Touché Amoré y lo es el de Svalbard. ¡Menuda semana amigos!
Tras una preciosa y sugerente portada encontramos casi 40 minutos de sabores intensos. Las atmósferas creadas con elementos shoegaze son cautivadoras y de una colorida belleza muy destacable. El disco es abrasador con una alta carga de dolor. Las letras y la temática tiene mensajes notables.
La unión de melodías con los diferentes registros de voz es perfecta. La intensidad gutural mezclada con ese sonido post rock que tanto adoramos es estremecedora. Escuchad “Listen to Someone” y sabréis de lo que estoy hablando. Esta es quizás la canción que mejor defina a Svalbard. Toda la banda luce en toda su máxima expresión en este tercer disco. El mejor de su corta pero ya consagrada carrera.
Rock en todas sus extensiones
