The Awakening – This Alchemy

Descubrí de rebote al grupo The Awakening puesto que fueron teloneros de Wayne Hussey y había una canción disponible para se escuchada. “Other Ghosts” me pareció mágica y brillante con la desnudez de una guitarra y la voz profunda de Ashton Nyte. Tampoco legué a profundizar excesivamente en este combo de rock gótico-dark wave hasta que me he percatado que sacaban su décimo disco de estudio.

Sudafricano de cuna, aunque afincado en Estados Unidos este proyecto posee a un frontman con una voz oscura y profunda tan excepcional como el carisma que derrocha. Mucha imagen, pero es que, además… hay un largo arsenal de canciones perfectamente escritas. El polifacético artista ha sacado en medio de la pandemia un libro de poesía y de historias cortas también. Cuenta en directo con músicos de apoyo, pero en estudio suele trabajar solo.

“Bitter Bliss” funciona de larga intro para entrar en el mundo gótico del combo. Ruidos de fuego y sintetizadores que te van poniendo en situación en un cresecendo con repuntes orquestales. “Into the Machine (Part 1 + 2)” es una canción con alma de pista de baile, oscura, fría y con un rotundo estribillo. Hay aquí los Crematory más experimentales y bastante de la música alemana electrónica de época como Blind Passangers o los Warning. La electrónica campa a sus anchas en ese single (apoyado con vídeo) que es “Zero Down” en el que se narra la explotación de una estrella del rock tras su muerte. Aquí la sombra de los Sisters of Mercy es alargada, lo cual es muy bueno.

La gracia de The Awakening es que todo suena fácil y simple, pero hay mucha carga de profundidad. Estribillos y progresiones como las de “Shadow Call” son muy meritorias. La capa de oscuridad y frío es muy conseguida, y a pesar de ello, Ashton le mete el sentimiento a los temas. “Winter’s Unknown” es épica y calmada, con un piano y efectos acompañando al líder. Contrasta con los ritmos maquinales-industriales de “When the Fear Subsides”. Otra composición que mantiene el estilo, pero le da un aire diferente con esos arreglos de corte más oriental.

Una de las sorpresas la pone la versión de Alphaville “Victory of Love”. Justo el tema que abría aquel maravilloso Forever Young. Excelente resultado en manos de los sudafricanos. Dejan patentes sus referentes, su gusto por las latitudes germanas y no rehúyen de jugar con esos sintetizadores ochenteros. Acústicas y efectos de sonido son lo poco que necesita este músico para elevar su voz en “Take Me Home”. Aquí sí que hay conexión con Bowie y Kate Bush.

Oscuridad de mazmorra en “Empty Garden”, poblada de colores fríos y con enclave en balada. Más atmosférica que melódica. Un momento más danzable se levanta en “All Tomorrow’s Saints” con esos sintetizadores tan de la década de las hombreras. Termina todo con el corte que da título al disco, y que es uno de los más brillantes de la presente obra. Se vuelve a apoyar todo en la profundidad de garganta haciéndolo todo tan fácil como efectivo.

Escuchando el disco ves que este personaje tiene un aura especial y se percibe desde la primera escucha. This Alchemy muestra perfectamente la calidad del proyecto y es un paso más en la dirección correcta (el décimo ya). Tengamos claro que Ashton Nyte es una persona importante dentro de la música oscura y gótica pues desde que empezó en los 90 ha estado trabajando con miembros de Bauhaus, The Cure o The Mission. Y si toca y compone con los más grandes de su género es por méritos propios. Disco variado, oscuro, a veces bailable y a medio camino entre lo gótico y los new romanthics. Vale la pena acercarse a The Awakening…

Jordi Tàrrega

Coleccionista de discos, películas y libros. Abierto de mente hacia la música y todas sus formas, pero con especial predilección por todas las ramas del rock. Disfruto también con el mero hecho de escribir.