The Strokes, Is This It, 2001. Parece que fuese ayer que el debut de los neoyorquinos arrasó en el mundo entero. Un debut que impactó en el rock alternativo y derivados dejando muchas muestras de que la evolución no pasaba por las grandes bandas noventeras venidas a menos –véase Smashing Pumpkins, Pearl Jam, Red Hot Chili Peppers-. Con un aire tan desenfrenado como chulesco, estos pijos de la gran manzana dieron en la tecla en el preciso momento, en el sitio adecuado.
“Una banda del pasado que tomó un viaje hacia el futuro para hacer un álbum”
Sí, no lo podía explicar mejor Julian Casablancas, el frontman de la banda. Lo más curioso de todo es que el sonido de The Strokes no era nada nuevo. Pero era necesario. Rejuvenecieron estilos caducos a modo revival. Nos ofrecieron un disco cargado de garage rock rudo, crudo y bruto.
2001 fue el año Bin Laden, pero en nuestro mundo, el musical, fue el año de The Strokes. Cito a Bin Laden porqué debido al ataque a las Torres Gemelas, Is This It tuvo que ser publicado más tarde de lo previsto y sufrió alguna “reforma”. La fecha prevista para la publicación en los Estados Unidos era el 25 de septiembre, pero acabó viendo la luz el 9 de octubre. Curiosamente, su país, fue el último en el que la banda publicó el disco, pues en julio se lanzó en Australia y en agosto vio la luz en Japón y Reino Unido.
En cuanto a la “reforma” que comento, la canción “New York City Cops” fue cambiada por “When It Started” ya que en la primera la banda raja a placer sobre la policía de NYC. Después del 11-S, mejor no comentar temas peliagudos.
Un debut impecable
Posiblemente estamos frente al debut más poderoso de la historia reciente. Is This It aportó frescura a la nueva cultura popular. Un disco perfectamente construido, con canciones pegadizas que han trascendido a himnos del rock moderno, canciones atrevidas con letras bastante abrasivas.
The Strokes refrescó una escena algo decadente y falta de ideas. Mientras que los titanes del rock jugaban a repetir la fórmula, Julian, Albert y el resto innovaron y explosionaron. Cada canción del disco es un éxito, quizás no perfectas, pero todas tienen la capacidad de entretener y gustar, cuando acaba el disco sientes la necesidad de darle al repeat sin tregua. Quizás hay dos canciones que destacan sobremanera del resto como pueden ser “Someday” y “Last Nite”, pero del resto no hay una floja. Esto convierte Is This It en un debut impecable.
Is This It
¿Cuántas veces he escuchado este disco? No diré infinidad pero si que muchas.
Hace 20 años que lo escucho y, pese a que viví una etapa alejado de los estilos propios de Is This It, siempre he acabado regresando a él. Lo que puedo afirmar es que, a raíz del mayestático The New Abnormal (2020), mi amor por The Strokesha aumentado considerablemente.
Las canciones que componen Is This It pasan de temas sombríos y tristes adornados con instrumentación alegre a canciones de tono más humorístico con melodías más abiertas. La temática era de actualidad con letras abiertas a interpretaciones variadas. La yuxtaposición comentada de canciones alegres con letras tristes demostró que la banda comía a parte.
Los riffs de guitarra suenan frescos y las voces de Julian Casablancas recitan las letras en una mezcla de contrastes entre Lou Reed y Iggy Pop. Muchas personas tendieron a comprar The Strokes con The White Stripes y no es moco de pavo. La diferencia es que los neoyorquinos avasallaron en su debut mientras que Jack White lo hizo mucho más tarde.
Lo malo de Is This It es la duración. Poco más de 35 minutos de duración es tan poco que necesitas más. Lo malo es posiblemente lo mejor en cierta forma. Pues toda la imaginación de los artistas queda condensada en esos 11 cortes brillantes, no hay canciones de relleno, no hay flaquezas.
Arrancando con “Is This It” nos encontramos con una canción atípica de arranque. Ritmos semi lentos con voz compasiva, triste y con cierta ¿distorsión?. Riff medio punteado y muy simple pero super efectivo.
“The Modern Age” vitaliza la propuesta con un riff mucho más alegre y ligero, con un Julian que empieza a mostrar su verdadero potencial en la interpretación. Ésta es la primera canción que realmente suena a The Strokes en esencia. Evolutiva y apasionada, una canción top del catálogo.
En tercer puesto encontramos una de las tapadas del disco, “Soma”. Se trata de una canción corta, no más de dos y medio de duración, pero madura. Una canción con un riff muy colorido y unas interpretaciones exquisitas de un polifacético Casablancas.
“Barely Legal” se sitúa como la más larga del trabajo con casi cuatro minutos de duración. Arranca sutilmente con un ritmo agradable de guitarra y batería sobre las que se sobreponen las voces. La canción se desenvuelve ligera impulsada sobre todo por el trabajo de la batería. A los 1:35 arranca el verdadero potencial de la canción, estrofa propulsada por un Casablancas pletórico junto a un Albert Hammond Jr. haciendo magia con su guitarra.
Y entonces llega “Someday”, la primera piedra angular de The Strokes. Archiconocida y ultra radiada, una de las canciones que encumbraron a los neoyorquinos a la cima. Ritmos festivos, simpleza, estribillo pegadizo, actitud y buenas formas. “Someday” es un temazo lo cojas por donde quieras.
Con “Alone, Together” tocan la tecla acertada nuevamente. Una canción que crece con las escuchas pero que ubicada entre “Someday” y “Last Nite” pierde todo su potencial para encumbrar a las otras dos piezas. Algo parecido pasa con “Hard to Explain”. Su ubicación la diluye pese al genial trabajo de Julian en la pieza. Una canción genial por cierto.
Volvemos un pasito atrás para dejarnos llevar en volandas en esa “Last Nite”. El himno que lo cambió todo. Ésta es la canción que dio el vuelco al rock global. Lo reafirmo y me quedo tan ancho. Ritmos, letras, voces, instrumentación, pose, estribillo y solo de Hammond Jr.. Una canción global que habla por si sola. Imposible no corear ese “Last nite, she said” a pulmón.
“New York City Cops” sigue la estela con su vertiginoso estilo. Lástima que tuvo que ser censurada… aún así la pudimos rescatar en las ediciones europeas. Un canción de corte más punk, con letras abrasivas y ritmos rápidos. Un estribillo poderoso e hipnótico. Una pieza elemental en el disco.
Llegando al no esperado final nos encontramos con “Trying Your Luck”, una canción más melódica que nos muestra la parte más sensiblona de la banda. Y como cierre tenemos la genial “Take It Or Leave It”, otro corte 100% Strokes. Agresiva y melódica a partes iguales con un gran trabajo de la banda al completo pero sobre todo Casablancas se luce con los cambios de estilo.
Cifras y récords
Is This It fue un éxito comercial y entró en el número dos en el Reino Unido tras vender 48.393 copias en la primera semana. El álbum alcanzó el puesto 71 en el UK Albums Chart de 2001. Consiguió un disco de oro de la British Phonographic Industry tras entrar continuamente en la lista desde su publicación en agosto hasta el final del año.
En Estados Unidos, Is This It entró en el puesto número 74 después de vender 16.000 unidades en la primera semana. Se vendieron 20.000 copias por semana en Estados Unidos entre octubre de 2001 y enero de 2002, cuando una actuación de la banda en el programa nacional Saturday Night Live provocó un aumento temporal en las ventas. Este aumento del 60% permitió que el álbum alcanzara su cima en el puesto 33 del Billboard 200. Antes había llegado al 63.
Is This It consiguió el disco de oro según la Recording Industry Association of America en febrero de 2002 por vender más de 500.000 copias en Estados Unidos. Así como según la Canadian Recording Industry Association en abril por vender más de 50.000 unidades en Canadá. En 2002, el álbum consiguió el estatus de disco de platino en el Reino Unido y Australia por ventas superiores a 500.000 y 70.000 copias respectivamente. El número medio de ejemplares vendidos por semana en Estados Unidos era de 7.000 hacia octubre de 2002, cuando la reedición del disco junto con un DVD extra causó un incremento en las ventas. Is This It alcanzó el disco de platino en Canadá en 2004 tras conseguir vender 100.000 unidades en este país. Al comienzo de 2006, el disco había vendido más de 600.000 copias en el Reino Unido y más de un millón en Estados Unidos.
Fuente: Wikipedia
En resumen…
Quizás el público en general desista de querer entrar en el mundo de The Strokes por su sonido moderno e incluso más cercano al pop de masas, una banda pujada a la cima por prensa. Vendidos como los salvadores del rock. No salvaron el rock, pues nunca ha necesitado salvación alguna.
Lo que si que es necesario y obligado citar y reconocer es que The Strokes dieron una vuelta de tuerca muy necesaria, fundaron el rock moderno y su evolución hacía el indie. Gracias a ellos descubrimos a Arctic Monkeys o Franz Ferdinand entre otros. Quizás no fueron su inspiración, pero seguro que su fueron un motivo.
Impecable debut e imprescindible disco. No por nada es considerado un disco Top 10 de la década de los 2000 y uno de los discos más queridos del siglo XXI.